Sí... Es difícil entender como se puede decir que estamos gobernados por comunistas y ver impasibles la privatización de la Sanidad, que ya me dirás lo que tiene de comunista, ni simplemente izquierdoso.
No he dicho que no fuera consensuado, no me refiero a un capricho del momento, ni de lejos. Pero por muy acordado por fuerzas políticas que fuese no quiere decir que todo ello proviniese de una aplicación justa del famoso artículo. Fue demasiado grave, demasiado el precio a pagar por Catalunya.
Habría que esperar al resultado de aquella consulta puramente catalana, consulta que como toma de pulso, conciencia o lo que fuere no tuvo ni tiene justificación alguna para realizarse dentro de un marco tan amenazador y tan agresivo. Consulta, que aun así, intentó hacerse dentro de la mayor tranquilidad, entusiasmo y sosiego de la ciudadanía. No había lugar a las cargas policiales, que no hacían más que obedecer órdenes, ni al aparcamiento amenazador durante días y días de más de cien furgones cargados de policia en el puerto así como recurrir al fletaje de barcos italianos con enorme capacidad y desastroso mantenimiento. Todo ello carísimo, pero no importaba, lo importante era seguir la voz de tantos y tantos, aquella que decía ¡a por ellos. ¡ ¡¡¡Vergüenza de pais. Que una vez realizada esa consulta las cosas tomaran un cariz contrario al gobierno, entonces sí que habría una justificación para que éste actuara aunque siempre lo primero sería la buena comunicación y la voluntad de acercamiento.
Entre multitud de visiones solo recordar la actitud de aquella mujer arrebatada, la tal Soraya, que en su frenesí decía a voz en grito que los catalanes utilizaban a sus hijos como escudos humanos. Hay que ser mala entraña como dicen en Andalucia.
Y mira, como no hablo a tontas y a locas ni mucho menos, pues no puedo por menos de seguir condenando hechos tan vituperables para un pueblo que se precie, el resto del pueblo español en una buena mayoría. El a por ellos quedará como frase señalada en la Historia.
