El problema de Terelu es que cae mal; no despierta ninguna empatía. No pasa nada por engordar, hay mucha gente que se la trae al pairo, entre otras cosas porque no basan su valía en su cuerpo. El caso es que Terelu no ve más allá de sus vestidos lenceros talla 38 que hace 10 años que no puede lucir sin marcar lorzas; por no hablar de que justificar su aumento de peso en el cáncer resulta directamente indignante. Podría empezar, sin ir más lejos, por decir que le gusta comer a dos carrillos y que pasa de hacer deporte.Pues aunque a veces yo también me pitorree un poco de ella, la verdad es que me da un poco de pena. Anda que no hay jovencitas muchísimo más gordas que ella, al fin y al cabo no lleva ningún bikini escandaloso esparciendo lorzas y morcillas sinó un bañador negro y discreto. Tendrá derecho a ir a la playa no? Tampoco está haciendo un posando "sepsi", creo. Cuando se tienen esos cuerpos y tendència a aballenarse es muy difícil estar delgado. Yo soy de estatura baja y siempre he sido delgadísima, però desde que he llegado a los 50 hago todos los sacrificios del mundo para no pasar de la talla 38, como mucho la 40 en los peores momentos, por eso la entiendo tan bien. No todo el mundo tiene tanta capacidad de autodisciplina o a lo mejor ella prefiere el buen comer aunque esté gorda, y si se siente a gusto mejor para ella, que la vida son cuatro dias.