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El hilo paranormal de Cotilleando
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Bella historia de un animal convertido en espiritu guia
https://supercurioso.com/la-historia-del-ciervo-que-visito-a-un-hombre-el-dia-antes-de-su-muerte/
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yo creo que algo ocultan...o serà que he visto mucho Los expedientes x?
Astronauta francesa gritó "¡La tierra debe ser advertido!" antes de intentar suicidarse
Categoría:Info y Teorias
11/18/2016
No hay comentarios
Los astronautas salieron y vieron cosas extrañas que cobraron un peaje en sus vidas. Claudie Haigneré es una de ellas.
El incidente tuvo lugar en el 2008, pero fue nuevamente puesto en la atención por la polémica muerte de Max Spires. Spires fue un investigador británico de ovnis que fue encontrado muerto en el sofá después de enviar mensajes de texto a su madre que debía iniciar una investigación si le ocurría algo. Parece que aquellos que se encuentran o persiguen extraterrestres están destinados a meterse en problemas.
►Teórico de la conspiración fue encontrado muerto días después de enviar un mensajes de texto a su madre diciendo que investige si 'algo le pasaba a él'
Claudie Haigneré es una médica francesa y política, pero antes de eso, ella era una astronauta. En 1996, Claudie y su marido, Jean-Pierre Haigneré pasaron más de dos semanas a bordo de la estación espacial MIR rusa.
La astronauta Claudie Haigneré en la ISS
Después de estudiar la reumatología y la neurociencia, la investigación espacial de Claudie tuvo como objetivo proporcionar información sobre cómo los astronautas adaptaron sus habilidades motoras y cognitivas en gravedad cero.
En 2001, se convirtió en la primera mujer europea en visitar la Estación Espacial Internacional. Ella vio cosas que los astronautas regulares nunca llegan a ver. Y probablemente dejó una marca en ella.
Claudie se retiró del trabajo espacial y entre 2002 y 2005 se involucró con la política, actuando como delegada ministerial de investigación y nuevas tecnologías. Después de los recortes presupuestarios, comenzó a trabajar en un laboratorio de biología en el Instituto Pasteur de París. Informes de los medios de comunicación oscuros afirman que mientras estaba allí, Claudie estaba a la vanguardia de la investigación del ADN humano/extraterrestre. Y entonces las cosas comenzaron a ir hacia el sur para ella.
En 2008, un incendio devastó el laboratorio en el que trabajó:
El fuego se desató el miércoles en un laboratorio de biología del Instituto Pasteur de París, famoso por su investigación sobre la lucha contra las enfermedades infecciosas, dijeron funcionarios.
No se informó de víctimas, y ningún material sensible o virus fueron afectados por el incendio, que fue extinguido por los bomberos, dijo un funcionario del instituto. El funcionario no estaba autorizado a ser nombrado públicamente de acuerdo con la política de la compañía.
La causa del incendio no estaba clara.
En diciembre de 2008, los medios de comunicación informaron que Claudie Haigneré tuvo que ser llevado de urgencia a un hospital local después de un intento de su***dio. Había tomado un puñado de pastillas para dormir y gritaba: "¡La Tierra debe ser advertida!"
Antes de caer en coma, Claudie tuvo que ser contenida. Una reacción tan fuerte de una renombrada y respetada científica astronauta no podría haber venido sin una causa. Mientras que la propia Claudie culpó a todo el incidente sobre el síndrome de burnout, los teóricos de la conspiración están convencidos de que había algo más oscuro que la determinó a tratar de tomar su propia vida.
Fuentes afirman que la estancia de la ex astronauta en la órbita de la Tierra abrió sus ojos con respecto a la historia oculta de nuestro planeta:
Los informes internos del FSB sobre la Dra. Haigneré indican que desde su regreso del espacio se había convencido de que nuestra Tierra había sido visitada en nuestro pasado por "antiguos astronautas" que no sólo habían colonizado nuestro Planeta, sino que habían manipulado genéticamente la forma de vida semi-humana en nuestra raza humana actual.
►Los antiguos astronautas y el Culto Cargo: paralelismos interesantes y pistas significativas
¿Claudie Haigneré seguirá preocupada por algo?
Claudie está viva y bien hoy pero ella elige no hablar públicamente sobre su calvario. Sólo podemos especular sobre sus razones para permanecer en silencio, pero a veces, las acciones hablan por sí mismas.
Astronauta francesa gritó "¡La tierra debe ser advertido!" antes de intentar suicidarse
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11/18/2016
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Los astronautas salieron y vieron cosas extrañas que cobraron un peaje en sus vidas. Claudie Haigneré es una de ellas.
El incidente tuvo lugar en el 2008, pero fue nuevamente puesto en la atención por la polémica muerte de Max Spires. Spires fue un investigador británico de ovnis que fue encontrado muerto en el sofá después de enviar mensajes de texto a su madre que debía iniciar una investigación si le ocurría algo. Parece que aquellos que se encuentran o persiguen extraterrestres están destinados a meterse en problemas.
►Teórico de la conspiración fue encontrado muerto días después de enviar un mensajes de texto a su madre diciendo que investige si 'algo le pasaba a él'
Claudie Haigneré es una médica francesa y política, pero antes de eso, ella era una astronauta. En 1996, Claudie y su marido, Jean-Pierre Haigneré pasaron más de dos semanas a bordo de la estación espacial MIR rusa.
La astronauta Claudie Haigneré en la ISS
Después de estudiar la reumatología y la neurociencia, la investigación espacial de Claudie tuvo como objetivo proporcionar información sobre cómo los astronautas adaptaron sus habilidades motoras y cognitivas en gravedad cero.
En 2001, se convirtió en la primera mujer europea en visitar la Estación Espacial Internacional. Ella vio cosas que los astronautas regulares nunca llegan a ver. Y probablemente dejó una marca en ella.
Claudie se retiró del trabajo espacial y entre 2002 y 2005 se involucró con la política, actuando como delegada ministerial de investigación y nuevas tecnologías. Después de los recortes presupuestarios, comenzó a trabajar en un laboratorio de biología en el Instituto Pasteur de París. Informes de los medios de comunicación oscuros afirman que mientras estaba allí, Claudie estaba a la vanguardia de la investigación del ADN humano/extraterrestre. Y entonces las cosas comenzaron a ir hacia el sur para ella.
En 2008, un incendio devastó el laboratorio en el que trabajó:
El fuego se desató el miércoles en un laboratorio de biología del Instituto Pasteur de París, famoso por su investigación sobre la lucha contra las enfermedades infecciosas, dijeron funcionarios.
No se informó de víctimas, y ningún material sensible o virus fueron afectados por el incendio, que fue extinguido por los bomberos, dijo un funcionario del instituto. El funcionario no estaba autorizado a ser nombrado públicamente de acuerdo con la política de la compañía.
La causa del incendio no estaba clara.
En diciembre de 2008, los medios de comunicación informaron que Claudie Haigneré tuvo que ser llevado de urgencia a un hospital local después de un intento de su***dio. Había tomado un puñado de pastillas para dormir y gritaba: "¡La Tierra debe ser advertida!"
Antes de caer en coma, Claudie tuvo que ser contenida. Una reacción tan fuerte de una renombrada y respetada científica astronauta no podría haber venido sin una causa. Mientras que la propia Claudie culpó a todo el incidente sobre el síndrome de burnout, los teóricos de la conspiración están convencidos de que había algo más oscuro que la determinó a tratar de tomar su propia vida.
Fuentes afirman que la estancia de la ex astronauta en la órbita de la Tierra abrió sus ojos con respecto a la historia oculta de nuestro planeta:
Los informes internos del FSB sobre la Dra. Haigneré indican que desde su regreso del espacio se había convencido de que nuestra Tierra había sido visitada en nuestro pasado por "antiguos astronautas" que no sólo habían colonizado nuestro Planeta, sino que habían manipulado genéticamente la forma de vida semi-humana en nuestra raza humana actual.
►Los antiguos astronautas y el Culto Cargo: paralelismos interesantes y pistas significativas
¿Claudie Haigneré seguirá preocupada por algo?
Claudie está viva y bien hoy pero ella elige no hablar públicamente sobre su calvario. Sólo podemos especular sobre sus razones para permanecer en silencio, pero a veces, las acciones hablan por sí mismas.
yo creo que algo ocultan...o serà que he visto mucho Los expedientes x?
Astronauta francesa gritó "¡La tierra debe ser advertido!" antes de intentar suicidarse
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11/18/2016
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Los astronautas salieron y vieron cosas extrañas que cobraron un peaje en sus vidas. Claudie Haigneré es una de ellas.
El incidente tuvo lugar en el 2008, pero fue nuevamente puesto en la atención por la polémica muerte de Max Spires. Spires fue un investigador británico de ovnis que fue encontrado muerto en el sofá después de enviar mensajes de texto a su madre que debía iniciar una investigación si le ocurría algo. Parece que aquellos que se encuentran o persiguen extraterrestres están destinados a meterse en problemas.
►Teórico de la conspiración fue encontrado muerto días después de enviar un mensajes de texto a su madre diciendo que investige si 'algo le pasaba a él'
Claudie Haigneré es una médica francesa y política, pero antes de eso, ella era una astronauta. En 1996, Claudie y su marido, Jean-Pierre Haigneré pasaron más de dos semanas a bordo de la estación espacial MIR rusa.
La astronauta Claudie Haigneré en la ISS
Después de estudiar la reumatología y la neurociencia, la investigación espacial de Claudie tuvo como objetivo proporcionar información sobre cómo los astronautas adaptaron sus habilidades motoras y cognitivas en gravedad cero.
En 2001, se convirtió en la primera mujer europea en visitar la Estación Espacial Internacional. Ella vio cosas que los astronautas regulares nunca llegan a ver. Y probablemente dejó una marca en ella.
Claudie se retiró del trabajo espacial y entre 2002 y 2005 se involucró con la política, actuando como delegada ministerial de investigación y nuevas tecnologías. Después de los recortes presupuestarios, comenzó a trabajar en un laboratorio de biología en el Instituto Pasteur de París. Informes de los medios de comunicación oscuros afirman que mientras estaba allí, Claudie estaba a la vanguardia de la investigación del ADN humano/extraterrestre. Y entonces las cosas comenzaron a ir hacia el sur para ella.
En 2008, un incendio devastó el laboratorio en el que trabajó:
El fuego se desató el miércoles en un laboratorio de biología del Instituto Pasteur de París, famoso por su investigación sobre la lucha contra las enfermedades infecciosas, dijeron funcionarios.
No se informó de víctimas, y ningún material sensible o virus fueron afectados por el incendio, que fue extinguido por los bomberos, dijo un funcionario del instituto. El funcionario no estaba autorizado a ser nombrado públicamente de acuerdo con la política de la compañía.
La causa del incendio no estaba clara.
En diciembre de 2008, los medios de comunicación informaron que Claudie Haigneré tuvo que ser llevado de urgencia a un hospital local después de un intento de su***dio. Había tomado un puñado de pastillas para dormir y gritaba: "¡La Tierra debe ser advertida!"
Antes de caer en coma, Claudie tuvo que ser contenida. Una reacción tan fuerte de una renombrada y respetada científica astronauta no podría haber venido sin una causa. Mientras que la propia Claudie culpó a todo el incidente sobre el síndrome de burnout, los teóricos de la conspiración están convencidos de que había algo más oscuro que la determinó a tratar de tomar su propia vida.
Fuentes afirman que la estancia de la ex astronauta en la órbita de la Tierra abrió sus ojos con respecto a la historia oculta de nuestro planeta:
Los informes internos del FSB sobre la Dra. Haigneré indican que desde su regreso del espacio se había convencido de que nuestra Tierra había sido visitada en nuestro pasado por "antiguos astronautas" que no sólo habían colonizado nuestro Planeta, sino que habían manipulado genéticamente la forma de vida semi-humana en nuestra raza humana actual.
►Los antiguos astronautas y el Culto Cargo: paralelismos interesantes y pistas significativas
¿Claudie Haigneré seguirá preocupada por algo?
Claudie está viva y bien hoy pero ella elige no hablar públicamente sobre su calvario. Sólo podemos especular sobre sus razones para permanecer en silencio, pero a veces, las acciones hablan por sí mismas.
"Vida semi-humana"?
Qué quiere decir esto?
Una vez, me dijeron que la NASA tiene un montón de fotografías sobre extraterrestes y vida en otros planetas. Y, que las tienen escondidas porque, sino, causarían un trauma a la población.
Había unos vídeos de alguien de alguna institución mundial (no recuerdo bien si era la ONU) que hablaba sobre extraterrestres en una conferencia.
D
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Si, yo tambien he oido esas historias y me las creo, si ya decian que Kennedy queria blanquear todo el tema ovnis! creo que la Nasa, la Cia, etc tienen pruebas y un astronauta cuyo nombre ahora no recuerdo lo ha contado hace poco en un documental, que decia que los habian mandado callar, el hombre tiene mas de ochenta años ya...yo es que me lo creo todo...no sè que habrà querido decir, pero asi, especulando, imagino que aquì habrìa vida muy primitiva y los extraterrestres habràn hecho alguna cruza para llegar a lo que somos los humanos, igual estoy delirando o haciendo conjeturas tontas, pero asi lo interpretè..."Vida semi-humana"?
Qué quiere decir esto?
Una vez, me dijeron que la NASA tiene un montón de fotografías sobre extraterrestes y vida en otros planetas. Y, que las tienen escondidas porque, sino, causarían un trauma a la población.
Había unos vídeos de alguien de alguna institución mundial (no recuerdo bien si era la ONU) que hablaba sobre extraterrestres en una conferencia.
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si, es que con este tema hay mucha tela que contar, yo tambien creo algo de eso...que nos ocultan cosas, ni lo dudo!
Le ocurrió a Paloma Gomez Borrero (qpd), así lo cuenta en su libro "Fantasmas de Roma":
Ocurrió en el invierno de 1976. Estaba invitada a una cena privada en casa del entonces ministro consejero. Era la primera vez que acudía a esa otra zona del palacio, justo en el ala frente a la residencia del embajador y los comedores y salones de representación. Como sucede siempre que se tiene prisa, el tráfico se me puso en contra y llegué con casi media hora de retraso. Subí presurosa a la primera planta y entré en un amplio recibidor al que daban cuatro puertas.
¿Cuál de ellas sería la de mi anfitrión?, pensaba yo, cuando me percaté de que en un rincón había un fraile vestido con hábito negro y capucha. Me pareció muy ensimismado porque tenía la cabeza inclinada y no la levantó al hacerme yo presente.
Encontrarse con un cura o una monja en la embajada ante la Santa Sede no sorprende a nadie; personalmente, iba tan agobiada por el retraso que en aquel momento me pareció una gran suerte. Así que me dirigí a aquel meditabundo fraile:
—Buenas noches —le saludé, y añadí—: ¿Sabe usted cuál es la puerta de la casa del ministro consejero?
Como si tuviera voto de silencio, no me habló sino que me respondió extendiendo la mano y señalando claramente una de las puertas. Llamé al timbre y un criado abrió diciéndome que me estaba esperando y que tuviera la bondad de pasar.
Sin embargo, antes de entrar me volví hacia el que me parecía un capuchino, preguntándole si también él quería entrar. El fraile continuó mudo e impasible, pero con la cabeza me hizo un gesto de negación.
Poco después, al saludar a los anfitriones y pedir disculpas por la tardanza, comenté el encuentro con el misterioso personaje:
—Menos mal que había un fraile en la antecámara y me indicó la puerta de vuestra casa, que si no llegaba aún con más retraso.
—¿Un fraile? ¿Que hay un fraile en el hall? Qué raro, si no esperamos a nadie; y de todas maneras, de la portería no nos han avisado que había subido nadie —respondió el ministro consejero.
Como yo insistía en mi versión de los hechos, llamaron al camarero.
—Giovanni, ¿sabe usted quién puede ser el religioso que dice la señora?
El tal Giovanni, sin inmutarse, explicó que la única persona que estaba en la antecámara al abrir la puerta era yo.
—Pero cómo —le atajé, bastante contrariada de que me tomaran por loca o visionaria—. ¿No ha oído usted cómo le decía a un fraile bajito con hábito negro si él también venía a la cena?
—Sí, señora —contestó—, lo he oído, pero no sé a quién se dirigía, porque le aseguro que no había nadie.
Pero entonces reaccionaron el ministro consejero, el criado y varios de los invitados, y al unísono exclamaron:
—¡Seguro que era fray Piccolo!
Volvimos a abrir la puerta y, efectivamente, en el hall no estaba «mi capuchino». Pero aquella misma noche tuve la oportunidad de enterarme de la historia completa de este espíritu que hace sentir su presencia a base de aroma de flores por los pasillos, de pasos, de ventanas que se cierran y que después aparecen abiertas, de puertas a las que se ha dado dos vueltas de llave desde dentro cuando la llave está bien guardada en un armario.
Muchos, entre ellos un pintor y la propia embajadora Pilar de Arístegui, han sido testigos de esa intangible presencia, pero que yo sepa, con el hábito de su Orden le hemos visto poquísimas personas. Creo que fray Piccolo debía de saber que algún día escribiría sobre él, y decidió conocerme de antemano, o que yo le conociera a él.
Parece ser que en el siglo XVIII un cierto fray Pietro fue encargado por su congregación para llevar a cabo una gestión relacionada con la legación española, y para ello frecuentaba con asiduidad la cancillería. No debía ser ajeno a las vanidades mundanas, porque acabó por convertirse en un habitual de las fiestas y recepciones que se organizaban en el palacio español. Como era de pequeña estatura, le empezaron a llamar fray Piccolo, o sea fray Pequeño.
Pequeño, sí, pero apasionado y resultón. Sucedió que además de las tentaciones del mundo, sucumbió a las de la carne, y como dice el refrán que del roce nace el cariño, se convirtió en el amante de una dama española, esposa de un noble miembro de la representación diplomática. Una pasión ardiente, pero clandestina, que dejó de serlo la noche que el marido traicionado les descubrió, avisado por un criado, en flagrante delito.
El esposo irrumpió en el dormitorio, espada en mano, dispuesto a lavar su honor con la sangre del rival, al mejor estilo calderoniano. La leyenda nos cuenta que fray Piccolo salió corriendo por los pasillos del palacio, pero su carrera no fue larga. La huida terminó al atravesarle el corazón el acero del marido burlado.
Por respeto al marido no figuran en los anales de la historia de la embajada ni su nombre, ni el de la adúltera, ni siquiera el trágico episodio. Pero el pecador fraile perjuro de sus votos de castidad vaga por los recovecos del palacio, buscando el perdón a su culpa. O buscando a la amada, porque en cuestiones de amore los italianos son incorregibles.
Ocurrió en el invierno de 1976. Estaba invitada a una cena privada en casa del entonces ministro consejero. Era la primera vez que acudía a esa otra zona del palacio, justo en el ala frente a la residencia del embajador y los comedores y salones de representación. Como sucede siempre que se tiene prisa, el tráfico se me puso en contra y llegué con casi media hora de retraso. Subí presurosa a la primera planta y entré en un amplio recibidor al que daban cuatro puertas.
¿Cuál de ellas sería la de mi anfitrión?, pensaba yo, cuando me percaté de que en un rincón había un fraile vestido con hábito negro y capucha. Me pareció muy ensimismado porque tenía la cabeza inclinada y no la levantó al hacerme yo presente.
Encontrarse con un cura o una monja en la embajada ante la Santa Sede no sorprende a nadie; personalmente, iba tan agobiada por el retraso que en aquel momento me pareció una gran suerte. Así que me dirigí a aquel meditabundo fraile:
—Buenas noches —le saludé, y añadí—: ¿Sabe usted cuál es la puerta de la casa del ministro consejero?
Como si tuviera voto de silencio, no me habló sino que me respondió extendiendo la mano y señalando claramente una de las puertas. Llamé al timbre y un criado abrió diciéndome que me estaba esperando y que tuviera la bondad de pasar.
Sin embargo, antes de entrar me volví hacia el que me parecía un capuchino, preguntándole si también él quería entrar. El fraile continuó mudo e impasible, pero con la cabeza me hizo un gesto de negación.
Poco después, al saludar a los anfitriones y pedir disculpas por la tardanza, comenté el encuentro con el misterioso personaje:
—Menos mal que había un fraile en la antecámara y me indicó la puerta de vuestra casa, que si no llegaba aún con más retraso.
—¿Un fraile? ¿Que hay un fraile en el hall? Qué raro, si no esperamos a nadie; y de todas maneras, de la portería no nos han avisado que había subido nadie —respondió el ministro consejero.
Como yo insistía en mi versión de los hechos, llamaron al camarero.
—Giovanni, ¿sabe usted quién puede ser el religioso que dice la señora?
El tal Giovanni, sin inmutarse, explicó que la única persona que estaba en la antecámara al abrir la puerta era yo.
—Pero cómo —le atajé, bastante contrariada de que me tomaran por loca o visionaria—. ¿No ha oído usted cómo le decía a un fraile bajito con hábito negro si él también venía a la cena?
—Sí, señora —contestó—, lo he oído, pero no sé a quién se dirigía, porque le aseguro que no había nadie.
Pero entonces reaccionaron el ministro consejero, el criado y varios de los invitados, y al unísono exclamaron:
—¡Seguro que era fray Piccolo!
Volvimos a abrir la puerta y, efectivamente, en el hall no estaba «mi capuchino». Pero aquella misma noche tuve la oportunidad de enterarme de la historia completa de este espíritu que hace sentir su presencia a base de aroma de flores por los pasillos, de pasos, de ventanas que se cierran y que después aparecen abiertas, de puertas a las que se ha dado dos vueltas de llave desde dentro cuando la llave está bien guardada en un armario.
Muchos, entre ellos un pintor y la propia embajadora Pilar de Arístegui, han sido testigos de esa intangible presencia, pero que yo sepa, con el hábito de su Orden le hemos visto poquísimas personas. Creo que fray Piccolo debía de saber que algún día escribiría sobre él, y decidió conocerme de antemano, o que yo le conociera a él.
Parece ser que en el siglo XVIII un cierto fray Pietro fue encargado por su congregación para llevar a cabo una gestión relacionada con la legación española, y para ello frecuentaba con asiduidad la cancillería. No debía ser ajeno a las vanidades mundanas, porque acabó por convertirse en un habitual de las fiestas y recepciones que se organizaban en el palacio español. Como era de pequeña estatura, le empezaron a llamar fray Piccolo, o sea fray Pequeño.
Pequeño, sí, pero apasionado y resultón. Sucedió que además de las tentaciones del mundo, sucumbió a las de la carne, y como dice el refrán que del roce nace el cariño, se convirtió en el amante de una dama española, esposa de un noble miembro de la representación diplomática. Una pasión ardiente, pero clandestina, que dejó de serlo la noche que el marido traicionado les descubrió, avisado por un criado, en flagrante delito.
El esposo irrumpió en el dormitorio, espada en mano, dispuesto a lavar su honor con la sangre del rival, al mejor estilo calderoniano. La leyenda nos cuenta que fray Piccolo salió corriendo por los pasillos del palacio, pero su carrera no fue larga. La huida terminó al atravesarle el corazón el acero del marido burlado.
Por respeto al marido no figuran en los anales de la historia de la embajada ni su nombre, ni el de la adúltera, ni siquiera el trágico episodio. Pero el pecador fraile perjuro de sus votos de castidad vaga por los recovecos del palacio, buscando el perdón a su culpa. O buscando a la amada, porque en cuestiones de amore los italianos son incorregibles.
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que bonita historia, y que privilegiada Paloma, que pudo vivirla, que descanse en paz...
yo creo que algo ocultan...o serà que he visto mucho Los expedientes x?
Astronauta francesa gritó "¡La tierra debe ser advertido!" antes de intentar suicidarse
Categoría:Info y Teorias
11/18/2016
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Los astronautas salieron y vieron cosas extrañas que cobraron un peaje en sus vidas. Claudie Haigneré es una de ellas.
El incidente tuvo lugar en el 2008, pero fue nuevamente puesto en la atención por la polémica muerte de Max Spires. Spires fue un investigador británico de ovnis que fue encontrado muerto en el sofá después de enviar mensajes de texto a su madre que debía iniciar una investigación si le ocurría algo. Parece que aquellos que se encuentran o persiguen extraterrestres están destinados a meterse en problemas.
►Teórico de la conspiración fue encontrado muerto días después de enviar un mensajes de texto a su madre diciendo que investige si 'algo le pasaba a él'
Claudie Haigneré es una médica francesa y política, pero antes de eso, ella era una astronauta. En 1996, Claudie y su marido, Jean-Pierre Haigneré pasaron más de dos semanas a bordo de la estación espacial MIR rusa.
La astronauta Claudie Haigneré en la ISS
Después de estudiar la reumatología y la neurociencia, la investigación espacial de Claudie tuvo como objetivo proporcionar información sobre cómo los astronautas adaptaron sus habilidades motoras y cognitivas en gravedad cero.
En 2001, se convirtió en la primera mujer europea en visitar la Estación Espacial Internacional. Ella vio cosas que los astronautas regulares nunca llegan a ver. Y probablemente dejó una marca en ella.
Claudie se retiró del trabajo espacial y entre 2002 y 2005 se involucró con la política, actuando como delegada ministerial de investigación y nuevas tecnologías. Después de los recortes presupuestarios, comenzó a trabajar en un laboratorio de biología en el Instituto Pasteur de París. Informes de los medios de comunicación oscuros afirman que mientras estaba allí, Claudie estaba a la vanguardia de la investigación del ADN humano/extraterrestre. Y entonces las cosas comenzaron a ir hacia el sur para ella.
En 2008, un incendio devastó el laboratorio en el que trabajó:
El fuego se desató el miércoles en un laboratorio de biología del Instituto Pasteur de París, famoso por su investigación sobre la lucha contra las enfermedades infecciosas, dijeron funcionarios.
No se informó de víctimas, y ningún material sensible o virus fueron afectados por el incendio, que fue extinguido por los bomberos, dijo un funcionario del instituto. El funcionario no estaba autorizado a ser nombrado públicamente de acuerdo con la política de la compañía.
La causa del incendio no estaba clara.
En diciembre de 2008, los medios de comunicación informaron que Claudie Haigneré tuvo que ser llevado de urgencia a un hospital local después de un intento de su***dio. Había tomado un puñado de pastillas para dormir y gritaba: "¡La Tierra debe ser advertida!"
Antes de caer en coma, Claudie tuvo que ser contenida. Una reacción tan fuerte de una renombrada y respetada científica astronauta no podría haber venido sin una causa. Mientras que la propia Claudie culpó a todo el incidente sobre el síndrome de burnout, los teóricos de la conspiración están convencidos de que había algo más oscuro que la determinó a tratar de tomar su propia vida.
Fuentes afirman que la estancia de la ex astronauta en la órbita de la Tierra abrió sus ojos con respecto a la historia oculta de nuestro planeta:
Los informes internos del FSB sobre la Dra. Haigneré indican que desde su regreso del espacio se había convencido de que nuestra Tierra había sido visitada en nuestro pasado por "antiguos astronautas" que no sólo habían colonizado nuestro Planeta, sino que habían manipulado genéticamente la forma de vida semi-humana en nuestra raza humana actual.
►Los antiguos astronautas y el Culto Cargo: paralelismos interesantes y pistas significativas
¿Claudie Haigneré seguirá preocupada por algo?
Claudie está viva y bien hoy pero ella elige no hablar públicamente sobre su calvario. Sólo podemos especular sobre sus razones para permanecer en silencio, pero a veces, las acciones hablan por sí mismas.
Tal vez somos una creacion muy primitiva de otra raza de extraterrestres. Tener la certeza cientifica de esto debe ser muy duro. Derrepente lo que ella descubrio se tira abajo todas nuestras creencias en un Dios y en un mundo mejor despues de la muerte.
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Si, yo tambien pienso que algo de eso debe ser
