Soy de campo y la opción b (solar y construcción) me parece fantástica, pero le veo un problema: la cantidad de quebraderos de cabeza que suele conllevar la construcción de una casa. ¿Estáis dispuestos a liaros la manta a la cabeza teniendo una cría pequeña? Me refiero, por ejemplo:
-Licencias, permisos, registros
-Problemas inesperados con la calificación del suelo, con posibles normativas que afecten a la parcela o con el propio terreno (por ejemplo, un bajo coeficiente de edificabilidad por X motivos)
-Aprobación del proyecto/visado del arquitecto
-La propia construcción: calidades, acabados, problemas con los proveedores, retrasos
-Gastos inesperados o mucho más altos de lo calculado al comienzo
-Problemas con la instalación o alta de suministros
Y un largo etcétera. No quiero pintarlo muy negro y probablemente ya habéis tenido todo esto en cuenta. Por experiencia propia, me costaría optar por seguir el sueño de la casa en las afueras, salvo que ya estéis curtidos en lo que implica construir (o muy mentalizados/motivados).
Suerte.
-Licencias, permisos, registros
-Problemas inesperados con la calificación del suelo, con posibles normativas que afecten a la parcela o con el propio terreno (por ejemplo, un bajo coeficiente de edificabilidad por X motivos)
-Aprobación del proyecto/visado del arquitecto
-La propia construcción: calidades, acabados, problemas con los proveedores, retrasos
-Gastos inesperados o mucho más altos de lo calculado al comienzo
-Problemas con la instalación o alta de suministros
Y un largo etcétera. No quiero pintarlo muy negro y probablemente ya habéis tenido todo esto en cuenta. Por experiencia propia, me costaría optar por seguir el sueño de la casa en las afueras, salvo que ya estéis curtidos en lo que implica construir (o muy mentalizados/motivados).
Suerte.