Espero no darle un disgusto a usted, pero no necesito que me lo diga.
Para su información, Alquézar es uno de los más bellos pueblos de la provincia de Huesca y uno de los focos aragoneses donde se inició la Reconquista contra el islam invasor. Su primer nombre durante la España visigoda fue Castrum, "fortaleza" en latín, por la fortificación militar que había en el promontorio de la villa. Tras la ocupación islámica el nombre fue arabizado a Al-qasr, con el mismo significado de "fortaleza".
En la fortaleza de Alquézar fueron presas, torturadas y asesinadas las jóvenes santas Nunilo y Alodia, hijas de un mahometano y una cautiva cristiana (es decir=rapto + violación), nacidas en Adahuesca. Su madre las había instruido en el cristianismo secretamente y las había bautizado. Al ser descubierto el hecho por un hermano del padre, este las entregó a la policía religiosa de la época, que de acuerdo a las disposiciones de la sharia las mató tras martirizarlas sádicamente.
La memoria de las desventuradas hermanas se conmemora en el santoral católico el 22 de octubre, día en el que fueron decapitadas (del año 851).