De acuerdo a lo que dices, pero dale la vuelta. Esos chicos que se ponen a emprender con el colchón de seguridad parterno, también podían tirarse a la bartola y no hacer nada viviendo de rentas. Vale que no tiene el mismo mérito un Aless Lequio Obregón que un chico sin cobertura, eso por descontado.
Ana Obregón
- AutorAMBERS
- Fecha de inicio
Pregunta, Mar no había sido un amor loco del Lequio y para hacerle daño fue él el que vendió las fotos aquellas. Porque estaba encoñadísimo con ella y ella estaba con el hijo más inteligente y sereno de la Duquesa de Alba?
Gracias
Jorge Juste!!! Éste no fue novio de Terelu??
Ahí tienes a otras que se han tenido que arrimar a un maromo para poder seguir teniendo un buen nivel de vida. Que ana no por su familia? Pues ole sus ovarios
Uf. Lequio tenía ya una tradición, a aquellas alturas, de vender fotos para sacarse dineros a espaldas de sus churris. Cuando aún estaba con Ana Obregón, en unas Navidades viajó creo recordar que a Roma para ver a Clemente, que, naturalmente, estaba con su madre, Antonia. Alessandro arregló las cosas para que los fotógrafos de una revista lograsen un surtido de fotos de los tres juntos, cargaditos de regalos navideños y con caras de cantar villancicos todo el día en familia. Él sabía que a Ana (que por supuesto estaba al tanto del viaje) le íban a doler esas fotos tan "familiares" en una revista, pero le dió igual porque se embolsó dinero. Luego, cuando salieron las fotos de Lequio jugando al golf con Silvia Tinao, se dijo, se rumoreó, que fue él quien pactó las imágenes a cambio de una pasta gansa de la época. Y eso que se jugaba su relación con Ana, que ya estaba tocada, pero...era mucho dinero.
Mar contó que él al principio le entró por el lado del niño, Carlo. Alessandro le decía que él, al estar tan conectado en la aristocracia italiana, se movía en los ambientes en los que podía tener vigilado de cerca a Carlo Constanza y que veía al niño y que el niño estaba bien, etc. Le decía que la ayudaría, utilizando los contactos en Italia, que se suponía que eran de primera por tratarse por un nieto de Donna Beatriz y del príncipe Torlonia. Mar se dejó enredar poco a poco y probablemente, pienso yo, debió haber una fuerte atracción entre los dos. Por lo visto Fefé lo sabía, pero pensaba que era un antojo pasajero de Mar y que ella enseguida vería la catadura de Alessandro.
No sé cómo pudo ser que Mar se confiase con Alessandro, la verdad. El caso es que Lequio hizo las fotos mucho antes de su publicación, creo recordar. Durante tiempo las usó como una especie de chantaje emocional sobre Mar. Después de que rompiesen y de que ella iniciase la relación con Cayetano fue cuando Lequio las pasó, a muy buen precio, a Interviu.
Y que se dedicaría a otras cosas
También es verdad.
Pero que no me los vendan como los súper emprendedores del reino, porque no. A veces he pensado que cuando llegan a los dieciocho, papá o abuelo, quien toque, les pone delante un cheque y les dice, palmadita en la espalda incluída: "Emprende algo, lo que sea, y cuenta conmigo, a ver qué tal; como mínimo, podrás presentarte como empresario".
No pillo el sentido del comentario...creo. Es una época que recuerdo porque todas aquellas historias fueron pasto de comidilla, madre mía; yo tenía alguna amiga en medios de comunicación y recuerdo las merendolas y cenas descojonándonos de semejantes culebrones patrios. Pero pierdo los detalles, las cosas como son...ha pasado muchísimo tiempo ya.
Estamos de acuerdo, Ana no era luchadora, era rica.
Leyendo todas esas historias me doy cuenta de cómo ha decaído el famoseo patrio español, ahora las portadas de las revistas las ocupan los viceversos y demás fauna, que ni interesan ni los conoce nadie, y sus montajes/desmontajes no pueden ser más anodinos. Las idas y venidas de Lecquio, su triángulo con Mar Flores y Fefé el Cayetonto hijo de la duquesa, Antonia, Ana, alguien se acuerda de lo de Micky Molina? etc... no hay color.
Pero por eso no tiene que disculparse. No es un personaje que a mí me me gustara especialmente, pero por lo que parece si era curranta, tuviera o no más facilidades que otros para triunfar.
