Pedreria y joyería para instrucción de Letizia. Consejos de todo tipo.

@Klytee,

Alexandrita, que alguna vez comentamos.

No conozco piedra que sea más producto de marketing soviético primero, y ruso después, que esta fealdazzz color de restos de almazara, como alpechín.

Aquí tienes una de 9 ct, que sale por 15.000 euros de vellón.

Ver el archivo adjunto 552525
Por esa piedra no pago yo ni 1,50€. Me parece horrenda en cualquiera de sus dos estados.
 
Mi hija hace un tiempo que ha empezado a madurar al respecto, algo menos en el campo del joyerío y más en otros. Ahora acepta cosas que sólo hace 2 años habría rechazado, aunque pertenece al grupo de las que gustan de las aguamarinas y las perlas (ese es un grupo específico de mujeres:)), mientras yo estoy en el de piedras y elementos de más intensidad de color. Entiendo también que una debe oponerse a los gustos de su madre en general y afirmarse en lo propio, sobre todo si se tiene una madre con gustos muy definidos por Oriente desde muy joven. La experiencia orientalista es personalmente mía; de mis hijos sólo por nacimiento, residencia muy temprana y viajes de vacaciones, pero no los ha definido. A mí en muchos aspectos sí.

Si yo viajase a la India sería una simple turista,

A cachos sí. Yo también, aunque ahora menos después de muchas misiones de exterior; me da pereza.

una presa fácil para vendedores animosos.

No lo creo. No en joyerío si ya sabes que se pueden conseguir otros precios en otros sitios dentro del mismo país que visitas.

Tu caso es especial, tratas con la gente de la zona, conoces su cultura, permaneces mucho tiempo en los sitios,

No en la India. La India no es territorio de misiones europeas. Pakistán y Bangladesh sí. Lo que conozco de la India es como simple turista desde muy joven, porque vivía cerca y con el mismo esfuerzo que suponía volver a España de vacaciones, me iba a la India que la tenía menos vista :)

Más tarde, con información ya más específica joyera sacada de esos dos países (que han sido el mismo país con la India hasta la partición de 1947) donde sí he vivido y trabajado, y sabiendo que el centro del joyerío está en Jaipur... ya de por sí una ciudad in-te-re-san-ti-si-ma en muchos otros aspectos. Ahora, si quisiera joyerío y viajar a la India, no desperdiciaría ni un día en ningún otro sitio y me iría a Rajastán, que además está muy cerca de Delhi, del Taj-Mahal y de muchos otros hits, directamente a Jaipur y allí visitaría los sitios de fabricación, donde la expresión "hay de todo" apenas empieza a informar de lo que existe. Y allí encontraría una pulsera rivière muchísimo más barata que en España.


Nada que ver, supongo, con el resto de las personas que paseamos por este "hilo".

Puede que no haya nada que ver con las experiencias personales previas, pero puede haberlo en como encara una un viaje a la India en el futuro no lejano, si hubiera interés por ese país y el viaje se produjera.

Si pagamos mucho más que tú por la joyería no es porque seamos unas manirrotas que soltamos el dinero alegremente; es que no tenemos tus posibilidades de compra

Tenéis las mismas posibilidades de compra que yo he tenido siempre hasta que fui a trabajar la primera vez a Afganistán: comprar en joyerías y en alguna casa de subasta. A partir de Afganistán y la avalancha de piedras preciosas que el país produce, que están por todos lados a precios tirados, entré en otra forma de adquirir joyerío: hacer joyerío a partir de esas piedras.

Afganistán no hace falta, está Internet como elemento democratizador y de acceso directo a lo que antes era siempre a través de joyeros españoles o de los países a los que uno tuviera acceso directo, a los precios que estos quisieran imponer.
Es cierto que gracias a Internet podemos acceder a comprar gemas en los principales mercados del mundo, pero transformarlas en joyas, para poder usarlas sobre nuestros cuerpos, es muy caro en España; tú esta temporada has tenido trato con un buen artesano de Madrid y sabes bien cuáles son sus honorarios.:):)
 

Es cierto que gracias a Internet podemos acceder a comprar gemas en los principales mercados del mundo,

Bueno, ya es algo, que no es poco.

pero transformarlas en joyas, para poder usarlas sobre nuestros cuerpos, es muy caro en España;

Trozos de ello sí, pero no todo.

tú esta temporada has tenido trato con un buen artesano de Madrid y sabes bien cuáles son sus honorarios.:):)

Ese artesano de Madrid me viene haciendo piezas hace muchos años ya, desde que se jubiló como joyero de una joyería de primerísimo rango en Madrid, y montó un tallercillo mínimo en su casa, y yo buscaba quien me montara piezas con las piedras que traje de Afganistán la primera vez. Primero me ofrecí de aprendiza suya, porque yo quería aprender para hacerlo yo, y después de digerir la sorpresa que le produjo, aceptó, aunque no he podido mantener mi aprendizaje de forma continuada por mis ausencias muy largas, y porque no sólo me gusta trastear con joyerío, sino con más enredos.

Ese taller que ha montado a él le basta, porque en España se es desde hace tiempo de la escuela de "especializaciones". Él elabora la pieza en cera y con frecuencia la hace fundir primero en plata. Luego la pasa a oro. Pero él personalmente no funde el metal, no engasta piedras, no se ocupa del rodinado, no enfila cuentas/perlas/piedras taladradas para collares, pulseras y similares. Eso lo hacen otros... es decir, que incluso el aprendizaje con él es limitado. Mucho más habría aprendido de haber tenido un maestro bengalí, o pakistaní, o indio, o incluso afgano, que esos sí hacen de todo.

Una vez metida en "hacer que hagan", la cuestión es dejar como gasto único visible y en metálico, sus honorarios solamente. Es decir, el metal lo pongo yo, las piedras las pongo yo. A él le pago su trabajo estrictamente, y ahí hay muy poco espacio para "cuentas del Gran Capitán: picos, palas y azadones, 100 millones". Si un joyero a quien le doy el oro y la piedra para un anillo, le pido que me engaste una sola piedra, y se descuelga pidiendo 300 euros por la manufactura de un aro y 4 garras, lo paro en seco y, o se vuelve razonable, o le va a encargar la pieza Rita la cantatriz.

Ahí empiezan a entrar el buscarse la vida con las piedras y el canibalizar oro (o plata) elaborado, ya existente. Entre mi hermana y yo hemos canibalizado de todo lo que había en cajones maternos y de algunas de nuestras tías, o suegras y similares :):):) A cualquiera de familia o amigas muy cercanos a quienes ayudo en joyería, le pido que venga con el metal. La piedras, si son para la familia cercana las regalo yo, salvo los diamantes. A amigas cercanas, a veces les regalo alguna piedra y se compran las otras... así nos vamos apañando.

Ese es el panorama de cuando hago hacer cosas en España. La cosa no se desmanda si no dejas en manos de otros cuantos aspectos de hacer joyerío puedas encargarte tú. El joyero es indispensable... pero sólo él. Lo demás no.

Diferente es el caso de Afganistán, donde incluso el metal, que tiene cotización internacional diaria, te lo venden mucho más barato, y la manufactura ni te cuento. En piezas donde la montura no me interesa porque es casi imperceptible, y lo que cuentan son las piedras, ni me molesto en buscar oro, se lo pago al joyero afgano sin mayor deterioro para el bolsillo.


 
Última edición:
@Soynusca

Más reflexión sobre la elaboración de piezas de joyería en España y esto en relación con mi casi-aversión a comprar piedras pequeñas o a elaborar piezas que contengan mucha gema chiquitilla.

Cada martillazo del engastador está a 2 euros ahora mismo. Si quisiera hacer un pavé con las piedras que sean, y estoy pensando en piezas mayores, broches en mi caso, se llega fácilmente a los cientos de piedrecillas. Pongamos 300. Esos ya son 600 euros añadidos al precio de la pieza y que se lleva el engastador, independientemente de lo que cobre el joyero.

Si las piedras son regulares/calibradas, al joyero no le supone un trabajo excesivo porque lo hace mecánicamente sólo con un tamaño de piedra que replica y tarda poco. Si en lugar de eso le doy piedras irregulares, de "fondo de cajón", o resultado de compras por Internet de piedras chicas sin calibrar, cada hueco de piedra es un trabajo individual no replicable, por lo que el trabajo del joyero se multiplica y sus honorarios también.

Lo anterior es para que se sepa algunas de las formas que generan el precio alto dentro de una pieza elaborada, qué elementos son los que aumentan ese precio.

 
En España el engastado es un trabajo muy especializado; los engastadores solo se dedican a eso y los buenos están muy demandados y cobran lo que quieren.
 
Autocita para añadir info sobre esta pieza.

Es de platino y brillantes, y tal cual está cuesta 670 euros. Basta añadir una piedra central (que no sea un diamante, o si es diamante que sea polki) de 8,5 mm x 6,5 hasta 9 mm x 7 mm y calculo que por menos de 1000 euros se ha conseguido un anillo muy molón y sin haber necesitado apenas joyero.

EDITO para añadir, que esta pieza es de una compañía estadounidense.



montura1-jpg.551651



montura2-jpg.551652



Dejan el hueco vacío, en este caso para una piedra central ovalada, de un mínimo de 8,5 mm x 6,5 mm, a un máximo de 9 mm x 7 mm.

Si se le pusiera un diamante ovalado, sería de 1,50 ct el menor a 1,75 al mayor. En piedras de color es más difícil de adivinar el peso de las piedras de esas medidas, porque no están tan regladas como los diamantes, pero como aproximación, si fuera corindón (rubí o zafiro), 1,70 ct a 2,20 ct. Una esmeralda sería más liviana, de 1,45 ct aprox a 1,90 ct.
 
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@Soynusca

Más reflexión sobre la elaboración de piezas de joyería en España y esto en relación con mi casi-aversión a comprar piedras pequeñas o a elaborar piezas que contengan mucha gema chiquitilla.

Cada martillazo del engastador está a 2 euros ahora mismo. Si quisiera hacer un pavé con las piedras que sean, y estoy pensando en piezas mayores, broches en mi caso, se llega fácilmente a los cientos de piedrecillas. Pongamos 300. Esos ya son 600 euros añadidos al precio de la pieza y que se lleva el engastador, independientemente de lo que cobre el joyero.

En mi "pueblo-capital", como tú dices, un buen engastador cobra bastante más de 2 euros.

Si las piedras son regulares/calibradas, al joyero no le supone un trabajo excesivo porque lo hace mecánicamente sólo con un tamaño de piedra que replica y tarda poco. Si en lugar de eso le doy piedras irregulares, de "fondo de cajón", o resultado de compras por Internet de piedras chicas sin calibrar, cada hueco de piedra es un trabajo individual no replicable, por lo que el trabajo del joyero se multiplica y sus honorarios también.

Lo anterior es para que se sepa algunas de las formas que generan el precio alto dentro de una pieza elaborada, qué elementos son los que aumentan ese precio.
 

En España el engastado es un trabajo muy especializado; los engastadores solo se dedican a eso y los buenos están muy demandados y cobran lo que quieren.

Sí. El que engasta mis piedras cobra 2 euros por martillazo. Hace unos 12 años cobraba 1 euro por piedra chica. Es de los "modernos", con pantalla por medio para ver el trabajo.

Ni está muy demandado ni cobra lo que quiere, de verdad. Es un hombre joven, tiene la tarifa que te indico y es engastador a tiempo parcial, porque no hay tanto trabajo como para dedicarse a engastar solamente. De hecho, cada vez que le pido al joyero algo, primero dice "esperemos que el engastador no haya dejado el trabajo por falta de clientes!".

También mi joyero tiene otro, tradicional, que lo hace como siempre.
 
En la ciudad donde yo gasto mi dinero el único engastador bueno que hay, creo que son cuatro en total, cobra bastante más de 2 euros.
 
Bueno, eso es lo que a mí me han dicho, yo no he tenido trato directo con él.:)

Con relación al engastador, la única información que tengo me la da mi joyero, porque no sé quienes son ninguno de los otros profesionales que elaboran parte de la pieza de joyería, rodinador, fundidor, engastador, lapidario. Sé lo que él me cuenta y recuerdo cuando me contó que el engastador había pasado de 1 euro por piedra chica a 2 euros. No sé más.

Supongo que habrá muchos otros engastadores en Madrid aparte de esos dos, pero son con los que tiene costumbre mi joyero de trabajar y de quienes se fía.
 
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