Es curioso el salto generacional, mis padres todavía viven con el chip del pasado. Me dicen "nosotros no teníamos caprichos y pasábamos con lo justo para vivir". Y sí, es cierto. No tenían caprichos. Tenían dos hijas, un coche, una casa propia (pequeña pero propia) y un solo sueldo. Actualmente un iphone es más barato que un alquiler, este es el problema (al menos en Barcelona y alrededores). Los caprichos son más baratos que la vida. Yo vivo en un piso de mierda compartido, no puedo salir de él debido a la burbuja del alquiler, no puedo comprar un coche porque con mi sueldo no me daría ni para el retrovisor. Así que me gasto el sueldo en caprichitos, literalmente, puedo viajar pero no puedo pagar un mejor alquiler. Es como súper absurdo, pero pasa.
Por si alguien no lo sabe, los alquileres en Barcelona rondan los 1200€ un piso normal de 3 habitaciones, los estudios de una habitación y pisos que parecen mordor (o al lado de narcopisos) son entre 700-900€. Creo que en Madrid es más o menos así. Lo que se suma al problema que tenemos los jóvenes con la precariedad laboral y el paro.
Luego te dicen "en mi época trabajábamos catorce horas y no se quejaba nadie". Pues menos mal que alguien se quejó, y además, no se trabajaban tantas horas, habían una cosa llamadas derechos, que se han pasado por el forro los mismos, y se hacían, por ejemplo, huelgas generales, la gente se ponía de acuerdo para ir a por el patrón abusador. Somos unos flojos, hemos consentido demasiado.