Libro "La corte de Felipe VI" (Daniel Forcadas y Alberto Lardiés)

No te asustes mujer, a nosotras no nos temen, temen otras cosas, que van a temer de unas cuantas marujas aburridas con bata de boatiné y rulos en el pelo viendo Sálvame como dice por ahí el forero Pablo el coletas???:ROFLMAO::ROFLMAO:
26243599-retrato-de-una-mujer-mayor-en-rulos-hablando-por-telefono.jpg
11318957-altos-mujer-con-rulos-en-la-cabeza-comiendo-palomitas-de-ma-z.jpg
 
a la consorte no le agrada en absoluto el ambiente "de chonis" que reina en Mallorca en agosto.
Estoy aquí Mortadelos, escuchad : DIJO LA MUERTA DE HAMBRE VENIDA A MÁS, que quiso ser caca y no llega a pedo, (con perdón pero sin supuestamente)

 
Alfonso de Ceballos escalera, mrqués de la Floresta y el hombre que denunció la revuelta nobiliaria contra Letizia, incide también en esa línea, con otros desplantes hacia el mundo de la milicia. "En las comidas mensuales a las que va el príncipe con sus compa@eros de promoción destinados en Madrid, alguno me ha contado que antes estaban muy pendientes de Letizia (el do@a lo eliminé), de darle conversación y de estar un poco al quite con ella. Pero dicen que después de las malas caras y de los feos, de "ahora me levanto y me voy", y otros detalles, la dejan sola y no le hacen ni caso. Si se aburre, la dejan sola. Vamos, que están deseando que deje de ir. A ella el mundo militar no le gusta - a@ade - . Yo sé, por comentarios que me ha hecho gente del Cuarto Militar, que ha tenido roces también con los ayudantes del rey y del príncipe. Sé que hace tiempo, un a@o y pico o así, entró en el Cuarto Militar, en el Palacio Real, y dijo tres o cuatro impertinencias a los que estaban allí. Algo así como: "Ah, bueno, aquí como siempre sin hacer nada". Y uno se levantó y, en fin...le contestó".

Dijo la trabajadora de las seis horas semanales.... a todo ésto éste párrafo daría por bueno que ella hace vida con su marido puesto que acuden una vez por semana a esas cenas, ummm éstop lo pongo en cuarentena.
 
Letizia y su corte de periodistas (victimizar a la edvenediza que ha sacrificado todo, su brillante carrera de periodista, sus amistades, todo por amor y por Esp):depressed:

Las referencias negativas hacia el papel de doña Letizia en algunos escenarios de la corte resultan a veces grotescas. Deformadas en tanto que no tienen la contraparte de esas otras voces que podrían salir a defenderla con más ahínco, y que si no lo hacen es, en parte, porque la reina está obsesionada con que su vida privada no trascienda los muros de palacio.
Ni siquiera nadie de su entorno ha querido apuntillar una sola coma a toda esa retahíla de ataques que su propio primo vertió en su polémico libro. Letizia tiene defensores, por supuesto. Faltaría más. Y sería injusto no escuchar su versión ni recogerla por escrito en este relato. Aunque el trabajo se dificulta por la obligatoriedad impuesta del anonimato. «Creo que había un sector crítico que pensaba que presionando mucho se divorciarían. Y por la lucha interna que han tenido se han mantenido unidos», explica una compañera del gremio que, sin ser de su círculo más íntimo, de esos cinco o seis nombres que siempre aparecen asociados a Letizia, se encuentra también entre las amistades de la reina. «Compartimos la vida y yo para ellos creo que puedo ser un brote de realidad», asegura. Esta fuente def«Ahora que son reyes, a los que han perdido esa batalla ya no les queda más remedio que convertirse en cortesanos. Y toda esa crítica voraz de antes ha cesado».Esta fuente defiende que Letizia está haciendo un «magnífico papel». Sobre todo, porque ha renunciado, primero, a su carrera profesional y, segundo, a su propia independencia y libertad para embarcarse en un sueño que, por momentos, se ha convertido en un delirio. «Ha entregado su vida a algo que parecía un cuento de hadas y que, a veces, se ha convertido más en una mazmorra. Ella ha tenido muy limitado y restringido encontrar lugares donde refugiarse, donde le guardaran su confianza». Sobre la pareja, considera que él «nunca tiene un gesto de desagrado» y que a ella, a pesar de los diez años transcurridos desde su llegada a Zarzuela, se le siguen escapando gestos propios de su pasado. «Ha aprendido muchísimo y muy rápido, pero es cierto que la esencia de plebeya la mantiene. Se nota en su espontaneidad, en sus opiniones», explica. «Es muy perfeccionista en su comportamiento, muy profesional de cara al público. Porque para ella, ser reina es un trabajo que lo aborda con la mayor ambición de conseguir la perfección. Luego su vida privada es un búnker». Y pocas confidentes conocen bien ese búnker. Aprendieron muy pronto a callar y a ser testigos mudos de los entresijos de la corte y de la Jefatura del Estado y fueron recompensadas con una lealtad que les ha facultado a seguir al lado de la reina transcurridos ya más de diez años de su entrada en Zarzuela. Al contrario que la reina Sofía, que se negó siempre a tener algo parecido a una corte de amigas íntimas en España y que solo se rodeó de dos o tres personas (su hermana Irene, su prima Tatiana o sus secretarias Laura Hurtado de Mendoza y Susana Cortázar), su nuera se ha esforzado por conservar intacta una parcela de su anterior vida que la mantenga unida al pulso de la calle. Una parcela copada por este grupo de colegas de profesión y alguna otra excepción. Como Mari Luz Valero Reneses, la peluquera que la arreglaba todas las noches antes de sentarse en la mesa del Telediario de La 1 y que, aunque sigue trabajando para la Corporación en Prado del Rey, está dispensada para irse con Letizia cada vez que ella requiere sus servicios o inicia un viaje internacional de largo recorrido. En este tiempo, Mari Luz, que se desplaza todos los días a palacio para peinar a la reina, se ha convertido en otro de los personajes clave de la propia corte de Letizia y en una de sus privilegiadas confidentes, como lo demuestra el hecho de que la acompañase en la salida nocturna y privada que Letizia protagonizó junto a un grupo de amigos en mayo de 2015 por el barrio de Malasaña. A ella se debe también el cambio de imagen experimentado por Letizia ese mismo año tras el sorprendente corte de su melena. CNN Plus inició sus emisiones el 27 de enero de 1999. En esa redacción joven y progresista que competía con el Canal 24 Horas de Televisión Española, Letizia fue el primer rostro que salió en pantalla en los boletines en abierto a través de Canal +. Llegaba a la tele antes de las cinco de la madrugada, pero, a cambio, entraba en las principales oficinas del país a primera hora de la mañana, la franja considerada como prime time en este tipo de cadenas. Letizia todavía estaba casada con su primer marido, el profesor de literatura Alonso Guerrero, aunque la relación moriría en esos meses siguientes en los que ella, en un trance nada agradable para nadie, encontró refugio y consuelo entre sus compañeras de la tele. Ahí empezaron a atarse esos lazos sólidos que luego la han unido de por vida con Sonsoles Ónega, Cristina Palacios Rubio, Mar Peiteado Mariscal, Ana Prieto Urbano, Inmaculada Aguilar Nacher y Almudena Bermejo Sánchez. Las mismas que fueron testigos, después, de su romance con el presentador de la cadena David Tejera, y de su entrada en el «cuento de hadas» de Zarzuela. Todas ellas forman su propia corte —con sus confidencias, sus viajes y sus escapadas—en paralelo a la del rey Felipe VI. Y tres de ellas, además, fueron elegidas como testigos de la novia para la boda con el príncipe: Cristina, Sonsoles y María del Mar. De ilustre apellido, Sonsoles es hija del periodista Fernando Ónega, autor del último libro que cuenta con la venia real de don Juan Carlos —El hombre que pudo reinar—. En CNN Plus, informaba sobre temas de justicia, pero es más conocida por su desempeño como corresponsal parlamentaria de los informativos de Telecinco. Para esa cadena ha cubierto la proclamación del 19 de junio desde una posición privilegiada en la tribuna del Congreso o la entrega de los premios de periodismo Luis Carandell, que Letizia concede anualmente en el Senado a las mejores plumas de la crónica parlamentaria. Sonsoles ha escrito varias novelas, la más reciente con un título que resume a esa tribu de mujeres ambiciosas y profesionalmente muy preparadas de la que Letizia es su máximo exponente: Nosotras que lo quisimos todo. En casa abundan las fotos con Letizia, Felipe y sus respectivos hijos. Imma Aguilar fue otra de las presentadoras de CNN Plus que hacía el turno de fin de semana. En su cuenta de Twitter se define como «posperiodista, transpolítica, conovelista y extelevisiva». Palabros que definen su paso del mundo de las redacciones a la arena de la comunicación política como asesora de La Entesa, el grupo que engloba a los socialistas catalanes y a IU, ERC e ICV en el Senado. Los martes por la tarde, cuando hay pleno con preguntas al presidente del Gobierno, es fácil verla en los abarrotados pasillos de la Cámara Alta, inmersa en alguno de los corrillos que se forman con periodistas. En el verano de 2014, tras la debacle de los socialistas en las elecciones europeas, Imma dirigió la comunicación de la campaña del diputado Eduardo Madina a las primarias internas del PSOE, que ganó Pedro Sánchez. Esa coincidencia dio lugar a que algunos especulasen con que Letizia era más pro-Madina que pro-Sánchez. Circunstancia que quedó rápidamente desacreditada cuando, en el primer despacho del nuevo líder del PSOE con Felipe VI, ella irrumpió de repente para saludar a Pedro y bromear con él sobre su pasado común en el Ramiro de Maeztu. «Vengo a conocer al hombre con el que dicen que me iba de copas en el instituto», le soltó nada más cruzar la puerta del despacho y a pesar de que ambos nunca coincidieron al mismo tiempo en esas aulas. Él estudiaba por las mañanas y Letizia, en el turno de noche. Fueron apenas veinte minutos, pero Sánchez salió de allí convencido de que la nueva reina era «un torbellino de energía». En CNN Plus, Ana Prieto era productora en el departamento de asignaciones. Antes había sido, con solo veintiséis años, jefa de informativos de Europa Press Televisión.
 
En el mismo capítulo (5), se menciona la lista de testigos de boda de la KK. Transcribo los nombres de los hombres que componen la lista: José Eduardo Median Casad, Luis Bruzón Delgado, Jaime del Burgo y Alex Grijelmo (expresidente de la Agencia Efe).

Al grupo de nombres que engloban su corte se podría a@adir también el de su dermatólogo, Pedro Jaén, el veterano y reputado médico que retoca el rostro de Letizia y de su madre SIN NECESIDAD DE CIRUGÍA. :ROFLMAO:
 
Y habla la mas choni! Este libro es vomitivo de verdad! Que le importa si trabajo y es perfeccionista? Pero esta tipa se ve cuando se disfraza de calientapollas o a ver si aprende ingles y se deja de traductores!
 
El consejero de la reina es....:woot::woot::woot::woot:

....Zuleta y Alejandro, marqués de Duero y duque de Abrantes.

Que la llegada de KK a Zarzuela no fue nada fácil por su duro carácter y las consiguientes dificultades para encajar en un mundo ajeno al suyo. Que si era una periodista acostumbrada a la libertad y amante de ella, hecha a sí misma con su esfuerzo, :sleep::sleep::sleep::sleep: se ve de pronto encerrada en un complejo de edificios, donde se estilan la servidumbre y los anacrónicos valores de la monárquicos.
En su nada fácil etapa como P de A, tuvo que amoldarse a una cosmovisión radicalmente distinta a su vida anterior. No es extraño, por tanto, que en una ocasión mantuviera la conversación que sigue con un empleado de la Casa:

- Vaya desastre. Esta casa es un desastre, con toda gente antigua. No hay más que curas y militares.
(Esta individua debe ser muy imbécil para no saber lo que es la monarquía)
- Senora, vamos a ver, a Ud. no le gustan ni los curas, ni los militares, ni los diplomáticos. Pues no le quedan a Ud. misas por oír y desfiles por asistir...Más vale que se hagan amigos y que les dé la vuelta.
- Es que esto es insoportable...


La razón por la que a Letizia no le gustan los militares, en especial los que trabajan en Zarzuela, es, al parecer, que considera que no laboran demasiado para ganarse el sueldo.

Se comentan varios episodios un tanto desafortunados de roces entre la reina y algunos miembros de la unidad. En una ocasión, ella afeó su conducta, por vagancia, a uno de ellos, pero éste le respondió en un tono nada amistoso.

Mejor es su relación con el equipo de Seguridad de Zarzuela....

hsuhk1.jpg
 
De la transparencia de las cuentas que es lo que interesa a los españoles, nada de nada.

"Ni siquiera nadie de su entorno ha querido apuntillar una sola coma a toda esa retahíla de ataques que su propio primo vertió en su polémico libro."

Qué ataques vertío DRC en si libro? Ahora contar la verdad se llama atacar jejejeje. demasiado prudente está siendo con permanecer callado, si contase todo lo que conoce a muchos se les bajarían los humos.
Un saludo David.
 
Back