Leonor cumple 15 años. Octubre 31, 2020

LEONOR MORDIÓ A UN COMPAÑERO DE CLASE​

Los reyes de España con Leonor.
La Princesa de Asturias, Leonor, ha sido desde pequeña una niña muy sociable y extrovertida, que además ha mostrado tener poca timidez ante las cámaras, lo contrario a su hermana la infanta Sofía, que es más tímida.


La hija mayor de los Reyes de España tiene mucho carácter y así lo demostró cuando era más pequeña, cuando se pudo saber que riñó con otro niño y, en un descuido, le mordió. El otro niño trató de devolverle el mordisco, pero una personas de seguridad encargada de vigilar a la heredera lo evitó.


Letizia Ortiz siempre ha estado muy pendiente de sus hijas en el colegio. De hecho, su preocupación es tal que, en alguna ocasión, se llegó a poner en contacto con la madre de una de las amigas de Leonor para saber qué pasaba entre ellas. En aquella ocasión, su hija le contó que estaba enfadada con ella.

LEONOR PEDÍA A SUS COMPAÑEROS QUE LA LLAMASEN ‘ALTEZA’​

Leonor pedía a sus compañeros que le llamaran Alteza.
Desde el entorno de los padres de los compañeros de la Princesa de Asturias, cuando esta era bastante más pequeña, pedía a sus compañeros que la llamaran “alteza”. Este hecho hizo que más de una madre se mostrase indignada por ello.


Esto podría tratarse tan solo de un juego o de la propia actitud de los niños y que podría desarrollar cualquier otro menor. Sin embargo, se sumó a una de las numerosas salidas de tono que guardan en su memoria algunos de los padres del Colegio Santa María de los Rosales.


Además, al tratarse de la futura heredera de la coroña española, cualquier anécdota de este tipo tiene una mayor relevancia. No obstante, ahora, con 14 años, es una joven más madura.

TAMBIÉN PIDIÓ QUE LE HICIESEN UNA REVERENCIA​

Leonor recibiendo el Toisón de Oro.
En enero de 2018, la Princesa Leonor recibió el Toisón de Oro, un reconocimiento que, según los rumores se la subió mucho a la cabeza por aquel entonces. La hija de Felipe VI y Letizia le habría dicho a sus amigas que ahora tendrían que hacerle una reverencia.


De ahora en adelante tendréis que hacerme una reverencia“, habría asegurado a amigas. Así lo habrían confesado dos madres de dos compañeras de clase de la futura heredera.


Esto dejó dudas de si la niña, que siempre se muestra muy educada y que así lo aseguran sus profesores, es igual cuando no hay presencia de algún adulto delante, al igual que hacen otros muchos niños.

Y manotazos a la abuela con sonrisita.
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DOÑA LETIZIA


31/10/2020


EL PASO ATRÁS DE LETIZIA POR EL PROTAGONISMO DE LEONOR​

DE PROTA DE FELIPE VI A SECUNDARIA DE LA HEREDERA​

Hoy la Princesa de Asturias cumple 15 años pero, desde hace unos meses, la heredera ha ido tomando más peso en los actos oficiales. Aunque aún está por definirse bien su papel.
Eso ha obligado a la Reina Letizia a ceder protagonismo en favor de Leonor para fortalecer su figura como sucesora de Felipe VI. ¿Cómo se lo está tomando?
La Reina ha cedido en los últimos grandes actos el protagonismo a la Princesa Leonor, que hoy cumple 15 años, consciente de que debe ganar peso institucional. Pero la asignatura pendiente de la Consorte sigue siendo redefinir su rol. POR EDUARDO ÁLVAREZ

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LAS COMPARACIONES son tan odiosas como inevitables. En el caso de la Monarquía, resulta imposible no establecer paralelismos entre miembros con el mismo rango de distintas generaciones, entre otras razones porque la propia institución los fomenta por su simbolismo. Y, así, en el 15 cumpleaños que hoy celebra la Princesa de Asturias es imposible no preguntarse si seguirá los pasos de su padre. Fue a esa edad cuando Don Felipe empezó a desempeñar funciones institucionales de verdad, que incluyeron sus dos primeros viajes oficiales al extranjero y su estreno en las audiencias en Zarzuela. Hay también paralelismos entre Doña Letizia y Doña Sofía en sus papeles como reinas y madres, por mucho que hayan cambiado las cosas en estas décadas.
A las dos les une haber sido progenitoras muy protectoras, estrictas en la educación y de carácter controlador; han sido tan cariñosas como severas con los suyos. Doña Sofía, eso sí, fue más consentidora con Felipe, su ojito derecho, que con Elena y Cristina. José Antonio Alcina, quien fuera preceptor del Príncipe, relata en Felipe VI. La Formación De Un Rey cómo la Consorte de Juan Carlos I exigía estar al tanto de los más mínimos detalles de sus hijos sin delegar en nadie.
Doña Letizia se parece bastante a su suegra en esta esfera. Pero hay una notable diferencia. Mientras Doña Sofía vivió con naturalidad que sus tres hijos estuvieran presentes desde bien niños en la retina de los españoles a través de abundantes imágenes e instantáneas tanto de actos oficiales como de eventos de naturaleza familiar e íntima, la actual Reina ha procurado con obsesión que la Princesa Leonor y la Infanta Sofía crecieran alejadas de los focos. Nunca se han visto por ejemplo fotos en actividades de recreo con otros amigos como sí sucedía con su padre o sus tías.
En España estamos mucho más familiarizados con los retoños de los Windsor o de los Mónaco que con nuestra futura Reina, a la que estos 15 años hemos visto en ocasiones más que contadas. Hasta hace relativamente poco, las fotografías o vídeos difundidos por Zarzuela han llegado a cuentagotas y, salvo en momentos del calendario muy puntuales como las vacaciones de agosto en Marivent, las dos niñas han crecido ajenas a los posados.
Expertos en Monarquía consultados por LOC han alertado durante años del error que suponía mantener tan escondidas a Leonor y Sofía. Desde que la heredera cumplió los 14 años, es cierto que ha variado algo la estrategia y las dos han empezado a ganar algo de presencia pública. Pero de un modo todavía tan titubeante que, sin ir más lejos, la pasada primavera, durante el estado de alarma, este suplemento se hizo eco de las críticas que generó que durante meses no se supiera nada de la heredera del trono, mientras las nuevas generaciones de todas las familias reales europeas infundían ánimo a sus conciudadanos en momentos tan adversos.
Se acaban de vivir dos grandes acontecimientos para la Corona, los actos del 12 de Octubre en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional y la ceremonia en Oviedo de entrega de los Premios Princesa de Asturias, en los que no pasó desapercibido cómo Doña Letizia cedió todo el protagonismo a sus hijas, y en especial a la heredera. Más allá del papel constitucional del Rey y de su primogénita, la Familia Real despierta un innegable interés también por cuestiones mundanas. Y con la decisión de la Reina de no estrenar vestuario en estos actos, al margen de objetivos como transmitir imagen de austeridad en plena pandemia, desde luego logró que todos los titulares y crónicas sociales los monopolizaran sus hijas. Nada se deja al azar.
Como es inevitable, Doña Letizia está cada vez más cerca de perder el papel de mamá gallina. Y en 2021 se avivarán debates sobre la heredera del trono que no pueden seguir dormidos, como lo relativo a su futura formación, tanto académica como militar, asunto no menor que exigirá diálogo y acuerdos entre Zarzuela y Moncloa.
NUEVA ERA EN PALACIO
Pero el creciente protagonismo de la Princesa Leonor coincide en el tiempo con la redefinición inconclusa del papel como Consorte de Doña Letizia. La pandemia lo ha puesto todo patas arriba, también en la Jefatura del Estado. Se ha visto desde marzo el gran esfuerzo de los Reyes por readaptar sus agendas y su acción a unas circunstancias tan complicadas. De hecho, durante las semanas de confinamiento de primavera Don Felipe y Doña Letizia dispararon su actividad –lo que fue acompañado de un cambio copernicano en la estrategia de comunicación de Zarzuela– y la Reina se convirtió en la consorte europea más activa ante la gravísima crisis global. Acompañando al Rey o en solitario, multiplicó sus audiencias y sus actos y al fin empezó a tener una agenda propia robusta, después de años como Reina tan desdibujada como desperdiciada.
Los conocedores de la institución y las organizaciones con las que colabora de forma más estrecha coinciden en la magnífica preparación de Doña Letizia y en el rigor con el que aborda sus funciones. Nada queda de la periodista que, tras convertirse en Princesa en 2004, se mostraba insegura y tardó varios años en adaptarse a las exigencias protocolarias, a su rol institucional y a la difícil realidad que se vivía en el seno de una familia real que ahora sabemos estaba desestructurada.
El caso es que, ya como Reina, desde 2014, su papel de representación de la Corona siempre ha estado muy por debajo del que por ejemplo desempeñan Máxima de Holanda o Matilde de los belgas.
Pero es visible el cambio experimentado estos últimos meses, como parte del plan de la Monarquía tanto para mostrar ejemplaridad en tiempos de coronavirus como para superar la crisis reputacional provocada por los escándalos económicos de Juan Carlos I.
En lo que respecta a la imagen, Doña Letizia ha apostado por la austeridad y la sobriedad máxima. En su vestuario –lleva meses sin estrenar apenas nada–, en sus complementos, en su peinado y hasta en sus ademanes, alejados de la impulsividad que tanto le cuesta controlar –por eso a veces sigue protagonizando escenas tan vehementes como cuando en junio pidió imperativa al Rey que se apoyara en la barra–.
Y, en lo institucional, su actividad sigue siendo mucho más intensa que antes de esta crisis, cuando había semanas enteras en las que su agenda estaba vacía, algo muy criticado. Esta misma semana, sus actos oficiales han incluido una reunión de trabajo con una delegación del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad, una de las causas, junto a la lucha contra las Enfermedades Raras, en las que está más volcada. También un encuentro con la Junta Directiva de la Asociación Women in a Legal World y una audiencia a un grupo de las entidades creadoras de la nueva Cátedra para la promoción de la mujer en vocaciones (STEM) en la formación profesional para la movilidad sostenible, de la Universidad Pontificia de Comillas. Los últimos son gestos de apoyo a las políticas de igualdad y al emprendimiento femenino en los que –basta revisar la agenda de este año– la Consorte se está volcando especialmente, pese al boicot de la ministra del ramo, Irene Montero, quien sigue desdeñando apoyarse en ella a pesar de la coincidencia de objetivos entre la Reina y su Ministerio.
Se sigue echando en falta, eso sí, una agenda más ambiciosa y abierta a más causas y colectivos. Ello también permitiría a la Corona renovar y modernizar su imagen, asociarla a nuevos sectores sociales, en un momento en el que está tan zarandeada por algunos grupos políticos. Doña Letizia nunca ha perdonado a su suegro Don Juan Carlos que con sus actos causara graves daños a la institución que quienes más los van a sufrir son sus hijas. Hoy ella, como madre y como Reina, intenta allanarles el camino.
MONARQUÍA
15, años, tiene Leonor

La Reina Letizia, de protagonista con Felipe VI a vía secundaria de la heredera​

BAJO REGISTRO
  • EDUARDO ÁLVAREZ
Sábado, 31 octubre 2020 - 00:30
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La Reina ha cedido en los últimos grandes actos el protagonismo a la Princesa Leonor, que hoy cumple 15 años, consciente de que debe ganar peso institucional. Pero la asignatura pendiente de la Consorte sigue siendo redefinir su rol.
Doña Leonor y su madre, la Reina, en Asturias

Doña Leonor y su madre, la Reina, en Asturias GTRES
Las comparaciones son tan odiosas como inevitables. En el caso de la Monarquía, resulta imposible no establecer paralelismos entre miembros con el mismo rango de distintas generaciones, entre otras razones porque la propia institución los fomenta por su simbolismo. Y, así, en el 15 cumpleaños que hoy celebra la Princesa de Asturias es imposible no preguntarse si seguirá los pasos de su padre. Fue a esa edad cuando Don Felipe empezó a desempeñar funciones institucionales de verdad, que incluyeron sus dos primeros viajes oficiales al extranjero y su estreno en las audiencias en Zarzuela. Hay también paralelismos entre Doña Letizia y Doña Sofía en sus papeles como reinas y madres, por mucho que hayan cambiado las cosas en estas décadas.
A las dos les une haber sido progenitoras muy protectoras, estrictas en la educación y de carácter controlador;han sido tan cariñosas como severas con los suyos. Doña Sofía, eso sí, fue más consentidora con Felipe, su ojito derecho, que con Elena y Cristina. José Antonio Alcina, quien fuera preceptor del Príncipe, relata en Felipe VI. La Formación De Un Rey cómo la Consorte de Juan Carlos I exigía estar al tanto de los más mínimos detalles de sus hijos sin delegar en nadie.
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Doña Letizia se parece bastante a su suegra en esta esfera. Pero hay una notable diferencia. Mientras Doña Sofía vivió con naturalidad que sus tres hijos estuvieran presentes desde bien niños en la retina de los españoles a través de abundantes imágenes e instantáneas tanto de actos oficiales como de eventos de naturaleza familiar e íntima, la actual Reina ha procurado con obsesión que la Princesa Leonor y la Infanta Sofía crecieranalejadas de los focos. Nunca se han visto por ejemplo fotos en actividades de recreo con otros amigos como sí sucedía con su padre o sus tías.
En España estamos mucho más familiarizados con los retoños de los Windsor o de los Mónaco que con nuestra futura Reina, a la que estos 15 años hemos visto en ocasiones más que contadas. Hasta hace relativamente poco, las fotografías o vídeos difundidos por Zarzuela han llegado a cuentagotas y, salvo en momentos del calendario muy puntuales como las vacaciones de agosto en Marivent, las dos niñas han crecido ajenas a los posados.
Doña Letizia mira a la Princesa de Asturias

Doña Letizia mira a la Princesa de AsturiasGtres
Expertos en Monarquía consultados por LOC han alertado durante años del error que suponía mantener tan escondidas a Leonor y Sofía. Desde que la heredera cumplió los 14 años, es cierto que ha variado algo la estrategia y las dos han empezado a ganar algo de presencia pública.Pero de un modo todavía tan titubeante que, sin ir más lejos, la pasada primavera, durante el estado de alarma, este suplemento se hizo eco de las críticas que generó que durante meses no se supiera nada de la heredera del trono, mientras las nuevas generaciones de todas las familias reales europeas infundían ánimo a sus conciudadanos en momentos tan adversos.
Se acaban de vivir dos grandes acontecimientos para la Corona, los actos del 12 de Octubre en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional y la ceremonia en Oviedo de entrega de los Premios Princesa de Asturias, en los que no pasó desapercibido cómo Doña Letizia cedió todo el protagonismo a sus hijas, y en especial a la heredera. Más allá del papel constitucional del Rey y de su primogénita, la Familia Real despierta un innegable interés también por cuestiones mundanas. Y con la decisión de la Reina de no estrenar vestuario en estos actos, al margen de objetivos como transmitir imagen de austeridad en plena pandemia, desde luego logró que todos los titulares y crónicas sociales los monopolizaran sus hijas. Nada se deja al azar.
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Como es inevitable, Doña Letizia está cada vez más cerca de perder el papel de mamá gallina. Y en 2021 se avivarán debates sobre la heredera del trono que no pueden seguir dormidos, como lo relativo a su futura formación, tanto académica como militar, asunto no menor que exigirá diálogo y acuerdos entre Zarzuela y Moncloa.

NUEVA ERA EN PALACIO​

Pero el creciente protagonismo de la Princesa Leonor coincide en el tiempo con la redefinición inconclusa del papel como Consorte de Doña Letizia. La pandemia lo ha puesto todo patas arriba, también en la Jefatura del Estado. Se ha visto desde marzo el gran esfuerzo de los Reyes porreadaptar sus agendas y su acción a unas circunstancias tan complicadas. De hecho, durante las semanas de confinamiento de primavera Don Felipe y Doña Letizia dispararon su actividad -lo que fue acompañado de un cambio copernicano en la estrategia de comunicación de Zarzuela- y la Reina se convirtió en la consorte europea más activa ante la gravísima crisis global. Acompañando al Rey o en solitario, multiplicó sus audiencias y sus actos y al fin empezó a tener una agenda propia robusta, después de años como Reina tan desdibujada como desperdiciada.
Los conocedores de la institución y las organizaciones con las que colabora de forma más estrecha coinciden en la magnífica preparación de Doña Letizia y en el rigor con el que aborda sus funciones. Nada queda de la periodista que, tras convertirse en Princesa en 2004, se mostraba insegura y tardó varios años en adaptarse a las exigencias protocolarias, a su rol institucional y a la difícil realidad que se vivía en el seno de una familia real que ahora sabemos estaba desestructurada.
El caso es que, ya como Reina, desde 2014, su papel de representación de la Corona siempre ha estado muy por debajo del que por ejemplo desempeñan Máxima de Holanda o Matilde de los belgas.
Pero es visible el cambio experimentado estos últimos meses, como parte del plan de la Monarquía tanto para mostrar ejemplaridad en tiempos de coronavirus como para superar la crisis reputacional provocada por los escándalos económicos de Juan Carlos I.
En lo que respecta a la imagen, Doña Letizia ha apostado por la austeridad y la sobriedad máxima. En su vestuario -lleva meses sin estrenar apenas nada-, en sus complementos, en su peinado y hasta en sus ademanes, alejados de la impulsividad que tanto le cuesta controlar -por eso a veces sigue protagonizando escenas tan vehementes como cuando en junio pidió imperativa al Rey que se apoyara en la barra-.
Y, en lo institucional, su actividad sigue siendo mucho más intensa que antes de esta crisis, cuando había semanas enteras en las que su agenda estaba vacía, algo muy criticado. Esta misma semana, sus actos oficiales han incluido una reunión de trabajo con una delegación del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad, una de las causas, junto a la lucha contra las Enfermedades Raras, en las que está más volcada. También un encuentro con la Junta Directiva de la Asociación Women in a Legal World y una audiencia a un grupo de las entidades creadoras de la nueva Cátedra para la promoción de la mujer en vocaciones (STEM) en la formación profesional para la movilidad sostenible, de la Universidad Pontificia de Comillas. Los últimos son gestos de apoyo a las políticas de igualdad y al emprendimiento femenino en los que -basta revisar la agenda de este año- la Consorte se está volcando especialmente, pese al boicot de la ministra del ramo, Irene Montero, quien sigue desdeñando apoyarse en ella a pesar de la coincidencia de objetivos entre la Reina y su Ministerio.
Se sigue echando en falta, eso sí, una agenda más ambiciosa y abierta a más causas y colectivos. Ello también permitiría a la Corona renovar y modernizar su imagen, asociarla a nuevos sectores sociales, en un momento en el que está tan zarandeada por algunos grupos políticos. Doña Letizia nunca ha perdonado a su suegro Don Juan Carlos que con sus actos causara graves daños a la institución que quienes más los van a sufrir son sus hijas. Hoy ella, como madre y como Reina, intenta allanarles el camino.
 
Ya cumple 15 años. Faltan 3 años para que cumpla los 18 y que se independice de la madre.
Sólo espero que crezca unos centímetros más, porque sería feo que sea más chica que la madre. O que la hermana sea más alta que ella.

Que tiene de malo ser bajita? Aquí una ?

Respecto a independizarse, si quieren seguir viviendo con esa posición de privilegio tendrán que seguir unos dictámenes
 
Unos cuantos centímetros crecerá pero no creo que pegue un estirón muy grande. Ha heredado la genética Ortiz en cuanto a altura con lo cual con suerte llegará al 1.70....con bastante suerte.....la hermana Sofía ha heredado la genética Borbón y en cuanto pegue el último estirón igual nos sorprendemos.....
El último estirón??? Tanto mis amigas como yo dejamos de crecer a los 11-12, mucho me temo que el estirón ya lo dió.
 
El último estirón??? Tanto mis amigas como yo dejamos de crecer a los 11-12, mucho me temo que el estirón ya lo dió.
Entre los 14 y los 15 yo crecí 1cm y ya....para mí generación y en España soy alta.
Leito tiene ya 15.Para su generación es una chica bajita, al parecer cogió la altura de los Ortiz Rocasolano. A muchas niñas les pasa, que no alcanzan la estatura de sus madres. Es tan normal ser alto como bajito. Lo importante es ser buena persona.
La kk tiene que estar trinando, entre que una niña es clavada a Irene de Grecia y la otra apenas le alcanza. Son las cosas de la vida. Tanto usar tacón de 10cm y que tu hija se quede chica. Es cosa de genes, al menos no tiene la nariz aguileña... Resignación...
 
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Ay Dios??

Leonor, 15 años de pelazo bajo control y un futuro mucho más rubio

La melena de la princesa Leonor ha colmado portadas y es la guinda de su impoluto look. Su brillo, movimiento y densidad tienen un porqué y lo descubrimos en su 15 cumpleaños​


Foto: El impoluto cabello de la princesa Leonor. (Getty)
El impoluto cabello de la princesa Leonor. (Getty)
Por
Margarita Velasco
31/10/2020 - 05:00
Por más que Leonor y Sofía aparezcan en escena con peinados prácticamente idénticos, hace poco descubrimos que el cabello de Sofía era más rebelde que el de la Princesa de Asturias, como consecuencia de su herencia genética paterna. Sin embargo, a lo largo los recién cumplidos 15 años de vida de la princesa Leonor, hemos asistido a su evolución capilar, pasando de un rubio platino homogéneo a una melenaza frondosa y ceniza.


La princesa Leonor, en Mérida. (Limited Pictures)
La princesa Leonor, en Mérida. (Limited Pictures)


Todos los expertos capilares coinciden en señalar la excelente calidad del cabello de la princesa Leonor. Abundante y con una coloración virgen, simplemente modificada por la incidencia del sol, la de Leonor es una melena que promete ir cambiando de forma sutil en los próximos años. “Ahora mismo se encuentra en la adolescencia, momento en el que los colores rubios tienden a perder el tono y a oscurecerse un poco”, explica Carlos Fernández, education manager de Franck Provost, que detalla a Vanitatis que esto no es lo que ocurre en el caso concreto de la hija mayor de Felipe y Letizia. “No es que se haya oscurecido especialmente, sino que se han producido más reflejos dorados mezclados con mechones un poco menos claros”. Además, la incidencia del sol del verano ha hecho que aquellas zonas con un pigmento más claro adquieran ese tono platino, que “le dan un efecto casi de transparencia y brillo”, destaca.


Foto: La princesa Leonor, en Asturias. (Limited Pictures)

Leonor se apunta a las mechas de las tiktokers: la royal influencer
Margarita Velasco


Al igual que en el caso de la infanta Sofía, el cabello de Leonor es muy fuerte, consecuencia directa de la genética, según analiza el experto de Franck Provost, que repara en la raíz del cabello la Princesa como pista importante. Al parecer, la raíz del pelo, ligeramente encrespada, revela la naturaleza del cabello de Leonor, más bien ondulado. “En sus últimas apariciones públicas, observamos que ha desaparecido ese encrespamiento, gracias al uso del cepillo, del secador o de la plancha, para conseguir así un resultado más pulido”, precisa el estilista.



La princesa Leonor, en una imagen de archivo. (Limited Pictures)
La princesa Leonor, en una imagen de archivo. (Limited Pictures)


En los últimos años, Leonor ha comenzado a lucir un aspecto mucho más acorde con su edad, moldeando su cabello con ondas deshechas y semirrecogidos con trenzas. Como los expertos nos explican, suele cambiar la posición de la raya del cabello y recogerse el pelo en una coleta, peinados que aniñan su imagen, sin embargo, cuando opta por dejarlo suelto o llevarlo en recogidos bajos consigue un look más juvenil.

Éxitos futuros​

A medida que cumpla años, Carlos Fernández opina que la heredera del trono “cuidará su cabello con técnicas de brushing y seguramente se hará algún reflejo más para potenciar sus facciones, incluso puede que corte su melena” para deshacerse poco a poco de su imagen más infantil.


Leonor, el 12 de octubre con un juvenil semirrecogido. (Getty)
Leonor, el 12 de octubre con un juvenil semirrecogido. (Getty)


El experto de Franck Provost recomienda para los próximos años de Leonor incluir alguna capa en la parte de delante, para conseguir “un efecto degradé largo, a la altura del mentón, que le dé un toque más desenfadado y menos serio”, aconseja.

NO
PUEDO
CREER
QUE
ESTE
ARTÍCULO
SE
HAYA
PUBLICADO
Y
PRETENDA
SER
UN
ARTÍCULO
SERIO


:dead::dead::dead::dead::dead:
 
este artículo es para enmarcarlo...lo ha dictado la madre al becario pero fijo ..."con una coloración virgen modificada sólo por el sol que le da un aspecto trasparente...bla..bla..."
la madre ha leído Leo + mechas framing y se ha puesto a teclear de inmediato?
que mujer tan absurda la pobre


Querida coti, en algún post leí que esta semana era tu cumpleaños! espero que tuvieras un bonito día. Un abrazo querida coti!!!!!! ????
 
El marketing actuando a todo motor para mostrar a Leonor hasta en Tik Tok, para qué decir de los artículos en los diarios y revistas proclives a la sucia e innecesaria monarquía española. Lo del Hola ya es vergonzoso porque no es uno o dos artículos a la vez sobre Leíto, son de a varios a la vez ensalzándola. Y todo esto quién lo paga? obviamente lo paga la casa real. Y con el dinero de quién? pues con el dinero del presupuesto que tienen asignado, dinero que proviene de todos los españoles que los mantienen y que utilizan en este caso para promover y meter por los ojos a una joven a los mismos que costean todo este marketing. Es que todo esto no tiene nombre. Y todo además para seguir en el futuro profitando del pueblo.
 
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