http://www.elmundo.es/yodona/blogs/grand-class/2016/12/16/letizia-y-las-marcas.html
Letizia y las marcas
Si es verdad como juran y perjuran lenguas anabolenas que el objetivo de SM la Reina es acaparar la atención en todo momento, lo ha conseguido con creces esta semana. No fue tanto el vestido de cóctel de la colección crucero 2017 de Nina Ricci que llevó a la cena de gala, sino su peinado y, sobre todo, el maquillaje tan dramático.
El comentario de un conocido "couturier" madrileño al ver las fotografías fue "¡Qué miedo!". Con la melena recta con efecto "wet look", las rígidas pestañas kilométricas y la pintura subida de tono, parecía un personaje de una historieta. El vestido, un asunto brillante con rayas a lo Sonia Rykiel solo que verticales, exageraba aún más ese estilismo de comic, maravilloso para una cena navideña entre amigos, pero no para una entrega de premios de gala.
Hay que reconocer que desde de que doña Letizia descubriese las marcas internacionales pertenecientes al grupo catalán Puig, como Nina Ricci o Carolina Herrera Nueva York, viste mucho mejor y es de esperar que siga con ellos por muchos años, siempre que se los ajusten un poquito: las mangas demasiado largas que le llegaban hasta los dedos no eran muy afortunadas. A SM le va la simplicidad, las líneas puras y debe de huir de los floripondios, bordados o encajes con los que le viste Felipe Varela, creyendo hacerle un favor.
En el viaje a Portugal estrenó otro Carolina Herrera, un conjunto en lana de doble faz en tono lavanda de vestido y abrigo que le favorecía muchísimo.
Un periodista extranjero me decía que está muy bien que quiera llamar la atención, pero no debe de hacerlo cuando acompaña a su marido, el Jefe del Estado. La gente hablará más de su 'look' al día siguiente que del discurso de su marido. Le pareció bien cuando se cortó la melena y se enfundo un 'fourreau' palabra de honor como de espumillón negro para un acto por la tarde, ya que iba sola.
Otro periodista, extranjero también, que la sigue atentamente, me decía que lo peor de los 'looks' de SM no es la vestimenta, sobre todo la de Varela, sino su cambio constante de peinado. Que resulta absurdo que se haga cinco o seis "coiffures" diferentes en una semana, algunos como los "nidos", francamente feos.
Yo encuentro que lo peor de los 'looks' de SM es que parecen estar siempre en 'off side' y que su estilista no suele escoger el modelo adecuado para cada ocasión, decorándola demasiado para una ceremonia poco solemne, o decorándola muy poco para ciertos actos oficiales, como hace unos días en el Congreso de los Diputados.
Letizia y las marcas
El comentario de un conocido "couturier" madrileño al ver las fotografías fue "¡Qué miedo!". Con la melena recta con efecto "wet look", las rígidas pestañas kilométricas y la pintura subida de tono, parecía un personaje de una historieta. El vestido, un asunto brillante con rayas a lo Sonia Rykiel solo que verticales, exageraba aún más ese estilismo de comic, maravilloso para una cena navideña entre amigos, pero no para una entrega de premios de gala.
Hay que reconocer que desde de que doña Letizia descubriese las marcas internacionales pertenecientes al grupo catalán Puig, como Nina Ricci o Carolina Herrera Nueva York, viste mucho mejor y es de esperar que siga con ellos por muchos años, siempre que se los ajusten un poquito: las mangas demasiado largas que le llegaban hasta los dedos no eran muy afortunadas. A SM le va la simplicidad, las líneas puras y debe de huir de los floripondios, bordados o encajes con los que le viste Felipe Varela, creyendo hacerle un favor.
En el viaje a Portugal estrenó otro Carolina Herrera, un conjunto en lana de doble faz en tono lavanda de vestido y abrigo que le favorecía muchísimo.
Un periodista extranjero me decía que está muy bien que quiera llamar la atención, pero no debe de hacerlo cuando acompaña a su marido, el Jefe del Estado. La gente hablará más de su 'look' al día siguiente que del discurso de su marido. Le pareció bien cuando se cortó la melena y se enfundo un 'fourreau' palabra de honor como de espumillón negro para un acto por la tarde, ya que iba sola.
Otro periodista, extranjero también, que la sigue atentamente, me decía que lo peor de los 'looks' de SM no es la vestimenta, sobre todo la de Varela, sino su cambio constante de peinado. Que resulta absurdo que se haga cinco o seis "coiffures" diferentes en una semana, algunos como los "nidos", francamente feos.
Yo encuentro que lo peor de los 'looks' de SM es que parecen estar siempre en 'off side' y que su estilista no suele escoger el modelo adecuado para cada ocasión, decorándola demasiado para una ceremonia poco solemne, o decorándola muy poco para ciertos actos oficiales, como hace unos días en el Congreso de los Diputados.