Bueno, yo cuento también una historia que viví de cerca sobre una chica que era idiota perdida:
Llevaba con su novio desde los 15 años. La típica novia pesada que agobia al novio, que tiene que estar tooooodo el día con ella. Así 15 años. Pues ella erre que erre con que se quería casar, y el pasaaaaaando totalmente. Ella con mucha pasta, forrada de familia, con chalet comprado por sus padres cuando se quiso independizar. Así que se fueron a vivir juntos a la mansioncita de la niña. Por supuesto el dinero que ganaba el (que era el que tenía trabajo serio) iba para los caprichitos de la niña (un sofá carísimo, una lámpara de diseño, bla bla...). Pues al final convence al novio para casarse, y como no monta una pedazo de boda de la leche, y todos ahí pagando el impuesto que son las bodas.
Pues unos días antes se encuentra con un excompañero del insituto, que resulta que a partir de ese momento "era el chico del qeu sieeeeeempre había estado enamorada" (flipante, la conocía hacía años y nunca lo había nombrado, y eso que lo habíamos seguido viendo de vez en cuando). Pues no, era su amor en secreto. Pava a más no poder la niña.
Sigue con los preparativos de la super boda de la niña, a mensajitos con el otro. Se van viendo pa tomar algo, bla bla. Se casa, se va de viaje de novios (pedazo de viaje de la hostia, con nuestro dinero, claro) y me suelta antes de irse "buf, no se si me apetece. O me quedo embarazada o lo dejo y me voy con Dani". Que era el chico en cuestión. Logicamente volvió sin embarazo, y sin pestañear dejó al novio de toda la vida.
El pobre chico a mi me daba una pena tremenda: se quedó sin mansión, y con el dinero perdido de todos los años de trabajo. Menos mal que ella, decidió "indemnizarle" y darle la pasta proporcional a lo que había invertido en la casa. Como el sobraba el dinero no le importaba, poco más que lo compra.
En ese momento me di cuenta de lo caprichosa, estúpida y egocéntrica que puedes llegar a ser una persona. AÚN ME DUELEN LOS 100 EUROS QUE PUSE PARA LA BODA (porque me negué a poner 200 como el resto de los amigos).
Llevaba con su novio desde los 15 años. La típica novia pesada que agobia al novio, que tiene que estar tooooodo el día con ella. Así 15 años. Pues ella erre que erre con que se quería casar, y el pasaaaaaando totalmente. Ella con mucha pasta, forrada de familia, con chalet comprado por sus padres cuando se quiso independizar. Así que se fueron a vivir juntos a la mansioncita de la niña. Por supuesto el dinero que ganaba el (que era el que tenía trabajo serio) iba para los caprichitos de la niña (un sofá carísimo, una lámpara de diseño, bla bla...). Pues al final convence al novio para casarse, y como no monta una pedazo de boda de la leche, y todos ahí pagando el impuesto que son las bodas.
Pues unos días antes se encuentra con un excompañero del insituto, que resulta que a partir de ese momento "era el chico del qeu sieeeeeempre había estado enamorada" (flipante, la conocía hacía años y nunca lo había nombrado, y eso que lo habíamos seguido viendo de vez en cuando). Pues no, era su amor en secreto. Pava a más no poder la niña.
Sigue con los preparativos de la super boda de la niña, a mensajitos con el otro. Se van viendo pa tomar algo, bla bla. Se casa, se va de viaje de novios (pedazo de viaje de la hostia, con nuestro dinero, claro) y me suelta antes de irse "buf, no se si me apetece. O me quedo embarazada o lo dejo y me voy con Dani". Que era el chico en cuestión. Logicamente volvió sin embarazo, y sin pestañear dejó al novio de toda la vida.
El pobre chico a mi me daba una pena tremenda: se quedó sin mansión, y con el dinero perdido de todos los años de trabajo. Menos mal que ella, decidió "indemnizarle" y darle la pasta proporcional a lo que había invertido en la casa. Como el sobraba el dinero no le importaba, poco más que lo compra.
En ese momento me di cuenta de lo caprichosa, estúpida y egocéntrica que puedes llegar a ser una persona. AÚN ME DUELEN LOS 100 EUROS QUE PUSE PARA LA BODA (porque me negué a poner 200 como el resto de los amigos).