Mira que yo soy provacunas pero esta me da miedo, y cada vez más.
En mi entorno hay personas (amigos) obsesionadas. Claro, yo estoy más relajada, no lo niego. Mascarilla, lavado de manos y tampoco como en primavera.
Me temo que esto va a quedarse y hay gente muy neurótica que en el fondo prefiere estar en un ambiente de sepsis total (algo imposible, por otro lado). Luego están los que son bastante poco sociales y creo que viven felices en ese estado de confinamiento. Y si se nos impone a todos mejor. De esa forma ellos dejan de ser los raros, digamos. Conste que yo no soy, para nada, la reina de la vida social, pero me gustaría pensar que podrémos hacer ciertas cosas y no lo tengo claro.
Todavía ahora quedar para tomar algo en una terraza o dar una vuelta por un parque es factible, pero con el frío no lo será. Mucha gente se cerrará a cal y canto porque claro, tomar un café es contagio seguro o ir a tomar el aperitivo al ser en sitios cerrados. Y el teatro y el cine, actividades de menor riesgo, no te permiten socializar tanto, porque viendo la obra o la película no hablas. Y entonces nos tiraremos sin ver a la gente semanas, fuera de aquellos con los que convivimos. Para la gente que vive sola, que no es mi caso, tiene que ser tremendo. Me da bajón pensarlo, porque todo esto tiene un componente social serio. Relaciones de amistad deterioradas de alguna forma, incluso familiares. Y no lo digo por mí sino de forma global.
Si, eso temo yo, cuando llegue el frio que va a pasar, ahora intentas socializar al aire libre, pero cuando llegue el frio eso se acabará, soy incapaz de pensar en como serán este año las Navidades..