El vestido con tanto pespunte diferente según la zona y sin orden ni concierto ninguno - rombos, mariposa, hexágonos, liso en el cuello, rayas, volantes, ETC ETC resulta absolutamente DESCONCERTANTE.....y MAREANTE.
Y ella lo remata con esos pendientes a lo años 80, el moño despeluchado como de haber salido de clase de zumba y los zapatos de prosti. Un despropósito vaya. De verdad que no la entiendo nunca, pero lo de hoy es algo que se escapa a un posible entendimiento, es surrealista y de risa. Eso sí, la prensa está que se sale baboseando más que nunca y diciendo que está sublime, espectacular y guapísima. Ascazo de periodistuchos que escriben esos articuluchos