Yo solo hago apología de la felicidad y a juzgar por la cantidad de esposas que son asesinadas por sus maridos, no siempre la felicidad está en el matrimonio.Creo que nadie tiene la vida perfecta, y las amantes, las otras... mucho menos, pero bueno, cada uno busca su resquicio de felicidad donde puede y donde le dejan desde luego, hacer apología de estas cosas es cuanto menos, curioso.