Bingazo otra vez, los tienes caladísimos!
Parezco yo la policía parfavar. Sí, es un gremio peculiar en su vida matrimonial, me estaría arriesgando mucho diciendo que es un gremio destinado a fracasar en sus matrimonios aunque luego no se separen pero es que conozco ya tantas historias,son matrimonios de mierda. Las pavas muuuuy pavas que suelen ir enlazadas a muchos de estos tíos se enamoran de la imagen alfística que desprende el maromo, con trabajo de cierto respeto o prestigio (según se mire) y luego la realidad es otra: vienen a casa hasta los huevos de todo quemados porque ven de todo, la autoridad la tienen en el uniforme pero luego sin ellos pues tendrán que hacerse valer por otras cualidades, se casan pronto porque las pavillas necesitan bodorrio de postín con el que fardar "he pillado a un poli tía jijiji", si es nacional y le andan destinando a varios sitios tienes que ir de la mano, osea, toda la relación se centra en el madero y a ti que te jodan, pero como son pavérrimas éstas van al son del maromo, que si no se quedan solas. Curiosamente, la mayoría de pavillas que conozco no tienen hobbies, son caseras, sin amigas, han pasado toda la vida concentrando los pocos esfuerzos que han hecho en trincar al madero porque ellas andan como anuladas como personas, su único interés es casarse y poco más. Los cuernos los tienen garantizados, eso es algo clavado sin temor a equivocarme pues son muy golfos con eso de que son polis y van por ahí repartiendo la pana como si fueran los gladiadores de la antigua Roma, siempre habrá alguna que pueda caer y así sacarse las telarañas de una convivencia aburridísima con una pan sin sal. Se casan por la iglesia, eso de rigor.
Ya comentaremos el gremio de locales, yo es que a esos ni les llamo policías, son reguladores del tráfico y poco más.
