De acuerdo, pero es triste verlo solo, sin sus hijas que no sabemos si saben esquiar o no un deporte muy real y pueden ser invitadas por otras casas reales a esquiar. Eso sí: si las invitan. Porque con la de desprecios que ha hecho siempre su madre, a lo mejor ya ni las invitan nadie a nada.Mejor solo que mal acompañado