Si es que además tanto darle vueltas y hay gente sueca que en Twitter reconoce que no es por el gasto ni nada, que no les da la gana dar de comer a quien venga a su casa porque desde su punto de vista lo ven absurdo, que son así de rancios y yaCon lo fácil que es decir que es porque son unos rancios , no tiene tanto misterio . Yo aún estoy traumatizada de mi primera cena en Dinamarca que yo pensaba que iba de invitada y no, me toco cocinar, eso si, cuando venían a mi casa o hacían ni el amago de recoger la mesa.