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Las imágenes de los hermanos Kennedy (uno con la cabeza reventada y el otro moribundo en el suelo) son imágenes que forman parte de la historia porque sucedieron en público y sus protagonistas eran personas relevantes. Paquirri (figura de máxima notoriedad en esa época) sufrió un accidente en el desempeño de una profesión pública que derivó en su muerte. A la niña Omaira la vimos agonizar y morir en directo en todas las teles del mundo. A Franco lo vimos en la cama entubado. El accidente del Concorde lo pasaron en bucle en la tele. Los atentados del 11S, lo mismo (hasta enseñaban a la gente saltando de las ventanas). Y así con muchas muertes públicas. Son hechos de relevancia histórica y social que quedaron registrados en imágenes y de los que los medios se hacen eco. Si es espectáculo o información es otro debate.
¿Que a los familiares les duele? Por supuesto. Imagina a las familias de los pasajeros del Concorde, o a las de los que murieron en las torres gemelas. ¿Les debe gustar ver esas imágenes cada aniversario en la tele? Por supuesto que no, pero son hechos de relevancia histórica.
Hasta los muertos tienen derecho al honor y sus familiares a protegerles del morbo con que se lucran y disfrutan los desaprensivos. Si alguien quiere ver un muerto, lo hará si su familia lo exhibe bien preparado en una capilla ardiente, sino ver a Sharon Tate destripada con su hijo muerto, o al presidente Kennedy con la cabeza reventada o a un desgraciado suicidándose desde una torre no aporta nada excepto alimentar un morbo insano. El Supremo dio la razón a la Pantoja para que no se puedan emitir las imágenes de Paquirri moribundo.
Por cierto,me disculpo con Ana y Lecquio por hablar de estos temas en este hilo sobre su hijo (imagino que menos mal que no lo leerán, inclusive la burla a su dolor en algunos comentarios).