Pues yo si estoy dispuesta a pagar, que tengan los hijos que quieran, los derechones y nos dejen a los demás vivir en paz.Yo no quiero pagar para que la gente tenga hijos para cobrar la subvención y vivir de la producción humana, y luego desentenderse de ellos y que sea mi problema. Francamente, es hacer un pan como unas tortas.