Violaciones grupales España

La diputada que avisó del escándalo de los menores en Mallorca y la tacharon de loca
Xelo Huertas, expresidenta del Parlamento balear, fue acusada de demagoga, exagerada y alarmista por denunciar en 2017 las negligencias y falta de recursos en los servicios sociales

 
Los acusados de violar a tres hermanas de EEUU en Murcia aportan un chat con ellas al día siguiente de la agresión

En la conversación con una de las chicas, ella propone a uno de ellos ir a visitarlo a su apartamento

Los jóvenes afganos acusados de agredir sexualmente a tres hermanas estadounidenses en Nochevieja en Murcia han aportado al juzgado una conversación con una de las chicas en la que ella propone a uno de ellos ir a visitarlo a su apartamento, lo que según el abogado ratifica que es una "denuncia falsa".

La conversación se produjo el día 1 de enero, después de la supuesta agresión, a través de Instagram.

En torno a las 8:30 de la mañana, una de las chicas escribió un mensaje a uno de los acusados, en el que le dice que finalmente no se marchó en autobús ese día (los acusados acompañaron a las hermanas a la estación de Murcia), sino que permanecía en la ciudad, y le preguntaba si podía ir a su apartamento así como su dirección.

Para el abogado de los acusados, Melecio Castaño, ese mensaje es "una prueba más de que estamos ante una denuncia falsa", por lo que ha reiterado su petición de "cese inmediato de las medidas cautelares" impuestas a sus defendidos, que no pueden abandonar España y deben comparecer en el juzgado semanalmente, así como que se archive la causa.

Castaño ha insistido en el "retraso" que está sufriendo la tramitación de este caso, originado en su opinión por las propias denunciantes, que abandonaron España sin ratificar su denuncia en el juzgado y en contra del criterio de la instructora, que llegó a emitir una orden europea para localizarlas el pasado 24 de enero, si bien unos días más tarde un despacho murciano se hizo cargo de su defensa.

Por último, el letrado de los acusados ha pedido que se proceda a visionar "todos los mensajes, fotografías, vídeos y audios" de los móviles de los acusados de los días 31 de diciembre y 1 de enero, así como las grabaciones de las cámaras de seguridad del pub donde supuestamente comenzaron los abusos sobre las hermanas y las de la estación de autobuses para corroborar su versión de que todos los actos fueron consentidos.

 
He visto reportajes de crímenes imperfectos Usa, y hacen lo q sea para cobrar de los seguros. En Usa hay seguros para todo. Vete a saber esas chicas se lo montaron luego para a ver si cobraban a costa de estos tres. Huele a mala jugada total por parte de ellas.
 
Ver el archivo adjunto 1292777


A mi, cuando me dicen que solo el 0,1% de las denuncias por violencia de género son falsas, es que me cruje todo. Con un 30,53% de absoluciones es im-po-si-ble. Otra cosa es que los absueltos o el fiscal no denuncien a las mujeres que presentan denuncia falsa, pero si hay absolución, o me he vuelto yo loca o hay algo que no me encaja.
Absolución =/ Denuncia falsa. Las absoluciones se puede dar también por falta de pruebas, entre otras cosas.

Lo que hablais de los seguros, justamente donde más denuncias falsas se encuentran en España es en tema robos/hurtos precisamente para cobrar seguros, con la introducción de estos de "antiviolación" era de esperar estos intentos de fraude. Pero vamos, hay que ser bien desalmado para acusar a alguien de violación para cobrar pasta.
 
Alicante (argelia sino me equivoco y algun pais más)
Azuqueca de Henares (marroquis)

origen: musulman

lo pongo por que HAY SILENCIO en los medios, y esos HDP a una niña la destrozaron, no interesa sacarlo pero si a los de la manada
 

Igualada, Pamplona, tu pueblo o el mío; el lugar no importa, el miedo es el mismo​


Ana Requena Aguilar
@RequenaAguilar

Foco
IGUALDAD
El grupo feminista LasTesis realiza el performance Un violador en tu camino, en Santiago de Chile (Chile). EFE/Elvis González/Archivo
El grupo feminista LasTesis realiza el performance "Un violador en tu camino", en Santiago de Chile (Chile). EFE/Elvis González/Archivo
4 de noviembre de 2021 22:38h
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Igualada. Pamplona. A Pobra do Caramiñal. Mijas. Manresa. Alcàsser. La historia de una mujer que sale de casa y no vuelve, o que vuelve pero lo hace agredida, destruida, magullada, vejada, es la historia de nuestras vidas. No es la excepción, no es el hecho aislado, es la manera en que las mujeres aprendemos a vivir desde que tenemos uso de razón.

Ella tiene 16 años y salió de fiesta con sus amigas. Acabó tirada en una calle, desnuda, inconsciente, brutalmente agredida. Ella no recuerda nada, pero ya ha dicho que siente culpa. Afronta ahora una recuperación física, psicológica, emocional, pero también el ruido mediático, la atención y el escrutinio público, y la carrera de fondo que será la investigación policial y el proceso judicial.

De la agresión tiene que recuperarse, sobre todo, ella. Pero también nosotras. Porque su cuerpo tirado en el suelo de un polígono es esa alarma que nos salta a todas para recordarnos que no debemos bajar la guardia. Hoy, mañana, pasado, las mujeres que salgan de fiesta, o que crucen un parque, que atraviesen un descampado, que se suban a un autobús nocturno, o que queden con un hombre con el que quizá quieran subir a casa tendrán, de fondo, a esa chica de Igualada en su cabeza.

El miedo puede ser un mecanismo adaptativo: nos ayuda a saber cuándo tenemos que huir o pelear para salir adelante. Pero el miedo es también una poderosa herramienta de control.

Un informe de la organización Plan Internacional señalaba que el 40% de las mujeres que viven en ciudades evita lugares por razones de seguridad. Ese estudio llamaba la atención sobre Madrid, donde el 49% de mujeres aseguraba que los incidentes "suceden con tanta frecuencia" que ya estaban acostumbradas. Muchos de los incidentes en la capital, apuntaban, ocurrían "en torno a sitios centrales e importantes".

La Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea publicó hace unos años la mayor encuesta a nivel mundial sobre violencia de género. De los 186 millones de mujeres adultas que viven en Europa, 62 millones, es decir, una de cada tres, ha sufrido violencia física o sexual durante la adultez. Una de cada 20 ha sido violada. La mitad de las mujeres evitan 'situaciones de riesgo', como viajar en transporte público, salir solas de casa o caminar por lugares poco concurridos.

Igualada. Pamplona. A Pobra do Caramiñal. Mijas. Manresa. Alcàsser. La chica que violaron en tu pueblo o la amiga que no te quiso contar qué le sucedió aquella noche con ese chico con el que se acostó. Igualada. Pamplona. A Pobra do Caramiñal. Mijas. Manresa. Alcàsser. Tu pueblo, el mío. El lugar no importa, el miedo es el mismo.

La incomodidad del tipo que te acecha en un bar, el amigo que se pone pesado una noche, la estrategia que anticipamos para volver a casa, el miedo en la calle, la inquietud en el portal, no perder de vista tu copa, la duda de si irte con ese tío a la cama, el superior baboso al que no sabes cómo pararle los pies, el novio insistente ante el que acabas rindiéndote.

Dice la última Macroencuesta de Violencia contra la Mujer hecha en España que el 6,5% de las mujeres (1,3 millones) ha sufrido violencia sexual en algún momento de sus vidas por parte de alguien que no era su pareja o expareja. El 2,2% de las mujeres (casi medio millón de mujeres) ha sido violada. El 99,6% de los agresores sexuales eran hombres, fundamentalmente hombres conocidos para las mujeres.

El lugar no importa, el miedo es el mismo. De qué manera podemos pensar en la igualdad cuando el temor por nuestra integridad física y psicológica, por nuestra vida, nos ocupa tanto tiempo y energía.

Esa Macroencuesta dice también que solo el 8% de las mujeres que sufre violencia sexual la denuncia. Entre otros motivos, por la vergüenza y la culpa, esa culpa que la chica de Igualada ya siente, aunque apenas recuerde. Quizá le ayude recordar aquellas líneas que cantaban Lastesis y que repitieron miles de mujeres en todo el mundo:

Y la culpa no era mía, ni dónde estaba ni cómo vestía.
El violador eres tú.

 
El caso ha ocurrido en Italia, que horror:

Conmoción en Italia por la brutal violación grupal a una joven de 13 años delante de su novio​

La víctima fue agredida en un baño público de Catania por dos menores mientras otros cinco inmovilizaban a su pareja​


Una nueva violación grupal después de las dos que tuvieron lugar el pasado verano ha vuelto a sacudir a la sociedad italiana. Los hechos tuvieron lugar en Catania la semana pasada y tienen como víctima a una muchacha de 13 años que estaba paseando por la tarde con su novio, de 17, por un parque del centro de esta ciudad siciliana cuando se vieron rodeados por un grupo de siete jóvenes. De entre 15 y 19 años, todos ellos son de origen egipcio y viven en un centro de acogida después de haber llegado a Italia de manera irregular entre los años 2021 y 2023.


Los supuestos agresores obligaron con amenazas a la pareja a dirigirse a un baño público, donde dos de ellos, menores de edad, violaron a la chica mientras los otros cinco impedían a su novio que interviniera, obligándole a que contemplara la escena. La muchacha les pidió que no le hicieran daño confesándoles además que no había mantenido nunca relaciones sexuales, pero sus imploraciones no sirvieron para nada.
Una vez concluida la violencia, los novios pidieron ayuda llamando de inmediato a los Carabinieri, que se presentaron en el lugar junto a una ambulancia, cuyo personal atendió a la joven. Las fuerzas de seguridad consiguieron encontrar en poco tiempo a los siete presuntos agresores, que fueron detenidos el pasado sábado, siendo varios de ellos identificados por la joven en una rueda de reconocimiento. Seis de los acusados se encuentran detenidos como medida cautelar mientras que el séptimo está en arresto domiciliario.
Este último, de 19 años, se beneficia de haber colaborado con la investigación, ya que al llegar a la casa de acogida donde vive confesó a uno de los monitores que había asistido a una violación, ayudando a identificar a los otros presuntos agresores. Aunque niega que haya participado, como también han hecho otros implicados al asegurar que simplemente paseaban por el parque, la víctima acusa a todos de haber formado parte del grupo y de incitar además a los dos muchachos para que la violaran. Resultará determinante para establecer las posibles condenas contra los jóvenes los restos de ADN que fueron encontrados en la ropa de la chica.


El ataque múltiple de julio​

Pese a que los trabajadores de la casa de acogida donde residen los siete jóvenes egipcios destacaran el buen comportamiento mostrado hasta el momento, la violación grupal ha vuelto a poner de manifiesto la dificultad de las instituciones italianas para garantizar una buena integración en la sociedad de los migrantes menores de edad que llegan al país, ya sea tras desembarcar en un puerto al surcar el Mediterráneo Central o después de cruzar la frontera terrestre. En 2022 fueron más de 14.000 los extranjeros menores de edad no acompañados que llegaron a Italia, una cifra que se superó ampliamente en 2023, un año que se cerró con más de 23.000 presentes en el territorio nacional. Pese a este incremento, el Gobierno de Giorgia Meloni ha reducido en 45 millones de euros la financiación a los ayuntamientos destinada a la acogida a estos migrantes.

Un caso similar al acaecido en Catania tuvo lugar el pasado mes de julio en Palermo, cuando siete jóvenes italianos con edades comprendidas entre los 17 y los 22 años agredieron sexualmente a una chica de 19. Mientras seis de ellos la violaban, el séptimo grabó los hechos con un teléfono móvil. A diferencia de lo sucedido en Catania, entonces hubo que esperar más para encontrar a los responsables, que no fueron detenidos hasta un mes y medio después de la agresión.
 
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