Me daban pena en el fondo, pero verlas ahí enormes ahogadas...con esas patazas largas y gordas. No pude meterme en la piscina y era bien chula.
Luego soy incapaz de matarlas, no tengo por qué, son super útiles y necesarias, pero...las grandes me dan un asco....
Yo si veo una por ahí no la mato, pero, si está en mi habitación, sí que le pego un zapatillazo porque me da miedo que se me meta en la boca mientras duermo.
Mi aracnofobia empezó con 6 años. Con mi abuela hacia limpieza en el garaje y ella mataba a todas las arañas (opiliones realmente) Al fallecer ella yo me vine arriba e intenté hacerlo sola. El resultado fue un bicho de esos espantosos subiendo por mi brazo.
A partir de ahí ya no podía ni verlos, pero podía sobrevivir en presencia de cualquier otra especie arácnida.
Hasta que un día haciendo una sesión de fotos en unos búnkeres me metí en uno para colocar el flash y ahí, justo al lado de donde estaba apoyando mi bracito estaba la famosa araña tamaño pelota de tenis, la que tu ya conoces.
Desde ese día empezó el horror, me dan pánico todas, desde la más pequeña a la más grande, no hago distinciones.
Hace unos días, en el trabajo salió una de debajo de unas cajas y me negué a entrar al almacén hasta que no la sacaran con sus 8 patas por delante.
Al final la fobia me supone un problema grande porque me dan "repelús" hasta cosas que se parecen a arañas como algunas flores o incluso el típico enredo de pelos que se hacen en las ruedas de los carros.
Yo en casa no tolero ningún bicho, útiles o no, me da igual. En casa si aparece alguno lo mato sin remordimiento alguno. No tengo aracnodobia, pero os puedo contar que me mudé de una ciudad del sur donde trabajaba a una fría del norte para no tener que ver ni una cucaracha más. Sólo por ese motivo, así que os podéis imaginar el nivel de fobia que les tengo. Os compadezco a las de la aracnofobia porque ahí no vale mudarse. Están en todas partes.
