LOCOMOTORAS A VAPOR - TRENES HISTORICOS Y TURISTICOS - FFCC (tranvías, metros, funiculares)
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Restos de amianto en cabinas
Un trabajador de mantenimiento de Metro ha sufrido esta semana un desprendimiento de polvo, al abrir el armario de baja tensión de la cabina de conducción de un tren de la serie 2000, cuyo análisis ha dado positivo por amianto. Metro de Madrid ha abierto expediente a la empresa que lo había revisado. Según denuncia Solidaridad Obrera, el incidente tuvo lugar la madrugada del 27 al 28 de noviembre y el análisis del polvo desprendido confirmó la presencia de amianto en la cabina, que había sido revisada, como obliga la ley tras la retirada de los elementos con amianto en forma de cartón, por “una empresa homologada que certificó que era totalmente segura“.
Desde Metro de Madrid aseguran que, dentro del plan de desamiantado que la compañía está llevando a cabo de forma exhaustiva, surgen piezas que aún podrían contener amianto como en este caso, en que se han puesto en marcha los protocolos de forma inmediata, según un portavoz de la compañía. Al trabajador afectado se le hará el correspondiente examen médico, según Metro que informó lo sucedido al comité de seguimiento del Plan de desamiantado, del que forman parte los sindicatos, y de la apertura de un expediente a la empresa que “había certificado que la cabina estaba limpia de amianto”.
Solidaridad Obrera explica, en un comunicado, que los maquinistas también operan en este armario de baja tensión cuando tienen que resolver incidencias menores durante los desplazamientos y que, ante el riesgo estaban siendo dotados de mascarillas FFP3 para protegerse del amianto”. Sin embargo, “la empresa de forma unilateral decidió retirarlas de su protocolo IG-12, circunstancia por la que la Inspección de Trabajo ha levantado una infracción“. Por ello, consideran que el Plan de Trabajo presentado para la retirada de amianto por la empresa homologada al Instituto Regional de Seguridad en el Trabajo “debe ser revisado. El lugar de la retirada sigue presentando adherencias en los restos de amianto que permanecen incrustados, algo que sucede por altas temperaturas”, continúa Solidaridad Obrera.
Esta circunstancia “agrava la exposición, y ni siquiera permitiría trabajar a la empresa RERA homologada que opera actualmente porque el plan no cumpliría los requisitos necesarios, poniendo en riesgo a los trabajadores inscritos en el RERA y los que les rodean que carecen de cualquier medida de protección”. Añaden que “la suciedad donde están los elementos con amianto, han dejado restos degradados de amianto en superficie a lo largo del tiempo, y los trabajadores no están protegidos porque Metro de Madrid consideró que no eran necesarios los equipos de protección individual”.
Aunque Metro argumentó que las mediciones estáticas en ambiente (tren parado) demuestran que se está trabajando en ambientes seguros, sin embargo, lo sucedido la pasada madrugada “contradice esta afirmación”. “La vida de los trabajadores de mantenimiento de trenes y maquinistas se está poniendo en peligro debido a que la presencia de material friable en cabinas es una certeza“, según el sindicato para quien Metro “no puede aislar esta circunstancia como un hecho puntual, porque este y otros trabajos son cotidianos en los mantenimientos” que realizan los trabajadores.
“La indefensión de los trabajadores de Metro de Madrid ante el amianto es entre otros motivos por lo que estamos llamados a la huelga de 24 horas el día 3 de diciembre convocada por Solidaridad Obrera en coincidencia con la EMT”, continúa. Además de esta convocatoria, se sumará la del 13 de diciembre de 24 horas en la que también coincidirán ambas empresas de transporte, Metro de Madrid y EMT, concluye Solidaridad Obrera.
Un trabajador de mantenimiento de Metro ha sufrido esta semana un desprendimiento de polvo, al abrir el armario de baja tensión de la cabina de conducción de un tren de la serie 2000, cuyo análisis ha dado positivo por amianto. Metro de Madrid ha abierto expediente a la empresa que lo había revisado. Según denuncia Solidaridad Obrera, el incidente tuvo lugar la madrugada del 27 al 28 de noviembre y el análisis del polvo desprendido confirmó la presencia de amianto en la cabina, que había sido revisada, como obliga la ley tras la retirada de los elementos con amianto en forma de cartón, por “una empresa homologada que certificó que era totalmente segura“.
Desde Metro de Madrid aseguran que, dentro del plan de desamiantado que la compañía está llevando a cabo de forma exhaustiva, surgen piezas que aún podrían contener amianto como en este caso, en que se han puesto en marcha los protocolos de forma inmediata, según un portavoz de la compañía. Al trabajador afectado se le hará el correspondiente examen médico, según Metro que informó lo sucedido al comité de seguimiento del Plan de desamiantado, del que forman parte los sindicatos, y de la apertura de un expediente a la empresa que “había certificado que la cabina estaba limpia de amianto”.
Solidaridad Obrera explica, en un comunicado, que los maquinistas también operan en este armario de baja tensión cuando tienen que resolver incidencias menores durante los desplazamientos y que, ante el riesgo estaban siendo dotados de mascarillas FFP3 para protegerse del amianto”. Sin embargo, “la empresa de forma unilateral decidió retirarlas de su protocolo IG-12, circunstancia por la que la Inspección de Trabajo ha levantado una infracción“. Por ello, consideran que el Plan de Trabajo presentado para la retirada de amianto por la empresa homologada al Instituto Regional de Seguridad en el Trabajo “debe ser revisado. El lugar de la retirada sigue presentando adherencias en los restos de amianto que permanecen incrustados, algo que sucede por altas temperaturas”, continúa Solidaridad Obrera.
Esta circunstancia “agrava la exposición, y ni siquiera permitiría trabajar a la empresa RERA homologada que opera actualmente porque el plan no cumpliría los requisitos necesarios, poniendo en riesgo a los trabajadores inscritos en el RERA y los que les rodean que carecen de cualquier medida de protección”. Añaden que “la suciedad donde están los elementos con amianto, han dejado restos degradados de amianto en superficie a lo largo del tiempo, y los trabajadores no están protegidos porque Metro de Madrid consideró que no eran necesarios los equipos de protección individual”.
Aunque Metro argumentó que las mediciones estáticas en ambiente (tren parado) demuestran que se está trabajando en ambientes seguros, sin embargo, lo sucedido la pasada madrugada “contradice esta afirmación”. “La vida de los trabajadores de mantenimiento de trenes y maquinistas se está poniendo en peligro debido a que la presencia de material friable en cabinas es una certeza“, según el sindicato para quien Metro “no puede aislar esta circunstancia como un hecho puntual, porque este y otros trabajos son cotidianos en los mantenimientos” que realizan los trabajadores.
“La indefensión de los trabajadores de Metro de Madrid ante el amianto es entre otros motivos por lo que estamos llamados a la huelga de 24 horas el día 3 de diciembre convocada por Solidaridad Obrera en coincidencia con la EMT”, continúa. Además de esta convocatoria, se sumará la del 13 de diciembre de 24 horas en la que también coincidirán ambas empresas de transporte, Metro de Madrid y EMT, concluye Solidaridad Obrera.
Publican un pormenorizado relato sobre la vía estrecha valenciana: 378 páginas
4 diciembre, 2019 por Redacción FG / 0
‘La historia del Trenet de Valencia’ ya se puede conocer con todo lujo de detalles gracias al libro que lleva ese mismo título.
Foto: Redacción FG
De reciente aparición, ya está a la venta en las principales librerías especializadas, como la situada en el Museo del Ferrocarril de Madrid-Delicias, la obra ‘La historia del Trenet de Valencia’, un prolijo trabajo que ha realizado Javier Golf Sánchez, un Técnico Superior Ferroviario que ha contado con la colaboración de Paco Pons López y Agustín Lorente Alcalá en las secciones de documentación y planos. Publicado por la Editorial Brúfol, el libro suma 378 páginas y 574 imágenes (fotos, esquemas y planos), y su estructura la componen un prólogo, 15 capítulos, un epílogo, dos anexos (uno con un detallado listado del material remolcado y el otro documental), y una amplísima bibliografía. Golf Sánchez ha completado una detallada redacción sobre el tema, con vastos capítulos divididos en apartados que ofrecen en su conjunto una magnífica visión global del ‘Trenet’ de Valencia.
Entre esos capítulos, algunos destacan por su interesante lectura, como el VIII, ‘Los ferroviarios de 1875 a 1936’, en el que se analizan los contratos, el servicio de mantenimiento, la brigada de vías y obras, el personal de talleres, los salarios, los accidentes en el periodo 1888-1936… En el IX, ‘El sindicalismo en la SVT, FC de Turís y CTFV’, se tratan las huelgas y disturbios de 1886 a 1931, el asesinato de Carlos Blanco, la Unión Sindical de Auto-Ferro-Tranvías de Valencia y Pueblos limítrofes, las huelgas de marzo y abril de 1934… También es fascinante el capítulo X, ‘Guerra Civil y Revolución obrera’, en el que se relata la represión republicana, el desarrollo de la Guerra en CTFV, los refugios antiaéreos, el material móvil durante la Guerra Civil, los bombardeos en estaciones de CTFV, la represión franquista, el proceso de depuración… En los apartados sobre material se desgranan las locomotoras adquiridas en la posguerra, los Devis serie 50, los portugueses, los coches Wumag, las locomotoras eléctricas T-101 y T-102, las unidades-tren MACOSA serie 1000, los coches belgas, los automotores Naval y Billard, el tractor Naval 1314, la locomotora Creusot
4 diciembre, 2019 por Redacción FG / 0
‘La historia del Trenet de Valencia’ ya se puede conocer con todo lujo de detalles gracias al libro que lleva ese mismo título.
Foto: Redacción FG
De reciente aparición, ya está a la venta en las principales librerías especializadas, como la situada en el Museo del Ferrocarril de Madrid-Delicias, la obra ‘La historia del Trenet de Valencia’, un prolijo trabajo que ha realizado Javier Golf Sánchez, un Técnico Superior Ferroviario que ha contado con la colaboración de Paco Pons López y Agustín Lorente Alcalá en las secciones de documentación y planos. Publicado por la Editorial Brúfol, el libro suma 378 páginas y 574 imágenes (fotos, esquemas y planos), y su estructura la componen un prólogo, 15 capítulos, un epílogo, dos anexos (uno con un detallado listado del material remolcado y el otro documental), y una amplísima bibliografía. Golf Sánchez ha completado una detallada redacción sobre el tema, con vastos capítulos divididos en apartados que ofrecen en su conjunto una magnífica visión global del ‘Trenet’ de Valencia.
Entre esos capítulos, algunos destacan por su interesante lectura, como el VIII, ‘Los ferroviarios de 1875 a 1936’, en el que se analizan los contratos, el servicio de mantenimiento, la brigada de vías y obras, el personal de talleres, los salarios, los accidentes en el periodo 1888-1936… En el IX, ‘El sindicalismo en la SVT, FC de Turís y CTFV’, se tratan las huelgas y disturbios de 1886 a 1931, el asesinato de Carlos Blanco, la Unión Sindical de Auto-Ferro-Tranvías de Valencia y Pueblos limítrofes, las huelgas de marzo y abril de 1934… También es fascinante el capítulo X, ‘Guerra Civil y Revolución obrera’, en el que se relata la represión republicana, el desarrollo de la Guerra en CTFV, los refugios antiaéreos, el material móvil durante la Guerra Civil, los bombardeos en estaciones de CTFV, la represión franquista, el proceso de depuración… En los apartados sobre material se desgranan las locomotoras adquiridas en la posguerra, los Devis serie 50, los portugueses, los coches Wumag, las locomotoras eléctricas T-101 y T-102, las unidades-tren MACOSA serie 1000, los coches belgas, los automotores Naval y Billard, el tractor Naval 1314, la locomotora Creusot
NOTICIAS FERROVIARIAS.-
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Una protesta de ferroviarios paralizó el servicio de trenes de la línea Roca-----------------------------------------------
Un grupo de trabajadores realizó por más de 6 horas una medida de fuerza gremial para reclamar su reincorporación por despidos. Hubo cerca de 200 mil usuarios afectados
Un corte de vías en la estación “Darío Santillán y Maximiliano Kosteki", en el partido de Avellaneda, paralizó el servicio del ferrocarril Roca desde el mediodía y hasta las 16:30 de este jueves. La protesta fue encabezada por un grupo de cerca de 70 trabajadores ferroviarios despedidos que reclaman por su reincorporación.
El conflicto gremial fue confirmado por la empresa Trenes Argentinos a través de un comunicado, en el que aseguraron que quienes cortaron las vías "nunca formaron parte” de la compañía.
En el grupo se encuentra personal de una ex empresa contratista de seguridad privada, MCM, y ex trabajadores de la línea Roca que se atuvieron al retiro voluntario o fueron despedidos con justa causa por pluriausentismo", señalaron desde la gestión estatal en la comunicación oficial.
Los ramales Bosques por Temperley, Ezeiza y Korn cortos desde Temperley; ramales Bosques vía Quilmes y La Plata cortos desde Berazategui. Constitución-Berazategui y Constitución-Temperley se encontraban interrumpidos. Por su parte, los ramales Bosques vía Temperley, Ezeiza y Korn prestaban un servicio limitado desde Temperley.
Los ramales Bosques vía Quilmes y La Plata estuvieron limitados desde Constitución-Quilmes y Constitución-Temperley sin servicio, agregó la compañía pública.
La protesta afectó a un sistema de transporte que cotidianamente traslada a unos 200 mil pasajeros. La empresa radicó una denuncia penal por obstrucción del servicio público en el Juzgado Federal de Quilmes y en el lugar interviene la División Roca de la Policía Federal.
Desde Trenes Argentinos advirtieron que el servicio podrá ser restaurado con su cronograma habitual de horarios una vez que las vías queden liberadas
