Lo que escondian sus ojos ( Marquesa de Llanzol y Ramón Serrano Suñer)

Si Carmen en 1.999 tenía 57 años hoy tendría 74 ¿entonces era mayor que su hermano?
Tenía 17 cuando se iban a casar y saltó la tragedia .Algo no está bien en las fechas.
 
Y es que además la propia Carmen habla de que desde los 6 años coqueteaba
con él, .Con un bebe de 2 años? ??? Creo que la periodista se ha columpiado,
 
¿Qué fue de Ramón Serrano-Suñer Polo, el amor prohibido de Carmen Diez de Rivera?
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Carmen Diez de Rivera y Ramón Serrano-Suñer Polo. AGENCIAS
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'Rolo' se casó con la hija del duque de Almodóvar del Río, con la que tiene cinco hijos y varios nietos. Fue abogado en el Banco Santander, pleiteó con sus hermanos por la herencia del cuñadísimo y hoy sigue vivo...

14/01/2017 03:42
Mucho se ha hablado estos meses del romance adúltero entre la marquesa de Llanzol y Ramón Serrano-Suñer, del que nació la bellísima eurodiputada Carmen Diez de Rivera. La teleserie Lo que escondían sus ojos ha reactivado esta fascinante historia de amor real que supera cualquier novela romántica, incluso histórica. Sin embargo, se queda sólo en la relación secreta entre los padres de la musa de la Transición, principal víctima de esta aventura extramatrimonial, y no profundiza en el sueño truncado de esta mujer de formar una familia con Ramón Serrano-Suñer Polo, del que se enamoró siendo una niña y se enteró de que era su hermanastro cuando iban a casarse.

Tanto Sonsoles de Icaza como el que fuera ministro de Asuntos Exteriores en tiempos de Franco y la hija de ambos están muertos pero, ¿qué fue de Ramón hijo, alias Rolo, el último protagonista de este dramón que sigue vivo?

Este suplemento ha intentado contactar con él por diversas vías, pero con su silencio interpretamos que no quiere oír ni hablar de esta historia, al igual que la familia Diez de Rivera al completo.

Fuentes a las que hemos tenido acceso apuntan que Ramón Serrano-Suñer Polo, que tiene hoy 71 años y está jubilado, estudió Derecho y ha ejercido como abogado para el Banco Santander durante toda su carrera. De hecho, llegó a ser apoderado de la entidad de la familia Botín. "Es un tipo encantador, bonachón, educado, interesante y discreto. Nunca ha mencionado lo ocurrido. También se parece a su padre, por los ojos azules que también comparte con Carmen. Eso sí, no tiene nada que ver con el cuñadísimo, pues es muy cercano y nada arrogante", deslizan en su entorno.




El hijo pequeño de Zita Polo y Serrano-Suñer se casó el 26 de octubre de 1966, siete años después de enterarse de que era hermano por parte de padre de su novia Carmen Diez de Rivera, con Genoveva de Hoyos y Martínez de Irujo, hija de los duques de Almodóvar del Río y propietarios de un espectacular palacete en Comillas (Cantabria). Se dieron el sí, quiero en la iglesia madrileña de San Fermín de los Navarros y ofrecieron un cóctel en el Hotel Ritz. Asistió una amplia representación de la nobleza:los duques de Sotomayor, el conde de Mieres y el duque de Vistahermosa, los condes de Mayalde y el barón de Benedris, entre otros títulos.

La pareja tuvo cinco hijos: Alfonso, José, Fernando, Paula y Genoveva, de los que hay poca información, aunque consta que su padre comparte con ellos su pasión por la caza y pesca y fundaron una sociedad hoy inactiva de nombre Experiencias Agropecuarias S.L. Se sabe que Alfonso está casado con Lourdes García Leyaristy Benjumea y tiene tres hijos. José trabaja en BNP Paribas en Madrid, Fernando es arquitecto, Paula está casada con un Domecq y vive en Jerez y Genoveva está casada con Pedro Cabeza y Gil-Casares, conde de Casa-Tagle de Trasierra, con el que tiene cuatro hijos.

Ramón Serrano-Suñer hijo vive en un edificio cercano a donde se ubicaba hace años la agencia Efe, que fundó su padre en 1939, en el barrio de Chamberí. El mismo está habitado por sus hermanos, con los que guarda relación, aunque se enfrentaron en los tribunales tras la muerte de su padre, a los 102 años en 2003, para disputarse su herencia. El miembro en discordia fue Fernando Serrano-Suñer Polo, que heredó el 96% de las acciones de Radio Intercontinental, propiedad del patriarca y que le legó en vida. Los Serrano-Suñer Polo consideran que Fernando malvendió la emisora y unos terrenos al Grupo Intereconomía. Fernando hoy está muy enfermo y aún preside la Fundación Ramón Serrano-Suñer.

SILENCIO
Rolo, el verdadero protagonista de este reportaje, nunca se ha pronunciado al respecto, ni cuando en 2002 se publicaron las memorias de su hermana y la que fuera su primera novia, Carmen Diez de Rivera, tres años después de morir de cáncer. Fue ella quien desveló a la periodista Ana Romero, autora de Historia de Carmen (Planeta) el gran amor (y la gran tragedia) de su vida. "Yo, desde los 17 años, no he sabido vivir. Lo del hermano fue peor que el cáncer (...). Creí que me iba a casar, estaba convencida. Estuve enamorada de verdad. Tuve una relación desde muy pronto, diría que desde los seis años (...). A esa edad jugabas, pero yo correteaba con el mismo. Eran, creía yo, los hermanos de una amiga mía de mi edad (...). A los 15 años, tu afecto, tu sensualidad, tu naturaleza, tu inteligencia... todo se despierta a la vez, es amor. Entonces eso era para casarse. ¡Ahora no haría falta! Por eso era un amor insustituible, era alguien excepcional (...) Me decían en casa: '¿Cómo estás con ése, si no tiene título?' Nobiliario, claro, ¡no universitario! A mí eso me daba igual".

Aún resuenan las palabras de Carmen al evocar cuando le dijeron que Rolo era su hermano. "Yo noté que algo se me había roto dentro. Se me partió el alma porque supe que no volvería a encontrar ese amor global". Con él se unía, decía ella, la atracción física y la intelectual. No le volvió a pasar con nadie.

Curas de sueño, ingreso en conventos, misiones en África... Durante cinco años se siguió viendo con Rolo. Pero se acabó. Sólo Ramón Serrano-Suñer Polo conoció a la auténtica Carmen Diez de Rivera.

http://www.elmundo.es/loc/2017/01/14/5878cdc7ca474192318b45b9.html

¿LOC también se apunta a la moda Robatatis?

Y es que además la propia Carmen habla de que desde los 6 años coqueteaba
con él, .Con un bebe de 2 años? ??? Creo que la periodista se ha columpiado,

Esto pasa por tener como fuente un foro de cotilleos, y no llegar hasta el final del hilo.
 
Marqués de Llanzol, la discreción frente al escándalo

A los 45 años de su muerte, recordamos el papel de Francisco Díez de Rivera, el marido de Sonsoles de Icaza
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ANGIE CALERO - AngieCalero Madrid20/02/2017 01:14h - Actualizado: 20/02/2017 09:10h.Guardado en: Gente&Estilo Gente

«Cuánto vas a sufrir, Carmencita», le dijo Francisco de Paula Díez de Rivera y Casares, el marqués de Llanzol, a su hija días antes del 28 de diciembre de 1959. Paradójicamente, aquel día Carmen Díez de Rivera (1942-1999) perdió la inocencia. «Algo se me rompió por dentro», apuntaría en sus diarios. «El día de la tragedia» Carmen tenía 17 años y se acababa de enterar de que Ramón Serrano-Suñer Polo, «Rolo», el amor de su vida e hijo de Ramón Serrano-Suñer y Zita Polo, era en realidad su hermanastro y ambos se vieron obligados a anular su compromiso.

Mucho se ha hablado del affaire de Sonsoles de Icaza y León, la marquesa de Llanzol, y el cuñado de Franco desde que se estrenase la serie de cuatro capítulos «Lo que escondían sus ojos». Sin embargo, nadie ha reparado en la figura del marqués, que sabiendo que su hija menor era fruto de una infidelidad, no solo le dio sus apellidos, si no que la quiso como si fuera suya. Aprovechando que hoy se cumplen 45 años de su muerte, ABC se ha puesto en contacto con varios miembros de la familia Díez de Rivera para hablar sobre el marqués. «La familia no está de acuerdo ni con el libro ni con la serie. Están muy dolidos con el tratamiento que siempre se le ha dado a este tema. Son muy tradicionales y no asumen lo que pasó», cuenta una fuente cercana a la familia. La mayoría coincide en que era «un señor estupendo y entrañable. Entre él y Carmen existía algo muy especial. Se adoraban mutuamente».

Francisco de Paula Díez de Rivera y Casares (Santander, 1890-Madrid, 1972) fue coronel de Caballería, el último capitán de la escolta de Alfonso XIII y, más tarde, consejero del Banco de España. Tenía 46 años cuando se casó con Sonsoles de Icaza, que tenía 22, en la madrileña iglesia de la Concepción. Actuó como padrino del enlace el hermano del novio Ramón Díez de Rivera y Casares, marqués de Huétor de Santillán, que estaba casado con Pura Huétor. «La nueva marquesita de Llanzol» -como apuntó ABC en la crónica de su boda-, era una mujer elegante y sofisticada. Una adelantada a su tiempo que consideraba que las mujeres debían saber idiomas y estudiar para ser completas. Ella venía de una familia de intelectuales y disfrutaba de las fiestas de la aristocracia. A él, sin embargo, le aburrían esas cenas, prefería quedarse en casa disfrutando de sus hijos y una buena lectura.


Como militar, batalló en la guerra de Marruecos y, al comenzar la guerra civil, el marqués se incorporó al bando nacional para hacer la campaña del norte en el Ebro. Fue en el frente donde contrajo la enfermedad del tifus, de la que tardó mucho tiempo en curarse. La posición del marqués en su propia familia después de la guerra no fue fácil: su mujer mantuvo una relación extra matrimonial con Serrano-Suñer que duró más de 20 años; Llanzol era fiel al Rey y seguía en contacto con él durante su exilio, mientras su hermano Ramón era el jefe de la Casa Civil de Franco. Además, tenía un «topo» en su propia casa: la situación marital de los marqueses inquietaba tanto a Carmen Polo de Franco -que siempre quiso proteger a su hermana-, que su íntima amiga Pura Huétor tomaba el té todas las semanas en El Pardo y le ponía al corriente de todo lo que acontecía en la residencia de los Llanzol. De hecho, por ella se enteró Carmen Polo en 1942 de que el cuarto hijo que esperaba la marquesa (que ya tenía a Sonsoles, Francisco y Antonio) era de Serrano-Suñer. Años después, la propia Carmen Díez de Rivera admitió estar completamente segura de que la «caída» de su padre biológico se debió a su nacimiento.

Amor-odio
Carmen heredó la elegancia y porte de su madre, la pasión por la política de su «padre Serrano» -como ella le llamaba-, sus inconfundibles ojos azules y la tranquilidad que le producía estar cerca del mar. Del marqués, su bondad y falta de rencor. Con su madre siempre mantuvo una relación de amor-odio, pero para su «padre Llanzol» siempre tuvo palabras de agradecimiento. Cuando Carmen supo la verdad, pasó una temporada en París y Suiza haciendo curas de sueño, ingresó en el Convento de Arenas de San Pedro y estuvo tres años de misiones en Costa de Marfil. Cuando volvió a Madrid, su madre la echó de casa y ella se volcó en la política, llegando a ser la mano derecha de Adolfo Suárez. Francisco Umbral la llamó «la musa de la Transición», fue la primera mujer en ocupar un puesto relevante en el primer gobierno de la Democracia. Al poco tiempo de comenzar su andadura política, el marqués falleció y ella perdió a quien fue su referente de amor y generosidad.
 
El Mundo Orbyt.

CARMEN DÍEZ DE RIVERA

26/08/2017

LO QUE LE QUEDÓ POR CONTAR EN SU BIOGRAFÍA
VESTIDITA DE BLANCO EN UNA ESPAÑA GRIS

El periodista Luis Herrero relata en un nuevo libro la vida prohibida de la hija de la marquesa de Llanzol y Ramón Serrano Suñer, los amantes más célebres del franquismo. ‘Dejé de pronunciar tu nombre’ (La Esfera) desvela los últimos secretos de la bella musa de la Transición.
POR LUIS HERRERO

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CARMEN Y RAMÓN EMPEZARON A SALIR cuando apenas tenían 13 y 15 años. Hasta entonces, ninguno de los dos se había perdido un solo día de la infancia del otro. A los seis años jugaban juntos, a los siete comenzaron a escindirse del grupo, a los ocho ya corrían solos por el campo, a los diez se tumbaban en el suelo a contar estrellas, saltaban olas en la orilla del mar y se adentraban de la mano en la espesura del bosque. La naturaleza fue abriéndose paso poco a poco a través de sus cuerpos adolescentes. Carmen creía que las mujeres se embarazaban por el pecho. Tuvieron que rellenar con respuestas propias los escrupulosos silencios de sus mayores. Todo en ellos comenzó a despertarse al mismo tiempo: la sensualidad, el afecto, la ternura y la inteligencia.

Pero el 28 de diciembre de 1959 las cosas se descabalaron. De un plumazo, Carmen y Ramón tuvieron que acabar con la globalidad de aquel amor insustituible. Habían cruzado sin saberlo la frontera de lo permitido. La ruptura fue brutal. “En un instante pasé de estar plena, habitada por la persona a quien amaba, con la que había descubierto el primer beso, la piel y las estrellas, a la nada. El dolor interno fue inmenso, infinito. Yo noté que algo se me había roto dentro. Algo tremendo hizo crack. Noté ese ruido. Yo noté que algo se me había roto para toda la vida. Fue un dolor muy profundo. Se me partió el alma. Se apagó la luz. Me rompí por dentro. De repente, me quedé sin una sola raíz”. Carmen nunca entendió por qué no le advirtieron desde niña que estaba adentrándose en un amor prohibido. “Yo no juzgué nada. El amor no se juzga. Lo que sí pensé es: ¿ustedes como han sido tan insensatos y no me lo hicieron saber?”.

Intentó superarlo, pero no pudo. Siguió viendo a Ramón durante varios años. Finalmente, enfermó. Perdió las ganas de seguir viviendo. Entre 1961 y 1964 estuvo en París y Suiza sometiéndose a curas de sueño. Luego probó como monja de clausura. Más tarde huyó a París. Y finalmente, a Costa de Marfil. “Me fui a África porque, si no, no habría salido nunca de esa historia. No fui con ningún afán misionero. Fue un acto de desesperación. Como no podía suicidarme, a pesar de que lo pensé mucho, decidí irme aÁfrica porque estaba segura de que allí cogería alguna enfermedad que acabaría con mi vida. Fui a África en busca de la muerte”.

Pero no murió. En África comenzaron a cicatrizar sus heridas. Volvió a Madrid en 1967. Pronto se convirtió en una aristócrata rebelde que hizo la tesina sobre la juventud de Pasionaria, corrió delante de los grises, se amigó con miembros de la oposición clandestina y clamó por la legalización del Partido Comunista.

Acudía con frecuencia al Palacio de la Zarzuela y fue en esos años cuando empezó a contarle al futuro Rey lo que ocurría en la calle. Todas las noches hablaba con él por teléfono. Así empezó su aventura política. El príncipe le presentó a Suárez y se fue a trabajar con él, después de obligarle a descolgar el cuadro de Franco que presidía su despacho de director general de TVE, en el otoño de 1969. Siete años después se convirtió en jefa de gabinete del presidente del Gobierno.

En 1999 empezó a escribir su biografía con ayuda de la periodista Ana Romero. No le dio tiempo a contarlo todo. Aún hay muchos vacíos por rellenar.

Este martes, Carmen hubiera cumplido 75 años.
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    Carmen nació el 29 de agosto de 1942. Era la hija pequeña de Sonsoles de Icaza, marquesa de Llanzol, amante durante 13 años de Ramón Serrano Suñer. Aunque Carmen recibió el apellido familiar, llevaba en su cabecita la marca rubia del amor prohibido. Sus tres hermanos mayores eran morenos. Sus padres, también. Figuras oscuras de una España gris. “Cuando yo nací -le dijo en el burladero de la muerte a la periodista Ana Romero- España era gris, gris, gris. En ciertos ambientes y clases sociales, totalmente negra. A mí me llevaban vestida de blanco al parque de El Retiro y no me dejaban jugar en la arena. Los que nos miraban por la calle tenían la pobreza marcada en el pelo, y en la ropa, y en los ojos. Yo me estremecía. Claro que de niña no me daba cuenta. De esa época me quedan cosas buenas: lo primero, una rebeldía como la copa de un pino”. A mediados del último año del siglo XX, Carmen agonizaba. El cáncer había dictado su sentencia inapelable. Apenas le quedaba el tiempo justo para contar su historia. Era una historia amarga, de sueños imposibles y dolores insoportables. Pero también era una historia dulce, de redención personal y de influencia política. Empezó a escribirla en 1994. Se iba a titular ‘Para ir al pozo no hay que saber leer’. En 1999, casi en artículo mortis, no tuvo más remedio que terminarla.

    m
 
Asi es, maquillando la historia de esta gentuza.
Ahora serrano suñer era un gentle enamorau
Y ella una persona generosa.
Ademas del blankeo del franquismo, una vez mas, los actores son pesimos, esta hecho todo en cutre, como lo hace todo t5.

Mencion especial al vestuario de blanca suarez. solo hay k ver fotos de la sonsoles para saber k ella nunca vistio asi, a lo rakel moskera

Solo decir k parte de su vestuario lo ha hecho...tatatatcha petro valverde ajaja
Y los cherubina esos de palurdes montes

Ni para recrear a una mujer k iba de balenciaga valen en mierdaset

La serie es x como de risa, pero literalmente. como akella de la pantoja. k monda
Sonsoles vestia d Valenciaga.Asi k no hay color.
 
Creo que la moraleja de esta historía es : En una España ultracatólica , un miembro destacado de la "casta" se entretenía entre las sábanas de una mujer que era una aristocrata y casada con un militar monárquico , detalles que denotan una gran hipocresía . Por cierto , el todo Madrid de la época sabían del romance de la Marquesa , y guardaban un silencio sepulcral .
Leí una vez que Franco firmaba las sentencias de muerte desayunando un croissant con cafe y leche . Era un cínico y muy malo , soy muy suave , por no decir otras palabras .
Keda claro como vivian los k se apoderaron d España a golpe d pistolay como era l España real.
 
Es curiosa la fascinación que nos provoca al pueblo llano los privilegiados. A mí, la primera; esta señora no hizo nada ejemplar en la vida, tenía una formación más completa que las mujeres de su época por haber nacido en una familia que se lo posibilitó, pero sólo se dedicó en la vida a sí misma, se casó con alguien que no quería, por tener la base de hacer para lo único que al parecer tenía vocación: ELLA. Por ella pasó de convencionalismos internamente, porque hacía cara a la galería hacía lo que se esperaba de una señora de cuna: parir convenientemente y asistir a fiestas y saraos maravillosamente vestida y enjoyada. Y a misa, cubierta.

El resto de lo que hacía en su tiempo-dejando al margen viajar por el mundo para conseguir modelitos y quitarse de en medio de su vacua existencia-fue fastidiar a los suyos: no previno un embarazo en los morros de su marido, a sus hijos los señaló siendo la otra in eternum de su señor que se tiraba a todo bicho viviente con faldas, a su marido lo coronó largamente dejando que fuera objeto del cachondeo generalizado entre los demás hombres de su entorno y a su hija le destrozó la vida no cuidando que pasara lo que pasó, que se enamorara de alguien con el que había crecido, porque la Señora veraneaba además cerquita del amante, para que su marido siguiera subiendo dos cuartas.

Eso sí, era muy elegante y educó a sus hijos sabiendo que el servicio ocupa una zona de la casa, que no se pisa. Ni siquiera como el tango, sólo una buena mujer, se le puede aplicar.
Tuvo mucha suerte, su marido k decian k l adoraba, le soporto todos sus caprichos y kiso a Carmen como si fuese suya.
 
Me parece muy interesante la entrevista. Estoy de acuerdo en que Carmen se aferró a su desengaño y esto de alguna manera le amargó. Creo que no puso mucho de su parte para superarlo, creo que ella misma se victimizó.
Sinceramente, no creo que sea algo insuperable el rehacerte de un desengaño amoroso a los 17.
Hoy en día, una chica de 17 años supera algo así con terapia psicológica con bastante facilidad y puede rehacer su vida fácilmente.
No , si elmuchacho en cuetion es medio hermano, eso tiene k ser traumatico.
 
A ver.
El marido-marqués se encaprichó de una niña muy mona, y SABIA que ella se casó con él porque la situación económica de la familia de ella era delicada.
Permitir sus amoríos con Serrano fue el premio a haberle dado tres hijos sabiendo que no le amaba. (Esto tiene que ser tremendo)
Para una mujer que se casó sin amor, cruzarse con un tipo como Serrano, que era bastante atractivo, pudo ser amor, pasión, y todo lo que no había tenido en su matrimonio anterior. Y se tiró al río. A vivir que son dos días y yo ya llevo lo mío purgado.
Se dice k en esa epoca las sras a Serrano, le llamaban jamon Serrano.
 
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