DOÑA SOFÍA
06/03/2021
LA REINA SOFÍA sigue siendo el miembro más querido de la Familia Real según recientes encuestas de medios de comunicación. Y, sin embargo, hoy se encuentra apartada de la Corona. Sin ninguna explicación, sin anuncios oficiales, sencillamente por la vía de los hechos. No se la tiene en cuenta para tareas oficiales y, a pesar de que es uno de los seis miembros que integran en este momento la Familia Real, pareciera como si el objetivo fuera invisibilizarla dentro de la estrategia por pasar página de todo lo que tenga que ver con el reinado de Juan Carlos I.
El martes, por primera vez en mucho tiempo, participará en la junta de patronos de la escuela superior de música Reina Sofía. ¿Una excepción? Esta misma semana se ha hecho especialmente visible el arrinconamiento. En una solemne ceremonia en el Palacio de El Pardo, Don Felipe y Doña Letizia hicieron entrega el lunes de los Premios Nacionales del Deporte 2018 –la pandemia obligó a suspender el acto el año pasado–. No pasó desapercibida la soledad de los Monarcas en un evento que antaño reunía casi todos los miembros de la Familia Real. Incluso en los últimos años, ya excluida también la presencia de la Infanta Elena, al menos se juntaban los cuatro Reyes. Con Don Juan Carlos apartado de toda actividad institucional y con residencia en Emiratos, nadie contaba con él. Pero causó sorpresa la ausencia de la Reina Madre cuando incluso uno de los galardones lleva el nombre de Reina Sofía.
Sólo un día después, estalló la polémica revelación de que las Infantas Elena y Cristina se han vacunado ya del coronavirus en Abu Dabi, aprovechando un reciente viaje para pasar unos días con su padre. Ante las preguntas de los periodistas, la Casa del Rey dejó claro que la institución no tiene nada que ver con las acciones de las hermanas de Don Felipe y que los Reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, se vacunarán “cuando les corresponda”.
A perro flaco todo son pulgas. Y la aclaración volvía a el interrogante. Se desconoce si se ha vacunado ya o si aguarda aún a ser llamada por los servicios sanitarios correspondientes.
No es la primera vez, antes al contrario, que la Casa del Rey impone un muro comunicativo que pasa por dar explicaciones sólo sobre los Reyes y sus hijas, lo que viene a confirmar ese absoluto apartamiento de Doña Sofía tan inexplicable.
Ya publicamos en su día en LOC que Zarzuela había diseñado un plan para trasladar a la opinión pública la imagen de que la Corona ahora mismo la encarna exclusivamente el núcleo duro de la Familia, que son Don Felipe, Doña Letizia y sus hijas. Pagan justos por pecadores. Y le ha tocado a Doña Sofía tener que quedar en la sombra como consecuencia del distanciamiento con su marido, igual que en su momento se apartó injustamente a Doña Elena en la purga a su hermana Doña Cristina. Pero la realidad es que la estrategia está siendo un fracaso. La ciudadanía y los medios de comunicación siguen identificando a todos los familiares de Don Felipe con la Corona. Y, ante esa realidad, prescindir como se está haciendo de los extraordinarios servicios que podría seguir prestando Doña Sofía es un dislate y perjudica a la institución.
Hace algunas semanas, la Casa del Rey informó de las partidas presupuestarias previstas para este 2021. Y, en el apartado de sueldos de la Familia Real, se dio cuenta de la asignación de Doña Sofía, de 114.240 euros, que, como la de su hijo y su nuera, se mantiene congelada respecto al ejercicio anterior. Cuando Zarzuela empezó a comunicar estos extremos, explicó que esas asignaciones engloban tanto el concepto de sueldo bruto en sí como los fondos personales para gastos por las necesidades de representación. Y, sin embargo, como decimos, la Emérita ha dejado de formar parte de la agenda. Su defenestración, viene de lejos. Cómo olvidar cuando en octubre de 2018 se la oyó lamentarse de que con ella “no cuentan para nada”.
En lo que llevamos de año, apenas se ha visto a Doña Sofía en público. Y los actos en los que ha participado no han tenido que ver con la Corona sino únicamente con la fundación que lleva su nombre. Así, ha mantenido reuniones para por ejemplo colaborar con la Plataforma SusPlast, que lucha por combatir la contaminación de los plásticos y lograr una economía circular. Y en febrero presidió la comisión de gobierno denominada Enfermedades neurodegenerativas: Año internacional de la investigación e innovación, una reunión por videoconferencia donde Doña Sofía reafirmó el compromiso de su fundación con el Congreso Internacional sobre estas patologías que se celebrará el próximo año en Salamanca. A la Reina madre no se la vio ni siquiera en verano junto a Don Felipe y su familia en Marivent, como ocurría antes cada año, lo que ya despertó muchas suspicacias. Poco después, en noviembre, se vio envuelta en el escándalo de las tarjetas black de Don Juan Carlos con las que se habrían pagado regalos y viajes a distintos miembros de su familia, como sus nietos Froilán y Victoria Federica. Pero, a pesar de las informaciones iniciales, no se ha conocido ningún gasto de la Emérita con esas tarjetas. Aquel episodio dio pie a algunos círculos para atacarla, a sabiendas de que mantiene una imagen muy valorada entre los ciudadanos. Personas cercanas a Doña Sofía confirmaron a LOC que lo pasó realmente mal aquellos días. Aunque, demostrando que sigue siendo la misma gran profesional de siempre, no dudó en dejarse ver mostrando su mejor cara. Igual que volverá a hacer el día que le dejen... si es que le dejan.
06/03/2021
LA APARENTE ‘EXPULSIÓN’ DE LA REINA MADRE DE LA FAMILIA REAL
LA REINA SOFÍA sigue siendo el miembro más querido de la Familia Real según recientes encuestas de medios de comunicación. Y, sin embargo, hoy se encuentra apartada de la Corona. Sin ninguna explicación, sin anuncios oficiales, sencillamente por la vía de los hechos. No se la tiene en cuenta para tareas oficiales y, a pesar de que es uno de los seis miembros que integran en este momento la Familia Real, pareciera como si el objetivo fuera invisibilizarla dentro de la estrategia por pasar página de todo lo que tenga que ver con el reinado de Juan Carlos I.
El martes, por primera vez en mucho tiempo, participará en la junta de patronos de la escuela superior de música Reina Sofía. ¿Una excepción? Esta misma semana se ha hecho especialmente visible el arrinconamiento. En una solemne ceremonia en el Palacio de El Pardo, Don Felipe y Doña Letizia hicieron entrega el lunes de los Premios Nacionales del Deporte 2018 –la pandemia obligó a suspender el acto el año pasado–. No pasó desapercibida la soledad de los Monarcas en un evento que antaño reunía casi todos los miembros de la Familia Real. Incluso en los últimos años, ya excluida también la presencia de la Infanta Elena, al menos se juntaban los cuatro Reyes. Con Don Juan Carlos apartado de toda actividad institucional y con residencia en Emiratos, nadie contaba con él. Pero causó sorpresa la ausencia de la Reina Madre cuando incluso uno de los galardones lleva el nombre de Reina Sofía.
Sólo un día después, estalló la polémica revelación de que las Infantas Elena y Cristina se han vacunado ya del coronavirus en Abu Dabi, aprovechando un reciente viaje para pasar unos días con su padre. Ante las preguntas de los periodistas, la Casa del Rey dejó claro que la institución no tiene nada que ver con las acciones de las hermanas de Don Felipe y que los Reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, se vacunarán “cuando les corresponda”.
A perro flaco todo son pulgas. Y la aclaración volvía a el interrogante. Se desconoce si se ha vacunado ya o si aguarda aún a ser llamada por los servicios sanitarios correspondientes.
No es la primera vez, antes al contrario, que la Casa del Rey impone un muro comunicativo que pasa por dar explicaciones sólo sobre los Reyes y sus hijas, lo que viene a confirmar ese absoluto apartamiento de Doña Sofía tan inexplicable.
Ya publicamos en su día en LOC que Zarzuela había diseñado un plan para trasladar a la opinión pública la imagen de que la Corona ahora mismo la encarna exclusivamente el núcleo duro de la Familia, que son Don Felipe, Doña Letizia y sus hijas. Pagan justos por pecadores. Y le ha tocado a Doña Sofía tener que quedar en la sombra como consecuencia del distanciamiento con su marido, igual que en su momento se apartó injustamente a Doña Elena en la purga a su hermana Doña Cristina. Pero la realidad es que la estrategia está siendo un fracaso. La ciudadanía y los medios de comunicación siguen identificando a todos los familiares de Don Felipe con la Corona. Y, ante esa realidad, prescindir como se está haciendo de los extraordinarios servicios que podría seguir prestando Doña Sofía es un dislate y perjudica a la institución.
Hace algunas semanas, la Casa del Rey informó de las partidas presupuestarias previstas para este 2021. Y, en el apartado de sueldos de la Familia Real, se dio cuenta de la asignación de Doña Sofía, de 114.240 euros, que, como la de su hijo y su nuera, se mantiene congelada respecto al ejercicio anterior. Cuando Zarzuela empezó a comunicar estos extremos, explicó que esas asignaciones engloban tanto el concepto de sueldo bruto en sí como los fondos personales para gastos por las necesidades de representación. Y, sin embargo, como decimos, la Emérita ha dejado de formar parte de la agenda. Su defenestración, viene de lejos. Cómo olvidar cuando en octubre de 2018 se la oyó lamentarse de que con ella “no cuentan para nada”.
En lo que llevamos de año, apenas se ha visto a Doña Sofía en público. Y los actos en los que ha participado no han tenido que ver con la Corona sino únicamente con la fundación que lleva su nombre. Así, ha mantenido reuniones para por ejemplo colaborar con la Plataforma SusPlast, que lucha por combatir la contaminación de los plásticos y lograr una economía circular. Y en febrero presidió la comisión de gobierno denominada Enfermedades neurodegenerativas: Año internacional de la investigación e innovación, una reunión por videoconferencia donde Doña Sofía reafirmó el compromiso de su fundación con el Congreso Internacional sobre estas patologías que se celebrará el próximo año en Salamanca. A la Reina madre no se la vio ni siquiera en verano junto a Don Felipe y su familia en Marivent, como ocurría antes cada año, lo que ya despertó muchas suspicacias. Poco después, en noviembre, se vio envuelta en el escándalo de las tarjetas black de Don Juan Carlos con las que se habrían pagado regalos y viajes a distintos miembros de su familia, como sus nietos Froilán y Victoria Federica. Pero, a pesar de las informaciones iniciales, no se ha conocido ningún gasto de la Emérita con esas tarjetas. Aquel episodio dio pie a algunos círculos para atacarla, a sabiendas de que mantiene una imagen muy valorada entre los ciudadanos. Personas cercanas a Doña Sofía confirmaron a LOC que lo pasó realmente mal aquellos días. Aunque, demostrando que sigue siendo la misma gran profesional de siempre, no dudó en dejarse ver mostrando su mejor cara. Igual que volverá a hacer el día que le dejen... si es que le dejan.
