Incendio en la catedral de Notre Dame de Paris.

soy y vivo en León.
donde hay obras y andamios SIEMPRE.

Alguien con muy malas intenciones, escalera y agilidad, podría subir sin problemas desde el lado norte, donde se une con el claustro. Calle Cardenal Landazuri. Hablo de León.
Voy mucho con mi perrina a horas en las que no hay NADIE.
espero que se incremente la seguridad, ese lado es muy vulnerable a ataques.

Me creo al 99% que ha sido provocado.

ahora Notre Dame se ha quedado como el tejado de León. Por culpa del arquitecto del siglo 13, nunca tuvimos el tejado a dos aguas como el que se quemó.

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La cuestión es que aquí en este país el Islam es muy respetado por cierta ideología. Lo que te dice la forera yo creo que alude a éso, debe ofenderse por ese odio que dice que tienes. Hay gente que entiende que el Islam no es eso etc etc. Yo animo a leer el Corán. Ya veréis que maravilla y qué paz! :LOL: Nosotras valemos por dos hombres, si no obedecemos está permitido pegarnos y encerrarnos. Bueno, y ésto es sólo una parte. Hay que instaurar la verdad absoluta, El Islam, que al contrario de lo que la gente cree ( que significa "paz") en realidad significa "sumisión". La Guerra Santa debe hacerse contra l9s ateos y contra los infieles, es decir, contra las otras dos religiones ppales de libro: Judaísmo y Cristianismo. Sin olvidar que si no eres musulmán jamás entrarás en el Paraíso.
Bonito eh??
Pues no hablemos de terrorismo islámico que hay much@s que se ofenden y si bien entran en cueros a una iglesia, defienden a una mujer velada. Ver para creer. Qué atrevida es la ignorancia. No aprenderemos hasta que volvamos a tener una desgracia. Y si no al tiempo. Ya està el Isis avisando
Un beso amiga
El tema es complicado, prima. Yo no odio a nadie, pero quiero que se respeten mis derechos. El problema que tiene el Islam es que es una religión que hay que acatar tal cual, no se puede cambiar ni una coma. Por eso no ha evolucionado desde la Edad Media, como sí lo hizo el Cristianismo, por ejemplo. Y pone por delante la religión de la ley, porque toda ley ha de basarse en la religión, y eso es un problema. Lo queramos ver o no.
Y tengo amigos musulmanes, como los tengo cristianos, ateos, etc... Hombres y mujeres. Ese no es el problema.
Si todos nos respetáramos , podríamos convivir. Pero no es así. Tú lo has explicado muy bien.
Un beso, prima
 
Solo hay que recordar la segunda guerra mundial para saber que iba a sobrevivir toda la estructura.

La de Colonia NO la bombardearon y destruyeron por órdenes - consejo de los monument men.
Colonia fue destruida en un más de 90% con doce, DOCE iglesias Románicas más bellas, antiguas e históricas que la catedral que es más siglo 19 que original.

Pinches bombas WW2.

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El tema es complicado, prima. Yo no odio a nadie, pero quiero que se respeten mis derechos. El problema que tiene el Islam es que es una religión que hay que acatar tal cual, no se puede cambiar ni una coma. Por eso no ha evolucionado desde la Edad Media, como sí lo hizo el Cristianismo, por ejemplo. Y pone por delante la religión de la ley, porque toda ley ha de basarse en la religión, y eso es un problema. Lo queramos ver o no.
Y tengo amigos musulmanes, como los tengo cristianos, ateos, etc... Hombres y mujeres. Ese no es el problema.
Si todos nos respetáramos , podríamos convivir. Pero no es así. Tú lo has explicado muy bien.
Un beso, prima
Así es. El problema es que es la Verdad Absoluta y así es imposible convivir. No es que ponga por delante la religión a la ley, sino que el mismo Islam es la ley: la Sharia, más moderada o menos dependiendo del país. En cualquier caso, el problema es la radicalización desde hace ya muchos años. Países como Afganistán donde una mujer no puede ni enseñar un tobillo, en los años 40, la mujer votaba y vestía a lo occidental. En Irak, exactamente igual. A la gente hay que enseñarla a pensar y a que no hay una Verdad absoluta.
Volviendo al tema, para mí no ha sido un accidente.
Un beso prima y gracias por la conversación
 
La dejaron incendiarse durante largo tiempo...



Pascuas de Fuego - Antonio Caponnetto

Posted: 16 Apr 2019 06:36 AM PDT





Ayer, Lunes de Pasión, aún de madrugada, me demoré en el Evangelio de San Lucas, XXIII, 31, cuando Jesús, casi al final del Vía Crucis, se encuentra con las mujeres que lloran.
Todo invita a la meditación en este breve pasaje, que no excede el renglón y medio.
El Señor, transido de dolores indecibles, formula la gran pregunta retórica de la Historia: si esto hacen con el leño verde, ¿qué será del seco? Cuya lectura –despojada de la belleza de la metáfora- significa tajantemente, que si tanto debe sufrir el Inocente por rescatar a los hombres de sus máculas, qué no merecerán los que, a sabiendas, desprecian o niegan la obra redentora.
En Juan XV, 6 se nos ofrece otra clave para aprovechar a Lucas: “Si alguno no permanece en Mí, es arrojado fuera como los sarmientos, y se seca; después los recogen y los echan al fuego, y se queman”.
Destino de brasa y de carbón ardiendo para los que se apartan de la Vid.
Y al fin, la Carta a los Hebreos, VI, 7, corona el mensaje, diferenciando la tierra que sabe aprovechar la lluvia fecunda, convocando a pastores y a labriegos leales, de aquella otra estéril y enzarzada, que sólo puede proveer tozas y cardos para una triste combustión.
Esto me sucedió en la madrugada de mi ciudad trinitaria del Lunes de Pasión del 2019.
Al rayar del mediodía llegaron las primeras noticias de la doliente hoguera de Notre Dame. Y me pareció que aquella lectura matutina venía en mi auxilio.
No sé, ni mucho me importa, qué dirán los especialistas, los investigadores y los detectives de cejijuntos semblantes. Sé, en primer lugar, que aquello no fue un incendio. Fue un ritual endemoniado. La dejaron arder durante largas horas, sin abreviar ni atemperar la agonía, para que nuestros corazones católicos se partieran de desconsuelos imborrables.
Festejaron los deicidas, con todo el sucio tropel de sus secuaces. Lleven mandiles, coranes, diosas razones, sinagogas o sanedrines. Lo mismo da. Son el leño seco que tortura al verde, los sarmientos que calcinan la Vid, el tronco yermo que descarga su rencor sobre el Brote Nuevo.
Y sé asimismo, que ese fuego es un castigo que tiene graves e imperdonables culpables en la mismísima intimidad de la Iglesia. Desde el impostor que repta los pisos vaticanos besando talones indignos y beatificando a tenebrosos terroristas, hasta la inmensa muchedumbre de clérigos felones, que han hecho de la contranatura un mester inicuo y de la burda herejía un oficio diario. Desde la jerarquía sin virilidad ni verdad ni decoro ni ciencia, ni Fe teologal, hasta la feligresía democratizada que puede apoyar a la vez a Barrabás o a Judas, según midan en las encuestas.
Al anochecer de ese Lunes de Pasión que estoy mentando –con el suplicio del fuego todavía en marcha- soñé que aparecía un Papa de verdad en los umbrales humeantes de Notre Dame. Y que solo, a paso lento pero firme, con clámide púrpura, tiara regia y anillo petrino, ingresaba decidido entre las llamas a rescatar las reliquias que allí habitan desde hace largos e inmensos siglos. Y que el Señor mismo, al verlo valeroso y fiel, le ponía en sus manos la Corona de Espinas, para que las tuviera en custodia. “Vuelvo pronto”, pareció escuchársele con nitidez al Señor, a pesar del crepitante ruido de las lenguas de fuego.
Tras el sueño, que fue sólo eso: el sueño de un viejo, amanecí hoy, Martes de Pasión, con estos pobres versos dictados por la memoria de la noche:

El leño verde

“Porque si esto hacen con el leño verde, ¿qué será del seco?
Ls. XXXII,31.

Camino al Calvario lo detuvo el llanto
de ojos de mujeres buscando respuestas,
sedienta de sedes, ahogada en quebranto
su boca pregunta fundadas protestas.
Sabe que las ramas resecas se queman,
que al tuero marchito lo consume el fuego,
sarmientos sin vides entre llamas treman
como tiembla el pulso tras un largo ruego.
Y sabe que tierra de espinas y abrojos,
calcinan sus frutos, maldicen sus eras,
mientras Dios bendice lagares. Sus ojos
marcan los solsticios de las primaveras.
Por eso interroga mientras profetiza
a aquellas matronas de luto y de trigo,
si el Justo es tratado como una ceniza
no espere el culpable quedar sin castigo.
No lo espere nadie falsario o perjuro
ni ciudad, aldea, nación o comarca
que hayan desterrado del pilar o el muro
la Cruz que el espacio define y demarca.
La tierra que bebe la lluvia que cae,
es pródiga en surcos como madre fiel,
pero un vaticinio de ruinas recae:
quien niegue la Gracia beberá su hiel.
Es noche en la Iglesia, señorea el mundo,
vuélvenos el trono que a Pedro recuerde.
Danos parresía, Señor, y el rotundo
Amor sin medida por el Leño Verde.


Antonio Caponnetto


Nacionalismo Católico San Juan Bautista
 
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