- Registrado
- 9 Oct 2016
- Mensajes
- 14.454
- Calificaciones
- 97.356
"(...)
Sin embargo, lo que a priori pareció ser un claro caso de violencia contra una mujer, no tardó en despertar dudas al respecto. Los médicos que atendieron a la chica en el centro sanitario pudieron comprobar que no presentaba lesiones no ya de importancia, ni siquiera leves. Al mismo tiempo, cuando los agentes y personal del ámbito judicial pudieron conversar con ella constataron que su relato carecía de coherencia.
Estas y otras circunstancias llevaron a las personas que, en uno u otro grado, han tomado parte en la investigación a descartar la intervención de otro individuo como causante de lo sucedido. De ahí que las primeras indagaciones que se llevaron a cabo dirigidas a dar con el paradero de una persona que había podido tener una relación sentimental con la supuesta víctima quedaron en nada.
Tampoco fueron interpretadas como veraces las iniciales manifestaciones de la propia chica en las que implicó a una persona de origen latinoamericano, de cuya identidad sin embargo no ofreció dato alguno. Ya solo al final, al verse en cierto modo descubierta, admitió que todo había sido ideado y ejecutado por ella.
Para entonces, la Policía sabía hasta en qué establecimiento había adquirido el material que utilizó para amordazarse y embridarse las muñecas y los tobillos.
(...)"
Por lo que se ve clara vez está más claro que lo fingió.
Sin embargo, lo que a priori pareció ser un claro caso de violencia contra una mujer, no tardó en despertar dudas al respecto. Los médicos que atendieron a la chica en el centro sanitario pudieron comprobar que no presentaba lesiones no ya de importancia, ni siquiera leves. Al mismo tiempo, cuando los agentes y personal del ámbito judicial pudieron conversar con ella constataron que su relato carecía de coherencia.
Estas y otras circunstancias llevaron a las personas que, en uno u otro grado, han tomado parte en la investigación a descartar la intervención de otro individuo como causante de lo sucedido. De ahí que las primeras indagaciones que se llevaron a cabo dirigidas a dar con el paradero de una persona que había podido tener una relación sentimental con la supuesta víctima quedaron en nada.
Tampoco fueron interpretadas como veraces las iniciales manifestaciones de la propia chica en las que implicó a una persona de origen latinoamericano, de cuya identidad sin embargo no ofreció dato alguno. Ya solo al final, al verse en cierto modo descubierta, admitió que todo había sido ideado y ejecutado por ella.
Para entonces, la Policía sabía hasta en qué establecimiento había adquirido el material que utilizó para amordazarse y embridarse las muñecas y los tobillos.
(...)"
Por lo que se ve clara vez está más claro que lo fingió.