Aqui ya partimos de una injusticia total: nadie deberia trabajar turnos d 9-10 horas. Ni hombres ni mujeres, pero ya no es un tema de feminismo, sino de trabajoO cualquier mujer que trabaje en una fábrica de enlatados de conservas, por poner otro ejemplo, que no sólo existen las mujeres que trabajan en alta dirección.
Las mujeres que trabajan en la fábrica en muchos casos con turnos de 9 o 10 horas diarias, tampoco ven casi a sus hijos. Los hombres en las mismas circunstancias, igual.
El sistema nos jode a todos por igual, por eso es despreciable hacer esa distinción por sexos pretendiendo favorecer a unas por encima de los otros porque no responde a la situación real, ni es justo ni está justificado.