Enrique Fuentes y Paqui Romero, Huelva: Una semana sin rastro tras salir a cenar
- AutorSuperCotilla
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Pueden haberse movido hacia atrás porque el coche entra de cabeza, por instinto.
Trágico desenlace de la desaparición de Paqui y Enrique: ¿estamos ante un desgraciado accidente?
Si los cuerpos de Enrique Fuentes y Paqui Romero no presentaban signos visibles de violencia alguna cuando fueron rescatados ayer tarde por los equipos de la Policía Nacional y la Guardia Civil qué pudo pasar para que el vehículo apareciera en un lugar tan angosto. No es fácil llegar allí, un lugar repleto de vallas, barreras arquitectónicas, quitamiedos y anclajes junto a la carretera de acceso al Espigón muy cerca de Corrales.
La autopsia que le sea practicada deberá dar algunas claves y las señales que presenten ambos ayudarán a aclarar un desenlace fatal tan extraño como inesperado.
Hay muchos cabos sueltos en las horas que transcurren desde la desaparición de ambos hasta la aparición del vehículo. Desde el 26 de octubre hasta la tarde de ayer sábado 7 de noviembre. Más de 10 días estuvo el vehículo en un lugar muy conocido, transitado por paseantes y ciclistas y muy cerca de una zona en obras ahora mismo, el Puente Sifón.
Allí las corrientes son fuertes pero no hay mucha profundidad. Y la bajamar deja al descubierto prácticamente hasta el fondo, sobre todo las orillas. Solo el hecho de que la semana pasada y el fin de semana pasado hiciera mal tiempo apunta a que el trasiego de personas no fuera tan continuo como era habitual.
De momento no ha trascendido qué pudo suceder, en qué circunstancias estaba el coche, si tenía señales visibles de haber sufrido un accidente, si ambos quedaron encerrados en el interior y no pudieron salir cuando el vehículo se llenaba de agua. O todo fue consecuencia de un fatídico accidente y el coche calló al agua por el pequeño precipicio que separa el agua de los accesos.
Lo que se conoce por fuentes de la misma familia es que Paquí salió a cenar el 26 de octubre con Enrique. Se da por hecho que era un destino cercano y su intención era volver a casa después. Salió con lo puesto y un bolso y parece que no llevaba ni el cargador del móvil. Al parecer el aparato dejó de dar señales en la zona donde finalmente ha aparecido el vehículo.
¿Estamos ante un desgraciado accidente? Todo apunta a ello mientras no aparezcan signos que demuestren lo contrario. Aunque la investigación ha ido mirando con lupa todo el entorno presente y pasado de ambos.
Trágico desenlace de la desaparición de Paqui y Enrique: ¿estamos ante un desgraciado accidente?
¿Estamos ante un desgraciado accidente? Todo apunta a ello mientras no aparezcan signos que demuestren lo contrario. Aunque la investigación ha ido mirando con lupa todo el entorno presente y pasado de ambos.
www.diariodehuelva.esEscribí esto mismo unos post anteriores.
No es tan raro.
En un pueblo cercano pasó esto a otra pareja hace unos años; cayeron a un pantano aunque afortunadamente consiguieron salir
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Perdón por repetir, se me debió haber pasado tu post y no lo lei. Pero es una hipótesis razonable a menos q no estén atados o con signos de violencia
No, no... Para nada; hemos coincidido en una teoría más que posible.
Según he leído, no hay signos de violencia.
Supongo que no trascenderán detalles si hubiera ocurrido así.
'Una trampa mortal': La principal hipótesis de la muerte de Enrique y Paqui
La investigación se encuentra bajo secreto de sumario mientras la policía sigue investigandoEnrique Fuentes, de 73 años, y Paqui Romero, de 60, salieron a cenar con la intención de volver cada uno a su casa el mismo día. Tras once días desaparecidos, fueron hallados sin vida dentro de un coche hundido en las marismas de Huelva. El caso sigue envuelto en el misterio, pero hay una hipótesis principal.
Los cuerpos hallados en El Espigón no tenían signos de violencia, motivo por el cual se descarta la hipótesis de un crimen. Las barreras del puente estaban intactas, y por lo tanto también se descarta la posibilidad de un accidente. La pregunta que surge es cómo llegó el coche de Enrique y Paqui al agua.
Las autoridades se pronuncian
El vehículo fue hallado a cinco metros de profundidad en El Espigón de Huelva, con los dos cuerpos en el asiento trasero. Podrían haber intentado buscar una salida por detrás, o quizás solo trataron de ganar tiempo mientras el coche se hundía. La única realidad es que todos sus intentos por salvarse fueron en vano.La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación del gobierno andaluz apunta a la subida de la marea como hipótesis principal: "Una trampa mortal". Aun así, aclara también que hay varias líneas de investigación y que necesitan tiempo para conocer más datos sobre lo ocurrido. Según ha avanzado, la autopsia podría ser clave en ese sentido.
La autopsia de los cuerpos fue practicada el pasado domingo. El juzgado de instrucción número 5 de Huelva ha decretado el secreto de sumario de las actuaciones, hecho por el cual no ha trascendido más información. La investigación está en manos de la Brigada judicial de la Policía Nacional de Huelva.
Las pistas de este extraño caso
Las familias de Enrique y Paqui tenían claro desde el principio que no se trataba de una desaparición voluntaria. Por eso removieron cielo y tierra para encontrarles lo antes posible. Los peores presagios se confirmaron el pasado sábado por la tarde, cuando un ciclista vio el techo del coche emergiendo del fondo del río.Los efectivos de emergencia rescataron el coche y confirmaron que se trataba del Peugeot 308 gris de Enrique. El hallazgo se produjo en una zona de fuertes corrientes provocadas por la marea, y con nula visibilidad. En la horabaja, suele ser muy transitada por ciclistas y corredores, lo cual permitió el descubrimiento.
El Grupo de Especialistas de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil sacaron el coche del agua y lo pusieron en tierra firme. Las tareas fueron seguidas de cerca por los familiares de los dos desaparecidos. En el asiento de atrás divisaron el cuerpo de dos personas, que tal y como se comprobó, eran los de Enrique y Paqui.
Investigación bajo secreto de sumario
Enrique y Paqui tenían una relación de amistad y solían quedar a menudo para cenar y pasear. Los dos tenían muy buena relación y nadie sospechó nunca que la desaparición había sido voluntaria. No se aprecian señales de lucha ni en el coche ni en los cuerpos, y todo apunta a un lamentable infortunio.
Los dos conocidos desaparecieron el 26 de octubre. Cuando sus familiares les llamaron al ver que no volvían, sus teléfonos ya estaban desconectados. Ahora, sus teléfonos están en manos de la policía, para ver si pueden rastrear el camino que siguieron antes de fallecer.
Los cadáveres fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Huelva, y el coche fue analizado por la Policía Científica. La autopsia permitirá conocer la causa de la muerte y la fecha aproximada. Los informes de posibles rodadas de la calzada y del interior y el exterior del vehículo ayudarán a entender qué sucedió.
'Una trampa mortal': La principal hipótesis de la muerte de Enrique y Paqui
Enrique Fuentes, de 73 años, y Paqui Romero, de 60, salieron a cenar con la intención de volver cada uno a su casa el mismo día. Tras once días desaparecidos, fueron hallados...
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No creo que haya edad límite para intimar
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Lo que les ha pasado a ésta pareja, ya les ha pasado a otras muchas, aunque no suelen terminar en muerte.
Resulta que muy románticamente, les gusta aparcar en las orillas de los ríos, o incluso en la arena del mar, para darse cariño durante un rato. Mientras están entretenidos y con la música puesta en el coche, pueden pasar varias cosas, entre ellas que se les suelte el freno de mano y caigan al agua de repente sin tiempo de abrir las puertas. También puede ocurrir que terminen de darse cariño y se queden dormidos en el asiento de atrás porque hayan bebido vino en la cena y tal, la marea suba poco a poco y se llene el coche de agua.
No es nada tan extraño, pero es una pena terminar así... DEP
Resulta que muy románticamente, les gusta aparcar en las orillas de los ríos, o incluso en la arena del mar, para darse cariño durante un rato. Mientras están entretenidos y con la música puesta en el coche, pueden pasar varias cosas, entre ellas que se les suelte el freno de mano y caigan al agua de repente sin tiempo de abrir las puertas. También puede ocurrir que terminen de darse cariño y se queden dormidos en el asiento de atrás porque hayan bebido vino en la cena y tal, la marea suba poco a poco y se llene el coche de agua.
No es nada tan extraño, pero es una pena terminar así... DEP
