Los votantes recibirán en sus tarjetas censales distintas franjas horarias para ir a las urnas
El Gobierno Vasco estudia cambios en la logística de los comicios para garantizar la seguridad sanitaria
ALBERTO SURIOSAN SEBASTIÁN.Domingo, 10 mayo 2020, 08:00
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Serán, sin duda, las elecciones más atípicas y más extrañas de la historia contemporánea, después de su suspensión el pasado 5 de abril y su aplazamiento sine die por la epidemia del coronavirus. El fantasma de la abstención planea de forma inquietante. Los partidos vascos reconocen la necesidad de garantizar la seguridad sanitaria y de combatir el miedo a acudir a las urnas e introducir los cambios logísticos para ello.
El lehendakari Iñigo Urkullu –que es al que le corresponde la convocatoria «oídos los partidos»– ha pedido «el máximo consenso» para poder celebrar los comicios «en condiciones sanitarias y democráticas». La fecha más previsible es la del 12 de julio, ya que más adelante se considera que es demasiado tarde, ya en plenas vacaciones de verano, y el otoño, en su opinión, plantea un peligro de rebrote de la enfermedad. Y antes no es factible, si se tiene en cuenta el plazo de 54 días que debe transcurrir entre el decreto y la cita con las urnas. Pero la decisión final dependerá de la evolución de la pandemia y de los ritmos de la desescalada. De entrada, tiene que levantarse la declaración de emergencia sanitaria aprobada por el Gobierno Vasco.
El pasado viernes, en la Diputación Permanente del Parlamento Vasco, Urkullu enmarcó la luz verde a las elecciones en «un ejercicio de responsabilidad» y de «regreso a la normalidad» y reclamó un plan de seguridad y prevención que garantice la viabilidad de la jornada electoral. Para ello, el Gobierno Vasco, en colaboración con la Junta Electoral, tendrá que poner a punto una compleja intendencia logística en los colegios electorales. Se deberán guardar las distancias físicas exigidas para evitar los contagios entre los miembros de las mesas electorales y entre los votantes, se utilizarán mascarillas, gel y guantes y se procederá a la desinfección de las instalaciones de forma frecuente. Aún se desconoce si se podrán utilizar las habituales cabinas de voto.
El Gobierno Vasco estudia, de hecho, una propuesta de trabajo para que el desarrollo de la votación se pueda llevar a cabo en diferentes franjas horarias en función de la edad. No se trataría de los actuales tramos, que se corresponden a una medida de alivio de un confinamiento general. En esencia se buscaría separar los horarios de votación de los electores en función de su edad para evitar una excesiva afluencia de votantes en las horas punta, la formación de colas ante las mesas electorales y la posibilidad de que una mayor aglomeración de personas se convierta en un añadido factor de riesgo para la propagación del virus, en especial entre los electores que forman parte de los colectivos más vulnerables.
La eventual medida requiere lógicamente un plan previo de comunicación a los electores. La información aparecería en la tarjeta censal que la Oficina de Censo Electoral envía a todas las personas con derecho a voto, un procedimiento habitual previo a los comicios en el que los ciudadanos reciben información sobre el colegio y la mesa electorales que les pertenecen. En esa comunicación figuraría la franja horaria en la que cada uno puede ejercitar su derecho al voto.
Campaña trastocada
Si la organización de la jornada será muy diferente también lo será la campaña electoral, que se verá condicionada por la fase de desescalada, en la que no podrán autorizarse determinados eventos públicos que superen ciertos aforos y que exigirá el cumplimiento estricto de medidas de higiene y de distancia física.
Al igual que la campaña en el País Vasco se verá trastocada por la coyuntura, el guion electoral ha girado por completo. En la agenda de los partidos figurarán la gestión de la crisis sanitaria, el papel de la Sanidad vasca, las medidas contra los efectos económicos de la pandemia, el debate sobre el Mando Único durante el estado de alarma y la relación entre el Gobierno Vasco y el Ejecutivo de Pedro Sánchez a la hora de explorar una «cogobernanza». Un temario impensable hace solo unos meses.
Osea, que encima de tener que votar en tiempos de pandemia me dicen cuando tengo que votar, es decir, a que hora.
¿Me van a decir también a quien votar?
Reímos o lloramos.
El Gobierno Vasco estudia cambios en la logística de los comicios para garantizar la seguridad sanitaria
ALBERTO SURIOSAN SEBASTIÁN.Domingo, 10 mayo 2020, 08:00
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Serán, sin duda, las elecciones más atípicas y más extrañas de la historia contemporánea, después de su suspensión el pasado 5 de abril y su aplazamiento sine die por la epidemia del coronavirus. El fantasma de la abstención planea de forma inquietante. Los partidos vascos reconocen la necesidad de garantizar la seguridad sanitaria y de combatir el miedo a acudir a las urnas e introducir los cambios logísticos para ello.
El lehendakari Iñigo Urkullu –que es al que le corresponde la convocatoria «oídos los partidos»– ha pedido «el máximo consenso» para poder celebrar los comicios «en condiciones sanitarias y democráticas». La fecha más previsible es la del 12 de julio, ya que más adelante se considera que es demasiado tarde, ya en plenas vacaciones de verano, y el otoño, en su opinión, plantea un peligro de rebrote de la enfermedad. Y antes no es factible, si se tiene en cuenta el plazo de 54 días que debe transcurrir entre el decreto y la cita con las urnas. Pero la decisión final dependerá de la evolución de la pandemia y de los ritmos de la desescalada. De entrada, tiene que levantarse la declaración de emergencia sanitaria aprobada por el Gobierno Vasco.
El pasado viernes, en la Diputación Permanente del Parlamento Vasco, Urkullu enmarcó la luz verde a las elecciones en «un ejercicio de responsabilidad» y de «regreso a la normalidad» y reclamó un plan de seguridad y prevención que garantice la viabilidad de la jornada electoral. Para ello, el Gobierno Vasco, en colaboración con la Junta Electoral, tendrá que poner a punto una compleja intendencia logística en los colegios electorales. Se deberán guardar las distancias físicas exigidas para evitar los contagios entre los miembros de las mesas electorales y entre los votantes, se utilizarán mascarillas, gel y guantes y se procederá a la desinfección de las instalaciones de forma frecuente. Aún se desconoce si se podrán utilizar las habituales cabinas de voto.
El Gobierno Vasco estudia, de hecho, una propuesta de trabajo para que el desarrollo de la votación se pueda llevar a cabo en diferentes franjas horarias en función de la edad. No se trataría de los actuales tramos, que se corresponden a una medida de alivio de un confinamiento general. En esencia se buscaría separar los horarios de votación de los electores en función de su edad para evitar una excesiva afluencia de votantes en las horas punta, la formación de colas ante las mesas electorales y la posibilidad de que una mayor aglomeración de personas se convierta en un añadido factor de riesgo para la propagación del virus, en especial entre los electores que forman parte de los colectivos más vulnerables.
La eventual medida requiere lógicamente un plan previo de comunicación a los electores. La información aparecería en la tarjeta censal que la Oficina de Censo Electoral envía a todas las personas con derecho a voto, un procedimiento habitual previo a los comicios en el que los ciudadanos reciben información sobre el colegio y la mesa electorales que les pertenecen. En esa comunicación figuraría la franja horaria en la que cada uno puede ejercitar su derecho al voto.
Campaña trastocada
Si la organización de la jornada será muy diferente también lo será la campaña electoral, que se verá condicionada por la fase de desescalada, en la que no podrán autorizarse determinados eventos públicos que superen ciertos aforos y que exigirá el cumplimiento estricto de medidas de higiene y de distancia física.
Al igual que la campaña en el País Vasco se verá trastocada por la coyuntura, el guion electoral ha girado por completo. En la agenda de los partidos figurarán la gestión de la crisis sanitaria, el papel de la Sanidad vasca, las medidas contra los efectos económicos de la pandemia, el debate sobre el Mando Único durante el estado de alarma y la relación entre el Gobierno Vasco y el Ejecutivo de Pedro Sánchez a la hora de explorar una «cogobernanza». Un temario impensable hace solo unos meses.
Los votantes recibirán en sus tarjetas censales distintas franjas horarias para ir a las urnas | El Diario Vasco
El Gobierno Vasco estudia cambios en la logística de los comicios para garantizar la seguridad sanitaria
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Osea, que encima de tener que votar en tiempos de pandemia me dicen cuando tengo que votar, es decir, a que hora.
¿Me van a decir también a quien votar?
Reímos o lloramos.