Para mí la monarquía hoy no tiene sentido, independientemente, más aún cuando ni siquiera pueden mantener las apariencias.Francamente no sé a que carta quieres quedarte, señalas dos opciones.
La popularidad de JFK fue más de revisteo por su mujer, de acuerdo, pero el susodicho ha dejado una carrera en la historia de los EE.UU. que no es para dudar de sus valía como presidente. De todos modos nada que ver un presidente y su labor con la labor puramente representativa de un rey.
Si a éste le afecta cualquier viento en contra de la imagen no encuentro absolutamente ninguna razón que le haga mantenerse donde está. La endeblez está en primera plana.
Sin embargo, digo que el conyuge de un presidente tambien puede ser un factor importante en el éxito politico o fracaso, pero en este caso no es reelegido, y el asunto está cerrado.