Se equivocan, porque lo único que consiguen es que envidiemos a las demás casas reales, y conozcamos más a sus niños. A mi las nenas Borbón ya me empiezan a caer petardas. Y es culpa de su madre.
El problema no es la nena. Es la madre. Ilustro:
1.- Princesa con pasado un poco de putón verbenero, hijo prenupcial y adicciones varias porque la noche la confundía. Peeero, mamá cariñosa. Cada vez que nota a su nena tensa o alerta baja a su nivel y un cariñito. Ole por Mettemarí.
2.- Maxi. Reina Magna. Mamá super. Mola aún en sus excesos.
3.- La chica danesa. Trepa como ella sola (bueno, ella y Lety) pero ojo! Se sabe vestir, se sabe comportar, y actúa como una mamá consecuente. Otro 10 pa ella.
4.- Matilde. Ella si que sabe a que coxx huelen de verdad las nubes. Tiene pinta de dulce y con disciplina militarizada. Todo a la vez. Y también mola.
Aquí con su Leonor, que es bastante distinta de la nuestra...
5.- La Lety. Pos eso....
A mí los belgas me parecen muy finos, los holandeses quizá un poco exagerado todo, los vestidos de las niñas se las traen, como actitud perfectas. Los nuestros.....ay madre, siento decirlo porque es mi país y me duele, pero son efectivamente como de andar por casa. Cero glamour, poca elegancia, ninguna emoción con este acto tan trascendental que estaban viviendo....me da pena, que proyectemos esa imagen frente al mundo. Es una opinión claro está.Sigo con las odiosas comparaciones.
El día de las coronaciones de sus respectivos papás.
Catalina Amalia. Una pro. Encabeza la comitiva, porque ya pasa por encima de su abuela protocolariamente hablando, y ya saluda como debe. Y debe ser un temita vamos, ir tu con once añitos llevando el Cristo en la procesión.
Los belgas, mucho más de andar por casa. Aún así, los nenes en primera fila.
Los nuestros. Más que de andar por casa, de andar con esa camiseta larga ya pasada que te pones para limpiar a fondo la cocina el día que le echas valor y sacas la vaporeta.
