No estoy se acuerdo con que haya siempre un punto de venganza.Creo que la ley no se atreve a bajar más la mano con el tema porque este país está lleno de salvajes con escopeta de caza.
Si te cargas a alguien que ha entrado a robar a tu casa, y muere con 22 heridas, sí, se entiende que te has pasado de frenada. Si lanzas cuchilladas a diestro y siniestro contra alguien mientras huyes, no le haces tantas heridas, igual a la primera o segunda ya le ha servido de advertencia.
En estos casos de ancianos que "defienden su casa", hay siempre un punto de cegarse, de vengarse, de castigar, más que de salvar el propio pellejo. El librero pudo haber disparado al aire, o haberle disparado a los pies, pero eligió tirar al bulto, al centro, al pecho, y luego lo remató.
El señor del cuchillo de caza no buscó una silla para estamparla contra el ladrón o para mantenerlo a distancia, ni se encerró en su habitación para evitar el peligro, y no es que lo primero que pilló como tu dices fuera el cuchillo de caza, sino que lo guardaba en el cajón de la mesilla por si un día se le presentaba una ocasión como aquella, y fue a buscarlo a propósito. Y si el otro murió desangrado, es que no fueron tres rasguños al azar lo que se llevó.
Aún así, si te fijas, dos años y medio de cárcel por quitarle la vida a alguien (que no entró a tu casa a matarte, sino a robar) que te agrede, es un regalo. El asesinato está en 20 años de prisión, si comparas, te das cuenta que la intención de la ley es disuadir a la gente de matar alegremente a los ladrones, pero a la vez, no imponen penas desproporcionadas a quien "se defiende demasiado". Y si comparas con la pena impuesta al ladrón, que ha sido la pena de muerte, pues todavía te sale mejor.
A mí si salvar la vida me cuesta ir dos años y medio a la cárcel, me sigue mereciendo la pena.
Lo que pienso que hay es mucho miedo, se saben vulnerables, y saben que aún hiriendo al asaltante puede matarles. Y mucha indignación, rabia si quieres, precisamente por saberse vulnerables. Y les entiendo perfectamente.
El señor de las cuchilladas al aire me da mucha pena, no debería haberle caído ninguna condena.
El otro es más cuestionable, condenable desde el punto de vista legal.
Pero me imagino a uno de mis abuelos ya fallecidos siendo asaltado y que le den al ladrón, si lo mata pues ajo y agua. El muerto no me da ninguna pena!