Plácido Domingo. Acusado por 9 mujeres.

Pues simplemente que en un foro de internet, de opinión, cada cual opina y postea lo que cree o tiene a bien. Y entrando más en materia, a mi me da igual lo que pueda opinar o no la mayoría sobre un tema concreto, tengo mi propio criterio, que puede o no ser erróneo ( nadie está en el conocimiento de la verdad absoluta), pero es mi opinión y mi criterio. Y en casos tan controvertidos y mediáticos como este procuro no acusar a nadie si no lo ha hecho previamente un juzgado.
Excelente.

Cuanto más te leo más confusa estoy.
 
The accusations go back years – so why has the opera world rallied round Plácido Domingo?
Martin Kettle


Opera houses might have turned a blind eye to sexually predatory behaviour in the past, but no-one should be above the law

@martinkettle
Thu 15 Aug 2019 08.11 EDTLast modified on Thu 15 Aug 2019 08.13 EDT

A banner showing Los Angeles Opera’s general director, Plácido Domingo, at the LA Opera, 13 August 2019. Photograph: Frederic J Brown/AFP/Getty Images
Nearly 30 years ago, a famous soprano told me privately that Plácido Domingo was “a bit of a groper”. She herself had been the object of the tenor’s unwanted sexual attentions during a car journey, she told me. Unwanted but not, it seems, unwonted. In the world of opera, she added, Domingo’s habit was well-known and not unique.

The soprano was a woman who could take care of herself. She told me about Domingo almost in passing and certainly not for quotation or because she thought the story should become public. It was private information. I have never written anything about it until now. But times have changed, and rightly so. Whether the opera world has changed with it is another question.

This week, the Associated Press reported that eight singers and a dancer have said that Domingo sexually harassed them in various incidents since the 1980s. Some of the incidents took place while the women were working in opera houses where the singer was in management positions. That means in either Washington DC or Los Angeles or both, since Domingo, now aged 78, had long management associations with each, a continuing one in the case of the Los Angeles Opera.

Thanks to the impact of the #MeToo movement and the fall of powerful and serial sexual predators such as the film producer Harvey Weinstein, allegations of this kind, like the ones I heard all those years ago, are no longer kept private. In Domingo’s case, this meant that some US opera houses and concert halls have been quick to terminate planned events in which Domingo was scheduled to perform. The Philadelphia Orchestra and San Francisco Opera are among the venues that have rescinded their plans. LA Opera has promised an independent investigation of the allegations.

Others, though, have been more cautious. Domingo is still scheduled to sing at the Metropolitan Opera in New York in September and October, before returning again in November. The Met has said it will await the LA Opera review before deciding whether to continue with the engagements. In Europe, the Salzburg festival, where Domingo is due to perform on 25 August, has had no such scruples. Domingo will perform as scheduled, it has announced.

In the UK, Domingo has had a long association with the Royal Opera House, Covent Garden. His next performances there are not due until June 2020,when he will be seven months shy of his 80th birthday. Even so, Covent Garden is now in the spotlight, too. So are several other European opera houses where he is due to appear over the next 12 months, including Zurich, Vienna, La Scala Milan, Madrid, Hamburg, Munich and Berlin. All of them need to recognise that these allegations have put them on the spot and that they need to put the rights of their employees not be harassed ahead of their loyalty towards a once great artist who is not above the law.

You might think that every one of the houses where Domingo is currently scheduled to perform would at least put their commitments on hold, pending the LA inquiry. Not so. Most seem to be keeping quiet in the hope the storm will blow away. The Salzburg response suggests that they remain reluctant to treat the issue properly for fear of damaging the goose that still lays their golden eggs. “I have known Plácido Domingo for more than 25 years,” the festival’s president, Helga Rabl-Stadler, said in a statement. “In addition to his artistic competence, I was impressed from the very beginning by his appreciative treatment of all festival employees … Had the accusations against him been voiced inside the Festspielhaus in Salzburg, I am sure I would have heard of it … Artistic Director Markus Hinterhäuser, Executive Director Lukas Crepaz and I all agree that Plácido Domingo should perform as planned.”


Domingo in Simon Boccanegra at London’s Royal Opera House in 2010. Photograph: Tristram Kenton/the Guardian
The opera houses are cautious, perhaps culpably and irresponsibly so in some cases, because, in the end, they are caught in a trap that is largely of their own making. Opera houses, especially the biggest ones, rely on stars. Few stars are more lustrous than Domingo. He is the most famous singer in the world. Audiences love him. Opera houses charge top prices for his performances. Sponsors, on whom most opera houses depend, love nothing more than a Domingo evening.

The consequence has been that he has been indulged on purely artistic grounds to a degree that few other performers would ever seek – let alone be encouraged – to emulate. He was once, and for a glorious period, the most outstanding operatic artist of his era. His performances of Verdi’s Otello at Covent Garden in 1980, 1987 and 1990, each time under the baton of Carlos Kleiber, remain the supreme experiences of my own opera-going life. But, at his age, the voice, the artistry and certainly the stage presence are shadows of what they once were. For the past decade, Domingo has toured the world singing baritone roles rather than the tenor roles that he made his own for so long. Yet he is not a true baritone. He should have retired long ago. He is, however, Plácido Domingo, and for many, that has always been enough. But surely not any longer.
 
Es que lo encuentro importante, no es lo mismo una serie de denuncias hechas escalonadamente, transcurso de tiempo, que las hechas en tiempo similar y reducido.

Tambien sería pero que muy interesante que relación tiene todo ésto con la iglesia de la Cienciología, a juzgar por lo que leí hace un momento.

Todos estos extremos los abarcan lo que se llama investigaciones rigurosas.
Lo que yo imagino, basándome en la explicaciones que dio Ronan Farrow sobre su investigación sobre Weinstein, es que le llega la sospecha sobre alguien. Empieza a preguntar a gente del sector, a ver quién sabe qué, y a partir de ahí, testigos empiezan a sugerir nombres de mujeres que ellos han sido testigos de que han sido acosadas. El periodista se pone en contacto con ellas, unas quieren hablar, otras no. La mayoría no tienen ni por qué conocerse entre ellas (en este caso unas viven en Washington y otras en LA) o, si se conocen, no tienen por qué saber lo que les ha pasado a sus compañeras. Y a partir de ahí van recopilando los testimonios.

En cuanto a lo de la Cienciología, yo sinceramente, no creo que pinte nada en este caso en concreto. Los de la Cienciología pueden ser muy cabrones, es cierto, pero sus métodos no son exactamente como estos ni tampoco tendría ninguna razón de ser que se metieran con Plácido Domingo.

Yo creo que la motivación del reportero (en este caso, reportera) es el reconocimiento profesional. Si te acaban dando un Pulitzer por tu investigación, es un logro de la leche.
 
https://elpais.com/sociedad/2019/08/15/actualidad/1565866138_023234.html?ssm=TW_CM

Tremendo todo. Hay que convertir el dolor en espectáculo.

Me bajo de este tren.

Hay una denuncia contra Plácido Domingo, pues lo mejor es dejar que la justicia siga su camino y aclare. No hay mucho más.

Pero no, ahora es mejor contarlo en un periódico que hará mucha "hinbestigación".
En España el movimiento #MeToo no ha despegado todavía. Y ya va siendo hora.

Si es El País quien se quiere hacer cargo, bienvenido sea. Pero me da que lo van a tener jodidillo.
 
A ver, el acoso laboral hay que denunciarlo siempre, por qué? porque no se trata de un hecho puntual de un baboso que te ha dicho una babosada cuándo te cruzabas con él por la calle, si no de alguien a quien te tienes "que tragar" día sí y día también en tu vida cotidiana. Un protocolo o una ley no va a servir para nada si cuando procede no se da un paso adelante...
correcto y no solo hay que denunciarlo por tu caso en particular si no para que se tome conciencia y otro acosador sepa lo que le puede pasar
 
Los protocolos no serían solo para empresas, hay un montón de organismos del Estado en los que existe mucha relación hombre-mujer y aunque aquí no es lo mismo que el mundo empresarial, puede haber otro tipo de prebendas o ascensos muy sui generis.
Eso es cierto. Hace poco me enteré, por una casualidad rara de la vida, de que en la Policía Nacional no tienen un protocolo de estos. Que hay una inspectora, o comisaria, o no sé muy bien quién, que anda intentando dar la lata con este tema porque sí que parece que hay mucha policía mujer de baja psicológica en determinadas comisarías en concreto y es todo como muy sospechoso.
 
Última edición:
Lo que yo imagino, basándome en la explicaciones que dio Ronan Farrow sobre su investigación sobre Weinstein, es que le llega la sospecha sobre alguien. Empieza a preguntar a gente del sector, a ver quién sabe qué, y a partir de ahí, testigos empiezan a sugerir nombres de mujeres que ellos han sido testigos de que han sido acosadas. El periodista se pone en contacto con ellas, unas quieren hablar, otras no. La mayoría no tienen ni por qué conocerse entre ellas (en este caso unas viven en Washington y otras en LA) o, si se conocen, no tienen por qué saber lo que les ha pasado a sus compañeras. Y a partir de ahí van recopilando los testimonios.

En cuanto a lo de la Cienciología, yo sinceramente, no creo que pinte nada en este caso en concreto. Los de la Cienciología pueden ser muy cabrones, es cierto, pero sus métodos no son exactamente como estos ni tampoco tendría ninguna razón de ser que se metieran con Plácido Domingo.

Yo creo que la motivación del reportero (en este caso, reportera) es el reconocimiento profesional. Si te acaban dando un Pulitzer por tu investigación, es un logro de la leche.

Y lo de sacar la verdad caiga quien caiga no es el objetivo?
Porque yo soy periodista (hay muchos tipos de periodismo y el mío no es de investigación) pero si trabajara este tema me interesaría más que se sepa la verdad que los premios. Porque ser periodista es vocacional, nadie se mete para forrarse porque no te forras, y algo de idealización se te queda
Habéis visto spotlight? O todos los hombres del presidente? O The post? Pues eso
Tirar de la manta y saber que puedes dar un vuelco a la historia, no es comparable ni a todos los premios del mundo. Te lo dice alguien que estudió periodismo por vocación, y que no conoce a ningún periodista que haya hecho la carrera de rebote, más que nada porque en mi época la nota era alta para ser de letras, y como digo, no la estudias para forrarte. Es muy muy vocacional
También os digo que si consigues trabajar de periodista en el sector que te gusta, como es mi caso, es el mejor trabajo del mundo. Aunque te paguen poco. Y si no, se lo dices a los reporteros de guerra que pueden perder y pierden de hecho su vida por un trabajo mal pagado. Solo para sacar la verdad. Es vocación.
Que luego te tengas que replegar a los intereses de tu medio, ese es otro tema, pero aunque a muchos les encanta poner verde a los periodistas, los hay que sacan la verdad caiga quien caiga. Y así es como los que les ponen verdes, se enteran de las cosas.
 
Eso es cierto. Hace poco me enteré, por una casualidad rara de la vida, de que en la Policía Nacional no tienen un protocolo de estos. Que hay una inspectora, o comisaria, o no sé muy bien quién, que anda intentando dar la lata con este tema porque sí que parece que hay mucha policía mujer de baja psicológica en determinadas comisarías en concreto y es todo como muy sospechoso.
En las policías se han dado muchos casos, y en el ejército también, con resultados dispares cuando han sido juzgados...
 
Eso es cierto. Hace poco me enteré, por una casualidad rara de la vida, de que en la Policía Nacional no tienen un protocolo de estos. Que hay una inspectora, o comisaria, o no sé muy bien quién, que anda intentando dar la lata con este tema porque sí que parece que hay mucha policía mujer de baja psicológica en determinadas comisarías en concreto y es todo como muy sospechoso.

Quizás no tenga nada que ver con situaciones de acoso o similares, y sí con la presión que se puede tener en el propio ejercicio laboral, un trato continuado y persistente con delincuentes, y muchos no precisamente robagallinas...
 
Y lo de sacar la verdad caiga quien caiga no es el objetivo?
Porque yo soy periodista (hay muchos tipos de periodismo y el mío no es de investigación) pero si trabajara este tema me interesaría más que se sepa la verdad que los premios. Porque ser periodista es vocacional, nadie se mete para forrarse porque no te forras, y algo de idealización se te queda
Habéis visto spotlight? O todos los hombres del presidente? O The post? Pues eso
Tirar de la manta y saber que puedes dar un vuelco a la historia, no es comparable ni a todos los premios del mundo. Te lo dice alguien que estudió periodismo por vocación, y que no conoce a ningún periodista que haya hecho la carrera de rebote, más que nada porque en mi época la nota era alta para ser de letras, y como digo, no la estudias para forrarte. Es muy muy vocacional
También os digo que si consigues trabajar de periodista en el sector que te gusta, como es mi caso, es el mejor trabajo del mundo. Aunque te paguen poco. Y si no, se lo dices a los reporteros de guerra que pueden perder y pierden de hecho su vida por un trabajo mal pagado. Solo para sacar la verdad. Es vocación.
Que luego te tengas que replegar a los intereses de tu medio, ese es otro tema, pero aunque a muchos les encanta poner verde a los periodistas, los hay que sacan la verdad caiga quien caiga. Y así es como los que les ponen verdes, se enteran de las cosas.
Pues me alegro de leer esto que escribes, porque sí que es verdad que la vocación de servicio público con frecuencia es difícil de encontrar.

A mí me hubiera gustado creer que esta sería la motivación principal, pero me costaba, la verdad, y más sabiendo lo competitivos que son los americanos. Pero tu post me reconcilia un poco con el ser humano. :)
 

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