Aquí hay quienes se olvidan de los millones de espectadores que tienen los programas de salseo y de cotilleo, y de que el "periodismo tradicional" hace muchos años que sufre una gran crisis económica, hasta el punto de necesitar subvenciones para subsistir. La inmensa mayoría de medios digitales salen adelante con sus suscriptores y anunciantes y su línea editorial se debe precisamente a ellos.