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REYES DE ESPAÑA
08/01/2022
REAPARICIÓN
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La pieza en cuestión, una de las llamadas joyas de pasar de la monarquía española, era el famoso broche con perla grande gris pálido rodeada de brillantes del cual cuelga una perla en forma de pera que en su día perteneció a la Infanta Isabel, la Chata –la primogénita de la reina Isabel II– y que Doña Sofía ha lucido en innumerables ocasiones.
Más allá de la anécdota, era grande la expectación por la reaparición de los Reyes. Porque se trataba de la primera aparición de Don Felipe y Doña Letizia tras unas vacaciones que se han prolongado durante 15 días. Los Monarcas nunca tienen actividad institucional entre Nochebuena y el Día de Reyes, y en ese sentido este año no ha sido ninguna excepción. Sin embargo, ha provocado decepción el hecho de que la Familia Real no se haya dejado ver en ningún lugar en todo el periodo navideño ya que no ha habido una sola instantánea de la presencia de la Princesa de Asturias en España, a pesar de que ha pasado en nuestro país más de tres semanas.
Estamos ante una nueva oportunidad perdida para ganar presencia en la esfera pública más allá de los actos institucionales –es una de las grandes asignaturas pendientes de nuestra dinastía, tal como en repetidas ocasiones han subrayado a LOC distintos expertos en la Monarquía consultados– y para acercarse a la ciudadanía. Pero resulta evidente que en Zarzuela no están dispuestos a moverse un ápice de su estrategia, por muchas críticas que les acarree.
Cómo no recordar aquellas palabras de Don Felipe –“ya os cansaréis de verla”– con las que hace años expresaba a los periodistas que llegaría el momento de que la Princesa Leonor tuviera una presencia continuada en la vida pública. Pero lo cierto es que, pese a que ya ha cumplido 15 años y ha protagonizado incluso su primer acto institucional en solitario, sus padres siguen exactamente igual de obsesionados por seguir apartándola del foco. Y con ello están corriendo un serio peligro, el de que la sociedad no termine de empatizar con quien está llamada a ser la futura reina, dado que va creciendo sin que los españoles la tengan mínimamente presente en el imaginario colectivo. Nada que ver con lo que ocurre en todas las monarquías de nuestro entorno.
Las comparaciones siempre son tan odiosas como inevitables. Leonor tiene como compañera de estudios en el UWC Atlantic de Gales (Reino Unido), donde el pasado septiembre empezó el Bachillerato, a la princesa Alexia, la segunda de las tres hijas de los reyes Guillermo y Máxima de los Países Bajos. Pues bien, en cuanto comenzaron las vacaciones navideñas el 10 de diciembre, la holandesa se desplazó hasta su país para reunirse con los suyos. Y los Orange no tardaron en difundir una fotografía para mostrar el reencuentro familiar.
Aquí, en cambio, nada se ha sabido de Leonor, como si no fuera importante que los españoles se vayan familiarizando con ella. Lo único que se sabe es que voló desde el Reino Unido hasta Madrid el martes 14 de diciembre, pues en el diario La Razón se publicó que un pasajero había coincidido con ella en un avión desde Londres. Y se dio por hecho que este jueves se iba a perder la tradición de acudir con sus padres y su hermana, la Infanta Sofía, a merendar el roscón de Reyes a casa de su abuelo materno, Jesús Ortiz (cita que al parecer finalmente no habría tenido lugar), porque las clases en el citado UWC Atlantic se reanudaban un día antes, el 5 de enero. Pero no hay información oficial ninguna al respecto, manteniéndose una política informativa en Palacio más que cuestionable.
¿AÑO NUEVO FUERA DE MADRID?
Y la opacidad inevitablemente alimenta toda clase de especulaciones. En este caso, desde el programa de Telecinco Ya es mediodía –que habitualmente conduce Sonsoles Ónega, una de las grandes amigas de la Reina Letizia– se informaba el pasado miércoles de que los Monarcas y sus dos hijas habrían pasado el final de año fuera de Madrid. De ser así, Don Felipe al menos no podría haber abandonado la ciudad hasta pasado el 28 de diciembre, puesto que ese día firmó en la capital de España numerosos reales decretos, incluidos los de la concesión de la gran cruz de la orden de Carlos III a varios ministros.
Es sabido que la Familia Real tiene por costumbre realizar uno de sus viajes reservados cada Nochevieja, muchas veces a destinos de esquí. Otra cosa es que con la pandemia disparada esta vez se tratara de la mejor opción.
REYES DE ESPAÑA
08/01/2022
REAPARICIÓN
TRAS OTRA NAVIDAD EN LA QUE HAN SIDO INVISIBLES
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La pieza en cuestión, una de las llamadas joyas de pasar de la monarquía española, era el famoso broche con perla grande gris pálido rodeada de brillantes del cual cuelga una perla en forma de pera que en su día perteneció a la Infanta Isabel, la Chata –la primogénita de la reina Isabel II– y que Doña Sofía ha lucido en innumerables ocasiones.
Más allá de la anécdota, era grande la expectación por la reaparición de los Reyes. Porque se trataba de la primera aparición de Don Felipe y Doña Letizia tras unas vacaciones que se han prolongado durante 15 días. Los Monarcas nunca tienen actividad institucional entre Nochebuena y el Día de Reyes, y en ese sentido este año no ha sido ninguna excepción. Sin embargo, ha provocado decepción el hecho de que la Familia Real no se haya dejado ver en ningún lugar en todo el periodo navideño ya que no ha habido una sola instantánea de la presencia de la Princesa de Asturias en España, a pesar de que ha pasado en nuestro país más de tres semanas.
Estamos ante una nueva oportunidad perdida para ganar presencia en la esfera pública más allá de los actos institucionales –es una de las grandes asignaturas pendientes de nuestra dinastía, tal como en repetidas ocasiones han subrayado a LOC distintos expertos en la Monarquía consultados– y para acercarse a la ciudadanía. Pero resulta evidente que en Zarzuela no están dispuestos a moverse un ápice de su estrategia, por muchas críticas que les acarree.
Cómo no recordar aquellas palabras de Don Felipe –“ya os cansaréis de verla”– con las que hace años expresaba a los periodistas que llegaría el momento de que la Princesa Leonor tuviera una presencia continuada en la vida pública. Pero lo cierto es que, pese a que ya ha cumplido 15 años y ha protagonizado incluso su primer acto institucional en solitario, sus padres siguen exactamente igual de obsesionados por seguir apartándola del foco. Y con ello están corriendo un serio peligro, el de que la sociedad no termine de empatizar con quien está llamada a ser la futura reina, dado que va creciendo sin que los españoles la tengan mínimamente presente en el imaginario colectivo. Nada que ver con lo que ocurre en todas las monarquías de nuestro entorno.
Las comparaciones siempre son tan odiosas como inevitables. Leonor tiene como compañera de estudios en el UWC Atlantic de Gales (Reino Unido), donde el pasado septiembre empezó el Bachillerato, a la princesa Alexia, la segunda de las tres hijas de los reyes Guillermo y Máxima de los Países Bajos. Pues bien, en cuanto comenzaron las vacaciones navideñas el 10 de diciembre, la holandesa se desplazó hasta su país para reunirse con los suyos. Y los Orange no tardaron en difundir una fotografía para mostrar el reencuentro familiar.
Aquí, en cambio, nada se ha sabido de Leonor, como si no fuera importante que los españoles se vayan familiarizando con ella. Lo único que se sabe es que voló desde el Reino Unido hasta Madrid el martes 14 de diciembre, pues en el diario La Razón se publicó que un pasajero había coincidido con ella en un avión desde Londres. Y se dio por hecho que este jueves se iba a perder la tradición de acudir con sus padres y su hermana, la Infanta Sofía, a merendar el roscón de Reyes a casa de su abuelo materno, Jesús Ortiz (cita que al parecer finalmente no habría tenido lugar), porque las clases en el citado UWC Atlantic se reanudaban un día antes, el 5 de enero. Pero no hay información oficial ninguna al respecto, manteniéndose una política informativa en Palacio más que cuestionable.
¿AÑO NUEVO FUERA DE MADRID?
Y la opacidad inevitablemente alimenta toda clase de especulaciones. En este caso, desde el programa de Telecinco Ya es mediodía –que habitualmente conduce Sonsoles Ónega, una de las grandes amigas de la Reina Letizia– se informaba el pasado miércoles de que los Monarcas y sus dos hijas habrían pasado el final de año fuera de Madrid. De ser así, Don Felipe al menos no podría haber abandonado la ciudad hasta pasado el 28 de diciembre, puesto que ese día firmó en la capital de España numerosos reales decretos, incluidos los de la concesión de la gran cruz de la orden de Carlos III a varios ministros.
Es sabido que la Familia Real tiene por costumbre realizar uno de sus viajes reservados cada Nochevieja, muchas veces a destinos de esquí. Otra cosa es que con la pandemia disparada esta vez se tratara de la mejor opción.
