La vida de los asesinos de Blanco: 22 años oscuros y sin perdón

Registrado
18 Ago 2015
Mensajes
3.934
Calificaciones
21.706
Homenaje a Miguel Ángel Blanco organizado por el PP vasco en Ermua. MIKEL SEGOVIA


WhatsApp-Image-2017-07-13-at-18.58.00-1440x808.jpeg

Publicado el 13 de Julio de 2019 - 00: 1


La vida de los asesinos de Blanco: 22 años oscuros y sin perdón


Padres en prisión

Las vidas de los asesinos de Miguel Angel Blanco ha sido dispar. En este tiempo dos de los etarras se han convertido en padres por partida doble, otro terminó suicidándose y el cuarto, el chivato, sigue pendiente de un tercio de su condena.

Francisco Javier García Gaztelu, ‘Txapote’ (Galdakao, 1966) y su pareja, Irantzu Gallastegi Sodupe, ‘Amaia’, fueron condenados por este asesinato. Ella interceptó a Blanco cuando se disponía a ir a su trabajo, él fue el autor de los disparos que dos días después dejaron agonizando al concejal del PP en un descampado de Lasarte. Entre ambos la relación personal iba más allá de la de meros compañeros de comando terrorista. Cuatro largos lustros después, ‘Txapote’ y ‘Amaia’ son padres de dos hijos, ambos concebidos en prisión y que cuentan con 17 y 12 años.
pasado 8.035 días. En prisión todo continúa casi igual. El régimen penitenciario no se ha modificado, el tiempo de patio parece congelado y el horizonte sin pisar la calle será aún muy largo. Lo que más ha cambiado no son sus vidas sino sus cuerpos, más envejecidos. El corazón quizá continúe igual que entonces, frío y pétreo. En estos años no ha dado muestras de lo contrario, no al menos en público. Así han ido transcurriendo la mayor parte de los últimos 22 años para Javier García Gaztelu, ‘Txapote’, Irantzu Gallastegi Sodupe e Ibon Muñoa, quienes junto a José Luis Geresta, ‘Oker’ –que se suicidó en 1999- integraron el comando que secuestró y asesinó a Miguel Angel Blanco.


A su víctima se le sigue recordando cuatro lustros después cada mes de julio en muchos rincones del país. Para ellos se impuso el desprecio y el olvido, salvo la memoria que aún reivindican algunos de sus vecinos. Las vidas de ‘Txapote’, ‘Amaia’ y Muñoa continúan entre la rutina de una celda, el eco del cierre de sus puertas y el ir y venir de los funcionarios. Y así seguirá muchos años más.

No es fácil olvidar lo que planificaron, ejecutaron y jamás repudiaron aquel mes de julio de hace 22 años. Fueron cuatro días que cambiaron para siempre al país y a la sociedad en su lucha contra ETA, en especial en Euskadi. La banda ya no existe, se disolvió oficialmente el 4 de mayo de 2018 en Cambó, Francia. Murió de inanición social y de presión policial y judicial. Lo hizo dejando muchas preguntas. Los pocos que esos días estuvieron en el lado oscuro de la historia es probable que guarden alguna de las respuestas.

Dos décadas más tarde no existen indicios de que hoy no actuaran igual. Nada hace aventurar que en este julio de 2019 quienes apretaron el gatillo y ayudaron a hacerlo en 1997 empatizarían con los que inundaron las calles de Euskadi y de toda España para suplicarles clemencia. Lo hicieron con sus manos blancas, con su silencio, con sus velas en vigilia y con el corazón encogido mientras el reloj agotaba las 48 horas de esperanza que ETA hizo cenizas.
A Miguel Angel Blanco lo asesinaron en un descampado de Lasarte (Guipúzcoa) la tarde del 12 de julio de 1997. Dos tiros, una agonía y una muerte que lo cambió todo. No hubo prórroga. El ultimátum impuesto por ETA, acercamiento de sus presos al País Vasco a cambio de la vida del joven concejal del PP en Ermua, se cumplió. Fue la venganza de la banda por la liberación sólo once días antes del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara en un zulo inmundo de Mondragón.

En estos 22 años oscuros el hueco que dejó Miguel en su familia continúa. En su pueblo los suyos le recuerdan cada año. Ahora es un dolor más llevadero, el tiempo ha ayudado, el recuerdo constante en la sociedad española también. En las casas de los protagonistas del otro lado de esta historia, la oscuridad continúa casi invariable. La luz seguirá por un tiempo entrando sólo por la ventana de la celda.
Padres en prisión
Las vidas de los asesinos de Miguel Angel Blanco ha sido dispar. En este tiempo dos de los etarras se han convertido en padres por partida doble, otro terminó suicidándose y el cuarto, el chivato, sigue pendiente de un tercio de su condena.

Francisco Javier García Gaztelu, ‘Txapote’ (Galdakao, 1966) y su pareja, Irantzu Gallastegi Sodupe, ‘Amaia’, fueron condenados por este asesinato. Ella interceptó a Blanco cuando se disponía a ir a su trabajo, él fue el autor de los disparos que dos días después dejaron agonizando al concejal del PP en un descampado de Lasarte. Entre ambos la relación personal iba más allá de la de meros compañeros de comando terrorista. Cuatro largos lustros después, ‘Txapote’ y ‘Amaia’ son padres de dos hijos, ambos concebidos en prisión y que cuentan con 17 y 12 años.
Quien fuera jefe militar de ETA y su mujer fueron condenados a 50 años de cárcel por este crimen. Ella fue detenida en 1999 y cumple su 20º año en la cárcel. Él fue detenido dos años después, en 2001 en Anglet (Francia), y suma ya 18 años en prisión. Para ambos el futuro seguirá siendo la cárcel en primer grado, el grado más severo. ‘Txapote’ acumula 450 años de condena por multitud de asesinatos –Gregorio Ordóñez, José Luis López de Lacalle, Fernando Buesa, Jorge Díez, Francisco Múgica…-. Simboliza la historia más cruel de ETA.

Pese a que ha mantenido una de las posiciones más duras en el colectivo de presos, y fue siempre reacio a acogerse a beneficios penitenciarios, a García Gaztelu y Gallastegi Sodupe se les ha permitido cumplir condena en la misma prisión, en Huelva. Él en el módulo de hombres y ella en el de mujeres. ‘Amaia’ podría no abandonar la prisión hasta el año 2040. Para entonces quizá también lo habrá hecho su hermana, Lexuri Gallastegi Sodupe, detenida en 2002 en Francia y que tras ser juzgada en España fue condenada a 1.476 años –con un máximo de cumplimiento efectivo de 30 años-. Cumple condena por un coche bomba colocado en 2001 contra el subsecretario general de la Policía Científica, Juan Junquera, y que hirió a otras 96 personas.

El ‘chivato’
En la familia Gallastegi Sodupe, de Berango (Vizcaya), el vínculo con ETA lo completa otro hermano, Orkaitz Gallastegi. Con 19 años, en 2002, atacó e incendió la oficina de correos de su pueblo, fue perseguido por un ciudadano cuando escapaba y pudo ser detenido.

Seis meses antes, Orkaitz se había convertido en una pieza clave para el asesinato del juez José María Lidón, el 7 de noviembre de 2001. Fue él quien pasó información después de vigilar las rutinas del magistrado. Fue condenado a 26 años de cárcel. Es el único sentenciado por este caso en el que la familia del juez insiste en reclamar la extradición de Garikoitz Azpiazu, preso en Francia, y al que considera autor de la muerte.
Como ‘chivato’ también cumple prisión otro de los participantes necesarios en el secuestro y posterior asesinato de Miguel Ángel Blanco. Ibon Muñoa lo conocía bien. Este ex concejal de Herri Batasuna no sólo trabajaba cerca de él, en la tienda de repuestos de automóvil que regentaba, sino que la gestoría en la que el concejal del PP había encontrado trabajo, Eman Consulting, asesoraba a Recambios Automóviles Muñoa S.L.

Su participación en la operación con la que ETA quería vengarse del Estado fue importante. Según determinó la investigación policial, Muñoa facilitó su piso al ‘comando Donostia’, puso a su disposición su coche, se coordinó con ellos para el secuestro del joven concejal, recabó información de Miguel Ángel e incluso facilitó matrículas hechas en su tienda con una troqueladora. Ahora, a sus 61 años, Ibon Muñoa (Eibar, 1958) cumple su condena de 33 años en la cárcel de Córdoba. Fue arrestado cuatro años después del asesinato de Blanco, en 2001, y acumula ya 18 años privado de libertad.

Una muerte extraña
El cuarto implicado en el asesinato tenía la misma edad que Blanco cuando le secuestró, 29 años. José Luis Geresta. Alias ‘Ttoto’ vivió sólo dos años más. El 20 de marzo de 1999 su cuerpo fue localizado en un descampado con un tiro en la cabeza. Junto a él, una pistola Astra calibre 6.5. La autopsia concluyó que fue un su***dio. Se habló incluso de que habría sufrido algún tipo de delirio que le llevó a vagar cuatro días por una zona montañosa entre Hernani y Rentería. El robo de unas botas en un caserío y la pérdida de una riñonera con documentación falsa facilitó la identificación de aquel cuerpo con síntomas de desnutrición encontrado en el barrio de Fagoaga.
A partir de entonces, Geresta, alias ‘Oker’, engrosó la lista de ‘héroes’ de la izquierda abertzale. Su funeral, celebrado el 23 de marzo de ese año, fue muestra de ello. El cuerpo fue honrado en el cementerio de Polloe con aurreskus y flores, gritos a favor de ETA y en contra del PP y con la presencia de los dirigentes de HB, Arnaldo Otegi y Joseba Permach. El líder abertzale llegó a asegurar que su muerte era otro episodio más de la ‘guerra sucia’ del Estado. Su féretro, cubierto con una bandera con el anagrama de ETA, procesionó por varios municipios desde San Sebastián hasta su localidad natal, Zizurkil, donde se cedió el Ayuntamiento para instalar la capilla ardiente. Allí pronto tendría una plaza con su nombre, que no se retiraría hasta años después, en 2008, y tras la queja de las víctimas del terrorismo.

En esta triste historia, la víctima es la quinta protagonista, la más inocente. También la más honrada y recordada. Lo ha sido a lo largo de todos y cada uno de estos 22 años en nuestro país. Estos días, la Fundación que impulsó su hermana Mari Mar ha organizado más de una treintena de homenajes por todo el país, muchos en plazas y calles que llevan su nombre.
https://www.elindependiente.com/politica/2019/07/13/22-anos-oscuros-y-sin-perdon/


 
Repugnante todo asesinato venga de donde venga y por supuesto el del post Miguel Angel Blanco. D.E.P.

Y todavía mas repugnante es que use la fundación que lleva su nombre sirva para financiar campañas electorales del PP. De eso la prensa se ha olvidado.

Ahora la prensa cloaquera se ceba en quien ha leído un comunicado redactado por unos o por otros, pero no se acuerdan de ciertos detalles....Los recuerdo.

¿No tiene nada que decir la hermana Mari Mar Blanco? ¿Lo ha olvidado por un puestecito de diputada?


Cuando el PP usó el nombre de Miguel Ángel Blanco para financiarse con la Gürtel

La fundación Miguel Ángel Blanco acabó siendo parte de la trama del PP para financiar irregularmente sus campañas electorales, según la Policía
Alba Camazón

39 comentarios

10/07/2017 - 13:23h
busqueda-Miguel-Angel-Blanco-encontrarlo_EDIIMA20170710_0200_19.jpg

EFE

El asesinato de Miguel Ángel Blanco, del que se cumplen ahora 20 años, supuso una gran movilización ciudadana y política que se recuerda como un antes y un después en la unión social contra el terrorismo.




En su recuerdo se puso nombre a una fundación que, años después, ha acabado siendo investigada. Según la Policía, el PP utilizó la Escuela Miguel Ángel Blanco para facturar de manera fraudulenta gastos de campañas electorales dentro del entramado de la Gürtel. Dentro de las investigaciones que se han llevado a cabo sobre la financiación irregular de las campañas del PP en Madrid, la Policía concluye que sus responsables utilizaron la fundación en honor al concejal asesinado para facturar campañas electorales.

Como informaron en su momento medios como El Plural o La Sexta, el Partido Popular pagó actos políticos a través de esta fundación con el mismo método que con otras como FAES o Fundescam, haciendo pasar estas cantidades por gastos de la fundación en lugar de abonarlo desde el propio PP. La Policía calcula que en total se falsearon diferentes pagos a diferentes entidades por el precio de 600.000 euros en cinco años y concluye que esta era una práctica habitual en el PP.

En un ejemplo registrado por la UDEF en 2014 y relatado en Vozpopuli, actos de la Escuela Miguel Ángel Blanco fueron facturados a la Fundación Popular Iberoamericana, que abonó 10.860.725 pesetas por el concepto de “Seminario sobre el papel de los partidos Políticos en Perú”.

Un ejemplo más conocido de estas operaciones es el caso del congreso que aupó a Esperanza Aguirre como presidenta regional del PP en 2004. La fundación Fundescam, relacionada con el PP, fue la encargada de pagar a Correa, en vez de el Partido Popular. Correa cobró al Instituto de Formación Política por el acto de presentación de Suárez Illana como candidato a Castilla La Mancha en el año 2002.

Según la cadena, la empresa de Don Vito Special Events organizó decenas de actos y congresos del PP por un total de 600.000 euros. Los pagos deberían haberse facturado a nombre del partido, pero sistemáticamente se cargaron a fundaciones sin ánimo de lucro afines al PP, como el Instituto Miguel Ángel Blanco, FUNDESCAM y FAES.

https://www.eldiario.es/politica/Policia-PP-Miguel-Angel-Blanco_0_663533921.html
 
El PP utilizó a Miguel Ángel Blanco para dar dinero a la ‘Gürtel’
El Gobierno de Madrid se sirvió del concejal asesinado para desviar dinero a las empresas de la trama

CECILIA GUZMÁN Domingo, 14 de julio de 2013

111811.jpeg

Miguel Ángel Blanco

El vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban Gonzáles Pons, ha recordado este sábado en Sueca (Valencia) que se celebran los 16 años de la muerte de Miguel Ángel Blanco, y ha afirmado que el "PP no es Bárcenas, es Miguel Ángel Blanco".

Utilizando a Blanco
González Pons ha hecho estas declaraciones durante su intervención en la cena que el PP provincial de Valencia ha celebrado en el municipio valenciano de Sueca, utilizando de este modo la barbarie del asesinato brutal por parte de ETA de Miguel Ángel Blanco para apoderarse de su cadáver y transformarlo en el emblema del PP.

Dando dinero a la Gürtel

Unas declaraciones que resultan como mínimo llamativas después de que ELPLURAL.COM desvelase en exclusiva el pasado mes de mayo que el Gobierno de la Comunidad de Madrid presidido por Esperanza Aguirre llegó a utilizar a Miguel Ángel Blanco para dar dinero a la Gürtel.

Fraccionando contratos

Así se desprendía de un informe de la Unidad de Auxilio Judicial remitido a la Audiencia Nacional, en el que se podía constatar que el Gobierno de la Comunidad de Madrid fraccionó numerosos contratos para evitar que se tuvieran que someter a concurso público. A través de esta operativa, el Gobierno de Esperanza Aguirre facturó a las empresas de la trama Gürtel6.484.080,07 euros (a través de 686 operaciones diferentes).

Entres los actos en los que ha habido fraccionamiento del contrato, según la Policía, destaca

Fraccionamientos de contrato
Del total de las operaciones con las empresas investigadas, el informe detalla algunos de los actos en los que hubo “fraccionamiento del Contrato”. Entre estos eventos, destaca el homenaje que la Comunidad de Madrid realizó a Miguel Ángel Blanco, el concejal del PP de Ermua que fue vilmente asesinado por ETA.

Vicepresidencia y Portavocía

Sin embargo, ésta no fue la única ocasión en la que el Gobierno del Partido Popular se sirvió de las víctimas del terrorismo para desviar dinero a las empresas de la trama que lideraba Francisco Correa. Según esgrime el informe que obra en manos del juez Ruz, la organización de muchos de estos eventos dependía en última instancia de la “Vicepresidencia Portavocía de la Comunidad de Madrid”, delegación que desde el año 2003 lideraba Ignacio González.

El 11-M como excusa

A este respecto, conviene resaltar que el atentado más doloroso en la historia democrática para los madrileños -el acaecido en marzo de 2004 en Atocha-, también supuso una buena oportunidad de negocio para las empresas que presuntamente financiaban al Partido Popular tras acceder a numerosas adjudicaciones públicas.

Homenaje reconvertido en negocio

Desde 2004 a 2007 (ambos años incluidos), el Ejecutivo de Esperanza Aguirre e Ignacio González ideó el fraccionamiento del coste que supuestamente requería organizar los Actos de Homenaje a los Servicios y Voluntarios del 11-M. Por ejemplo, en 2004 el evento tuvo un coste de 141.002,59 euros. Sin embargo, para poder favorecer a sus empresas amigas, el Partido Popular decidió realizar hasta 15 contratos menores por un importe inferior a los 12.000 euros.

Acuerdo con la AVT

Otro ejemplo más se detalla en la página 64 del informe, donde la Unidad de Auxilio Judicial expone que la firma del convenio con la Asociación de Víctimas del Terrorismo se realizó a través de la tramitación de “3 facturas, de importe inferior a 12.020,24 euros, con 3 empresas diferentes, pero todas relacionadas con el Grupo, en las que no figuran desglosados el número de unidades ni su coste unitario”. Algo que contraviene de forma flagrante la Ley.

Cualquier oportunidad
Además de las víctimas del terrorismo, las empresas de la trama Gürteltambién hicieron negocio con multitud de actos que van desde eventos deportivos, la celebración del día de la Comunidad de Madrid, homenajes a la Constitución, la entrega de los premios Raúl Rivero (en homenaje al activista anticastrista), o el montaje de un Belén navideño.

https://www.elplural.com/politica/e...-blanco-para-dar-dinero-a-la-guertel_61199102
 
Carta de la hermana de una víctima del GRAPO a Marimar Blanco: “Debería dimitir”

“Le falta mucho para ser la verdadera representante de las víctimas de terrorismo porque no las considera a todas por igual”

SILVIA VIDAL PINAR Viernes, 12 de julio de 2019

europapress-2265150-marimar-blanco-presente-en-los-actos-conmemorativos-del-22-aniversario-del-asesinato-de-su-hermano-miguel-angel-blanco-celebrados-en-los-jardines-miguel-angel-blanco-de-madrid.jpeg

Marimar Blanco presente en los actos conmemorativos del 22 aniversario del asesinato de su hermano Miguel Ángel Blanco celebrados en los Jardines Miguel Ángel Blanco de Madrid

Las últimas declaraciones de Mari Mar Blanco del día 8 de julio respecto a los posibles pactos de EH Bildu con otras formaciones, califican de “error político y humillación a las víctimas de terrorismo” cualquier intento de entendimiento entre las dos formaciones.

Vayamos por partes.

Lo que resulta verdaderamente humillante es que, una vez más, Blanco se erija en portavoz de las víctimas, siendo diputada del PP en el Congreso y a la vez presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, cargos que muchas víctimas consideran que son incompatibles. Oponiéndose a EH Bildu no tiene en cuenta la existencia de víctimas de otras bandas, y sigue aferrada a un discurso que, además de perpetuar el odio y el rencor entre las partes, se contradice con lo que su partido ha ido realizando a lo largo de los años a conveniencia y que detallo a continuación con algunos ejemplos, extraído todo ello de publicaciones en prensa de ámbito nacional.

En 1998, el entonces presidente Aznar, del PP, fue el promotor del acercamiento y el dialogo entre ETA y el Estado. El año 2013 el alcalde de Vitoria, Javier Maroto, del PP, defendía sus pactos con EH Bildu y pedía que “cundiera el ejemplo”, para poder aprobar los presupuestos. El mismo Javier Maroto en 2014 calificó los hechos del 3 de marzo de 1976 como crimen y defendía la postura de las víctimas que en los sumarios fueron calificadas como etarras. El 3 de marzo de 2006 el Parlamento Vasco hizo una declaración institucional declarando víctimas de terrorismo a los asesinados y heridos de Vitoria en los hechos antes citados, instando al Estado español a que también les reconociese como víctimas. Esa declaración la firmaron todos los representantes políticos del Parlamento Vasco, incluido Leopoldo Barrera del PP. Durante las pasadas elecciones municipales, el alcaldable del PP en Labastida, ofreció pactos de gobierno e incluso dos concejalías a EH Bildu para no perder la alcaldía. Y en la última legislatura, PP y EH Bildu votaron lo mismo en casi el 50% de las votaciones llevadas a cabo en el Parlamento Vasco.Según Blanco, esos son errores y humillaciones a las víctimas. Parecen ser dos varas de medir en las mismas manos.

No guardo ninguna simpatía por EH BILDU, pero el sentido común me lleva a respetar lo que un pueblo libremente elige


Dice Mar Blanco que en democracia “no se puede pactar con un partido que sigue sin condenar la violencia terrorista”. ¿Acaso Blanco ignora que la democracia ha dado legitimidad a ese partido? Nos guste o no son representantes del pueblo igual que ella. Elegidos democráticamente, igual que ella. Y como tales deben ser escuchados y tienen la potestad de hablar en nombre de quienes les han votado. Y gozan de la capacidad de pactar, como el partido que ella representa, con quien se entiendan, esperemos que para beneficio de todos.

Todo ello sin olvidar el detalle de que Blanco pertenece a un partido que sigue sin condenar la violencia franquista fruto de un golpe de Estado en 1936. Pero eso ya es harina de otro costal.

En su papel de presidenta de la Fundación de Víctimas de Terrorismo, olvida Mari Mar Blanco que también representa a los que sufrieron el terrorismo por parte del Estado y que el propio Estado reconoce como víctimas. La Ejecutiva de su partido debería llamarla al orden si sigue calificando los posibles pactos de error. Principalmente por lo que tiene de hipocresía, los pactos son habituales en todo el estado y entre todos los partidos. Lo que no vale es criticar unos pactos y omitir otros. Y mentir a los votantes por omisión, cuesta los votos que tanto anhelan. Recordará sin duda que las mentiras del Gobierno del PP respecto al atentado del 11M en Madrid le costaron al partido ganar las elecciones generales.

Todo me lleva a pensar, repito, que el único interés de Blanco es seguir azuzando rencor, que es su modus vivendi, dicho sea de paso, desde el infame asesinato de su hermano, lanzándose entonces a conseguir un escaño que conserva legislatura tras legislatura, incluso a costa de renuncias de sus compañeros y sin dimitir de su cargo de presidenta de la Fundación, alzándose como representante política de las víctimas de terrorismo y obviando que cada una de ellas tiene criterio propio suficiente para decidir sobre lo que políticamente le conviene y sobre todo para separar los dos ámbitos. Cualquier víctima podría ocupar ese cargo en la Fundación más dignamente de lo que ella lo hace. Cualquier víctima podría ejercer de político sin aprovecharse de su condición de víctima para meter cizaña en una sociedad que piensa en avanzar, mejorar y convivir pacíficamente. Quizá a alguien no le convenga tal avance, ya que cuando los ciudadanos toman conciencia de que hay que avanzar, ruedan cabezas.

Muchos saben que mi caso es similar al de Mari Mar Blanco. Puedo hasta llegar a entender que sienta odio. Y precisamente por ello no debería representar a un colectivo que aglutina a muchos. Quienes me conocen saben que no guardo ninguna simpatía por EH BILDU, como tampoco la tengo por ninguna banda terrorista. Pero el sentido común me lleva a respetar lo que un pueblo libremente elige. No hay otra opción. Y en nombre de ese respeto me atrevo a manifestar mi opinión libre y sincera sobre las declaraciones de Blanco.

No me cansaré de repetir, como muchos, que la utilización de las víctimas por parte de los políticos es indecente. Cabemos en la boca de todos ellos en cuanto se olfatean votos. Pero me parece mucho más indecente que una víctima utilice a las demás para beneficio propio. A Mari Mar Blanco le falta mucho para ser la verdadera representante de las víctimas de terrorismo porque no las considera a todas por igual. Debería dimitir de su puesto de presidenta de la Fundación de Víctimas y así liberarnos a todas de la pesada carga que supone tener que enfrentarse a propios y extraños cada vez que como diputada del PP hace manifestaciones fuera de lugar.

Si lo que quiere es representar a las víctimas, que se aleje de la política, que las proteja, las ampare y luche por ellas de verdad


Mari Mar Blanco, en su condición de diputada, debe velar para que los acuerdos, los haga quien los haga, sean beneficiosos para el conjunto de la sociedad. Debe dedicarse a velar por la educación pública, por la sanidad pública, por proteger a las familias de desahucios, por evitar las muertes en el Mediterráneo, por sanear las cuentas del Estado, por recuperar la hucha de las pensiones, por proteger de la miseria a ancianos y niños en riesgo de pobreza, por que todos los cuerpos de seguridad del Estado dispongan de toda la información en materia antiterrorista, para evitar que otros sufran lo que ella padeció; y por un sinfín de problemas que nos afectan a todos, víctimas y no víctimas. Y dejar de nombrarnos cada vez que le conviene para distraer a la sociedad de otros temas que le incumben. Y así, de paso, beneficiaria a las víctimas que dice representar, que también sufren la mala gestión de las instituciones además de su drama personal.

Y si lo que quiere es representar a las víctimas, que se aleje de la política, que las proteja, las ampare y luche por ellas de verdad. Que vele por la reparación de los daños, que se preocupe de que todos tengan la asistencia necesaria e imprescindible para llevar adelante sus vidas marcadas por la tragedia. Si quiere mantener el buen nombre de su hermano y que sea recordado por lo que le hicieron, que lo dignifique en lugar de ensuciarlo. De otro modo el apellido Blanco acabará asociado a la hipocresía y al mal hacer de quien supo sacar partido de su muerte. Lamentable.

* Silvia Vidal Pinar es hermana de Marcos Vidal Pinar, asesinado por el GRAPO en 1980


 
El espíritu de Ermua ha sido aplastado por el espíritu del mal

opinion-rosa-diez-interior-8-655x368.jpg


  • Rosa Díez
  • 15/07/201918:45



Para las personas de mi generación decir “Ermua” era tanto como pronunciar la palabra “resistencia”, con todo lo que esa palabra representa. Ermua se constituyó hace veintidós años como el símbolo de lo mejor del País Vasco porque cuando allí se perpetró uno de los actos que representan lo peor del País Vasco, el asesinato de Miguel Ángel Blanco, fuimos capaces de hacer aflorar también lo mejor de esta sociedad.

Fue en Ermua donde la gente salió a la calle, en espontánea y sentida manifestación, a gritar a los criminales de ETA que su tiempo se había acabado. Fue en Ermua donde los ertzainas se quitaron el verduguillo negro para que todos, también los malos, les vieran la cara y supieran, de una vez por todos, que ellos estaban con las víctimas. Fue desde Ermua donde se movilizó a millones de españoles que salieron en todos los rincones de España a pedir por la vida de Miguel Ángel y a reprobar con tanta firmeza como dolor a sus criminales y a sus cómplices. Fue en Ermua cuando el lehendakari Ardanza, ante la multitud, se subió a un improvisado escenario y dijo, por primera y ultima vez, algo que jamás habíamos escuchado en boca de un dirigente del PNV: “Con ETA, ni en los métodos ni en los fines”. Fue en Ermua cuando nació aquel espíritu de resistencia y lucha democrática que nos hizo creer que habíamos derrotado definitivamente a ETA.

Pero hace mucho, mucho tiempo, que aquel espíritu democrático y valeroso, aquella mirada critica y feroz sobre y contra ETA que recorrió España saliendo de Ermua ha sido acallado por los pragmáticos y los traidores. La memoria es débil… salvo la memoria de los malos. Ellos comprendieron aquellos días que a esos millones de ciudadanos que habían salido a la calle no les iba a meter ya en su casa ni Dios… Y fueron preparando la siguiente jugada en el mismo macabro objetivo: acabar con la democracia con el precio de vidas que fuera necesario… pero modificando la táctica. Y así nació Lizarra, ese pacto con el PNV que, pasado el apuro de Ardanza en Ermua, acudió presto a la ayuda de los terroristas. No es nuevo en la historia del terror: cuando ETA estaba fuerte, el PNV se moderaba; cuando ETA estaba débil, el PNV se radicalizaba. Los vasos comunicantes siempre les han funcionado a las mil maravillas.

No habían pasado unas semanas cuando ya los del árbol y los de las nueces estaban traicionado la memoria de Miguel Ángel y las esperanzas de los millones de españoles que creímos que aquel crimen marcaría un antes y un después en la colaboración entre ETA y el PNV, fundamentalmente por la respuesta ciudadana que se produjo. Pero no fue así y todo se fue diluyendo, todo volvió a su ser: cada oveja, con su pareja. Pasaron unos años en los que seguimos viviendo el espejismo de que todo había cambiado… pero no, nada cambió salvo el dolor de una familia, el dolor de quienes vivimos en directo el crimen, la ilusión traicionada, la esperanza fallida… Eso se quedó para siempre entre nosotros.

Se cumplió la vieja profecía: los hijos de las tinieblas son más astutos que los hijos de la luz. Y los hijos de las tinieblas volvieron a lo suyo. Y ETA logró colarse en las instituciones y desde allí, con la complicidad del PNV y la colaboración del PSOE y del PP (los unos como estrategia, los otros con complejo, que no se si es aún peor) comenzaron a reescribir la historia de ETA… y la de Ermua también.


La de Ermua la escribieron con letras invisibles, con olvido. ¿Cuántos jóvenes de hoy saben quien fue Miguel Ángel Blanco? ¿Cuántos jóvenes de hoy recuerdan su secuestro, su cruel asesinato? ¿Cuántos jóvenes de hoy recuerdan como la gente salió a la calle, en sus pueblos del País Vasco y con la cara descubierta a enfrentarse con ETA, a despreciarles, a señalarles como criminales…? ¿Cuántos jóvenes de hoy saben lo que fue aquel espíritu de Ermua?

El olvido es la peor de las traiciones, más doloroso aún que el crimen. Aunque tengo para mí que hay aun algo más perverso, más dañino: el escarnio, la mofa, el insulto a la memoria que aun se resiste a morir. Por eso, porque el olvido no es suficiente para saciar sus malsanos instintos, en el día en el que se cumple el vigésimo segundo aniversario de aquel crimen horrendo que movió a la ciudadanía contra ETA, sus herederos y sus cómplices- en primera y segunda instancia- han decidido ciscarse en su memoria de la manera más cruel que les era posible y han nombrado Presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Guipúzcoa a uno de los herederos y representantes de quienes asesinaron vilmente a Miguel Ángel Blanco.

Verán, la elección del día no es casual; ellos, los malos, los cómplices y los tibios (espécimen despreciable donde lo haya) han querido homenajear ese día a los asesinos y por eso les han colocado en el lugar que más humillación a las víctimas puede causar. Los jóvenes de hoy, que no conocen la historia, verán con naturalidad que un tipo que nunca condenó a ETA y que forma parte de ese colectivo que homenajea a los asesinos ha sido elegido Presidente de la Comisión de Derechos Humanos de una institución democrática; ergo, es un demócrata; ergo, asesinar no estuvo mal; ergo… todos son igualmente víctimas: Miguel Ángel Blanco tendrá, en la mente de todos esos nuevos jóvenes, la misma categoría que el criminal que apretó el gatillo y lo dejó tirado en una cuneta.

Es tan miserable todo que cuesta escribir, que cuesta incluso pensar en ello. Lo que acaban de perpetrar en Guipuzcoa (mayoría PNV, ese partido de misa diaria) los dirigentes políticos elegidos democráticamente va más allá de la banalización del mal de la que hablaba Hanna Arendt. Es la deshumanización de la víctima y la exaltación del asesino; es la humillación (si, otra vez la palabra) de todo lo bueno, de todas las buenas gentes que han arriesgado o dado su vida para proteger la democracia. El trece de julio de 2019 el espíritu de Ermua ha sido aplastado por el espíritu del mal, por los hijos de las tinieblas. Y, ¿saben lo que es peor? Que hay millones de españoles que ni siquiera se han enterado y otros varios millones a los que les importa un bledo.

No, no hay esperanza en este artículo. Solo hay indignación y dolor. Y vergüenza por formar parte de esta tierra que no es capaz de honrar como se merecen a nuestros muertos.
https://okdiario.com/opinion/espiritu-ermua-sido-aplastado-espiritu-del-mal-4371295
 
Carta de la hermana de una víctima del GRAPO a Marimar Blanco: “Debería dimitir”

“Le falta mucho para ser la verdadera representante de las víctimas de terrorismo porque no las considera a todas por igual”

SILVIA VIDAL PINAR Viernes, 12 de julio de 2019

europapress-2265150-marimar-blanco-presente-en-los-actos-conmemorativos-del-22-aniversario-del-asesinato-de-su-hermano-miguel-angel-blanco-celebrados-en-los-jardines-miguel-angel-blanco-de-madrid.jpeg

Marimar Blanco presente en los actos conmemorativos del 22 aniversario del asesinato de su hermano Miguel Ángel Blanco celebrados en los Jardines Miguel Ángel Blanco de Madrid

Las últimas declaraciones de Mari Mar Blanco del día 8 de julio respecto a los posibles pactos de EH Bildu con otras formaciones, califican de “error político y humillación a las víctimas de terrorismo” cualquier intento de entendimiento entre las dos formaciones.

Vayamos por partes.

Lo que resulta verdaderamente humillante es que, una vez más, Blanco se erija en portavoz de las víctimas, siendo diputada del PP en el Congreso y a la vez presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, cargos que muchas víctimas consideran que son incompatibles. Oponiéndose a EH Bildu no tiene en cuenta la existencia de víctimas de otras bandas, y sigue aferrada a un discurso que, además de perpetuar el odio y el rencor entre las partes, se contradice con lo que su partido ha ido realizando a lo largo de los años a conveniencia y que detallo a continuación con algunos ejemplos, extraído todo ello de publicaciones en prensa de ámbito nacional.

En 1998, el entonces presidente Aznar, del PP, fue el promotor del acercamiento y el dialogo entre ETA y el Estado. El año 2013 el alcalde de Vitoria, Javier Maroto, del PP, defendía sus pactos con EH Bildu y pedía que “cundiera el ejemplo”, para poder aprobar los presupuestos. El mismo Javier Maroto en 2014 calificó los hechos del 3 de marzo de 1976 como crimen y defendía la postura de las víctimas que en los sumarios fueron calificadas como etarras. El 3 de marzo de 2006 el Parlamento Vasco hizo una declaración institucional declarando víctimas de terrorismo a los asesinados y heridos de Vitoria en los hechos antes citados, instando al Estado español a que también les reconociese como víctimas. Esa declaración la firmaron todos los representantes políticos del Parlamento Vasco, incluido Leopoldo Barrera del PP. Durante las pasadas elecciones municipales, el alcaldable del PP en Labastida, ofreció pactos de gobierno e incluso dos concejalías a EH Bildu para no perder la alcaldía. Y en la última legislatura, PP y EH Bildu votaron lo mismo en casi el 50% de las votaciones llevadas a cabo en el Parlamento Vasco.Según Blanco, esos son errores y humillaciones a las víctimas. Parecen ser dos varas de medir en las mismas manos.

No guardo ninguna simpatía por EH BILDU, pero el sentido común me lleva a respetar lo que un pueblo libremente elige


Dice Mar Blanco que en democracia “no se puede pactar con un partido que sigue sin condenar la violencia terrorista”. ¿Acaso Blanco ignora que la democracia ha dado legitimidad a ese partido? Nos guste o no son representantes del pueblo igual que ella. Elegidos democráticamente, igual que ella. Y como tales deben ser escuchados y tienen la potestad de hablar en nombre de quienes les han votado. Y gozan de la capacidad de pactar, como el partido que ella representa, con quien se entiendan, esperemos que para beneficio de todos.

Todo ello sin olvidar el detalle de que Blanco pertenece a un partido que sigue sin condenar la violencia franquista fruto de un golpe de Estado en 1936. Pero eso ya es harina de otro costal.

En su papel de presidenta de la Fundación de Víctimas de Terrorismo, olvida Mari Mar Blanco que también representa a los que sufrieron el terrorismo por parte del Estado y que el propio Estado reconoce como víctimas. La Ejecutiva de su partido debería llamarla al orden si sigue calificando los posibles pactos de error. Principalmente por lo que tiene de hipocresía, los pactos son habituales en todo el estado y entre todos los partidos. Lo que no vale es criticar unos pactos y omitir otros. Y mentir a los votantes por omisión, cuesta los votos que tanto anhelan. Recordará sin duda que las mentiras del Gobierno del PP respecto al atentado del 11M en Madrid le costaron al partido ganar las elecciones generales.

Todo me lleva a pensar, repito, que el único interés de Blanco es seguir azuzando rencor, que es su modus vivendi, dicho sea de paso, desde el infame asesinato de su hermano, lanzándose entonces a conseguir un escaño que conserva legislatura tras legislatura, incluso a costa de renuncias de sus compañeros y sin dimitir de su cargo de presidenta de la Fundación, alzándose como representante política de las víctimas de terrorismo y obviando que cada una de ellas tiene criterio propio suficiente para decidir sobre lo que políticamente le conviene y sobre todo para separar los dos ámbitos. Cualquier víctima podría ocupar ese cargo en la Fundación más dignamente de lo que ella lo hace. Cualquier víctima podría ejercer de político sin aprovecharse de su condición de víctima para meter cizaña en una sociedad que piensa en avanzar, mejorar y convivir pacíficamente. Quizá a alguien no le convenga tal avance, ya que cuando los ciudadanos toman conciencia de que hay que avanzar, ruedan cabezas.

Muchos saben que mi caso es similar al de Mari Mar Blanco. Puedo hasta llegar a entender que sienta odio. Y precisamente por ello no debería representar a un colectivo que aglutina a muchos. Quienes me conocen saben que no guardo ninguna simpatía por EH BILDU, como tampoco la tengo por ninguna banda terrorista. Pero el sentido común me lleva a respetar lo que un pueblo libremente elige. No hay otra opción. Y en nombre de ese respeto me atrevo a manifestar mi opinión libre y sincera sobre las declaraciones de Blanco.

No me cansaré de repetir, como muchos, que la utilización de las víctimas por parte de los políticos es indecente. Cabemos en la boca de todos ellos en cuanto se olfatean votos. Pero me parece mucho más indecente que una víctima utilice a las demás para beneficio propio. A Mari Mar Blanco le falta mucho para ser la verdadera representante de las víctimas de terrorismo porque no las considera a todas por igual. Debería dimitir de su puesto de presidenta de la Fundación de Víctimas y así liberarnos a todas de la pesada carga que supone tener que enfrentarse a propios y extraños cada vez que como diputada del PP hace manifestaciones fuera de lugar.

Si lo que quiere es representar a las víctimas, que se aleje de la política, que las proteja, las ampare y luche por ellas de verdad


Mari Mar Blanco, en su condición de diputada, debe velar para que los acuerdos, los haga quien los haga, sean beneficiosos para el conjunto de la sociedad. Debe dedicarse a velar por la educación pública, por la sanidad pública, por proteger a las familias de desahucios, por evitar las muertes en el Mediterráneo, por sanear las cuentas del Estado, por recuperar la hucha de las pensiones, por proteger de la miseria a ancianos y niños en riesgo de pobreza, por que todos los cuerpos de seguridad del Estado dispongan de toda la información en materia antiterrorista, para evitar que otros sufran lo que ella padeció; y por un sinfín de problemas que nos afectan a todos, víctimas y no víctimas. Y dejar de nombrarnos cada vez que le conviene para distraer a la sociedad de otros temas que le incumben. Y así, de paso, beneficiaria a las víctimas que dice representar, que también sufren la mala gestión de las instituciones además de su drama personal.

Y si lo que quiere es representar a las víctimas, que se aleje de la política, que las proteja, las ampare y luche por ellas de verdad. Que vele por la reparación de los daños, que se preocupe de que todos tengan la asistencia necesaria e imprescindible para llevar adelante sus vidas marcadas por la tragedia. Si quiere mantener el buen nombre de su hermano y que sea recordado por lo que le hicieron, que lo dignifique en lugar de ensuciarlo. De otro modo el apellido Blanco acabará asociado a la hipocresía y al mal hacer de quien supo sacar partido de su muerte. Lamentable.

* Silvia Vidal Pinar es hermana de Marcos Vidal Pinar, asesinado por el GRAPO en 1980


Esta, si no hubieran matado a su hermano, estaría trabajando de cajera en un super. En las últimas elecciones ni siquiera sacó su escaño y se tuvo que retirar el economista Daniel Lacalle para que ella no se fuese a la cola del paro.
 
Esta, si no hubieran matado a su hermano, estaría trabajando de cajera en un super. En las últimas elecciones ni siquiera sacó su escaño y se tuvo que retirar el economista Daniel Lacalle para que ella no se fuese a la cola del paro.


Ella y su padre.
 
Back