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La denunciante de las falsas amenazas tenía protección las 24 horas por riesgo extremo
La joven acusada de presentar varias denuncias falsas contra su exnovio,Julia P. G., de 23 años, llegó a tener protección policial las 24 horas del día en Picassent tras la valoración de riesgo extremo que realizó el sistema de seguimiento integral de casos de violencia de género (VioGén) con los datos que la víctima facilitó a la Guardia Civil.
Tanto ella como Marc J., el joven de 28 años acusado de enviar los mensajes de móvil amenazantes, llevaron durante 10 días sendos dispositivos electrónicos asignados por el Centro de Control de Medidas Telemáticas de Alejamiento (Cometa), un centro que coordina a los órganos judiciales, la fiscalía y las fuerzas de seguridad del Estado para el seguimiento de las órdenes de alejamiento.
El relevo de los guardias civiles que protegían a la supuesta víctima de violencia de género se realizó en la urbanización de Picassent donde reside la joven ahora investigada. También se encontraba en la vivienda Beatriz, que consiguió engañar a la Guardia Civil y la jueza con sus malas artes telemáticas. Como ya informó LAS PROVINCIAS, esta joven se hizo pasar por el exnovio de su amiga y envió mensajes en los que amenazaba de muerte a Julia. «Tic, tac, tu tiempo se acaba, cuando menos te lo esperes estaré ahí para matarte», escribió Beatriz para que su amiga presentara una denuncia contra Marc. La joven utilizó una aplicación de móvil para que los mensajes aparecieran como enviados por el número de teléfono del chico, que fue detenido seis veces.
La joven acusada de presentar varias denuncias falsas contra su exnovio,Julia P. G., de 23 años, llegó a tener protección policial las 24 horas del día en Picassent tras la valoración de riesgo extremo que realizó el sistema de seguimiento integral de casos de violencia de género (VioGén) con los datos que la víctima facilitó a la Guardia Civil.
Tanto ella como Marc J., el joven de 28 años acusado de enviar los mensajes de móvil amenazantes, llevaron durante 10 días sendos dispositivos electrónicos asignados por el Centro de Control de Medidas Telemáticas de Alejamiento (Cometa), un centro que coordina a los órganos judiciales, la fiscalía y las fuerzas de seguridad del Estado para el seguimiento de las órdenes de alejamiento.
El relevo de los guardias civiles que protegían a la supuesta víctima de violencia de género se realizó en la urbanización de Picassent donde reside la joven ahora investigada. También se encontraba en la vivienda Beatriz, que consiguió engañar a la Guardia Civil y la jueza con sus malas artes telemáticas. Como ya informó LAS PROVINCIAS, esta joven se hizo pasar por el exnovio de su amiga y envió mensajes en los que amenazaba de muerte a Julia. «Tic, tac, tu tiempo se acaba, cuando menos te lo esperes estaré ahí para matarte», escribió Beatriz para que su amiga presentara una denuncia contra Marc. La joven utilizó una aplicación de móvil para que los mensajes aparecieran como enviados por el número de teléfono del chico, que fue detenido seis veces.