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ANÁLISIS

La hipocresía de las eléctricas​


Se evidencia que hasta ahora no es que no se pudiera, es que no se quería


El recibo de la luz ha venido disparándose a medida que se disparaban también los beneficios de las eléctricas del oligopolio, hasta el punto de hacerse socialmente insostenibles ambos: el recibo de la luz y los beneficios de las eléctricas. De hecho, la muy capitalista OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) –integrada por 38 Estados tan poco sospechosos de repúblicas populares como EEUU, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, Canadá, Corea del Sur, Australia o la propia España– ya recomienda subir impuestos, es decir recortar beneficios, a las eléctricas. “Dados los beneficios de las empresas energéticas –asociados al fuerte incremento de los precios–, hay capacidad para aumentar el nivel de impuestos que están pagando y redirigir parte de ese dinero a medidas que amortigüen el impacto”, ha dicho este lunes en Madrid el secretario general de la OCDE, el liberal australiano Mathias Cormann (Liberal).

Por su parte, la Comisión Europea –órgano que ostenta el poder ejecutivo y la iniciativa legislativa de la UE– abrió la semana pasada la puerta a intervenir el precio del gas, disparado a máximos históricos, y otras medidas que también había venido rechazando hasta la fecha. Al hilo, también lo hizo, en rueda de prensa, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos del Gobierno de coalición, Nadia Calviño (PSOE).

“Dentro de las opciones está la fijación de topes en los mercados mayoristas; es una de las que serán analizadas en los próximos días y semanas”, dijo Calviño. “Tenemos varios instrumentos sobre la mesa y vamos a debatir cuáles son los adecuados para Europa en su conjunto y para algunos países”, añadió su homólogo de Alemania, el liberal Christian Lindner (FDP), que incluso llegó a abrir la puerta a “algunas regulaciones de los mercados”. Es más, hasta las propias eléctricas del oligopolio ya están empezando a asumir que tendrán que renunciar de alguna forma a una parte de sus beneficios, y este domingo se mostraban favorables a topar el disparado precio del gas –que dispara el del conjunto de la energía, pues en este curioso sistema el precio de la energía más cara, en este caso el propio gas, es lo que marca los de todas las demás energías: nuclear, hidráulica...–, aunque no a topar los precios del conjunto de la energía ni a recortar directamente sus beneficios.

Pero no siempre ha sido así. De hecho, esto que ya empieza a parecer ser de “sentido común” –que el recibo de la luz no puede seguir disparándose a medida que se disparan también los beneficios de las eléctricas– hasta hace no mucho tiempo no sólo no era de “sentido común” sino que era calificado incluso de “comunista” o de “bolivariano” por poderes económicos, políticos y mediáticos.

Sin ir más lejos, hace menos de medio año –en una carta fechada el pasado 24 de septiembre, cuando el recibo de la luz también estaba en máximos históricos–, varias eléctricas españolas –encabezadas por Iberdrola y Endesa; ambas, del IBEX 35– y la denominada Asociación de Inversores en Infraestructuras Globales se quejaban a la Comisión Europea del real decreto-ley, aprobado diez días antes –el 14 de septiembre–, por el que el Gobierno de coalición les obligaba a devolver temporalmente los beneficios extra que obtienen como consecuencia del disparado precio del gas, conocidos como beneficios caídos del cielo.

Veinte días después de aquella carta –el 14 de octubre–, el Ejecutivo daba marcha atrás y aprobaba un real decreto-ley que desnaturalizaba el aprobado un mes antes y que ha acabado permitiendo a las eléctricas no devolver ni un solo euro de esos beneficios extra.

El real decreto-ley del 14 de septiembre fue aprobado tras mucha presión por parte de Unidas Podemos –y especialmente de la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra– en el seno del Gobierno de coalición; el real decreto-ley del 14 de octubre fue aprobado –cuando el presidente del Gobierno de coalición, Pedro Sánchez (PSOE), acabó avalando la posición de la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera (PSOE), frente a la de Belarra– tras el fichaje de Antonio Miguel Carmona (PSOE) por Iberdrola y el envío de la citada carta de las eléctricas a la Comisión Europea.

Y todo ello, a pesar de que el programa del pacto de gobierno firmado por PSOE y Unidas Podemos estableció expresamente: “Realizaremos los cambios normativos necesarios en relación con el funcionamiento del mercado eléctrico para acabar con la sobrerretribución (conocida como “beneficios caídos del cielo”) que reciben en el mercado mayorista determinadas tecnologías que fueron instaladas en un marco regulatorio diferente, anterior a la liberalización y que han recuperado sobradamente sus costes de inversión”.

El 13 de enero del pasado año 2021, la propia Belarra –entonces, secretaria de Estado de Agenda 2030; el ministro de Derechos Sociales, y vicepresidente segundo del Ejecutivo, aún era Pablo Iglesias– y el secretario de Economía de Podemos y secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, publicaban un artículo, titulado “No es Filomena, es el oligopolio y sus beneficios caídos del cielo”, en el que recordaban precisamente ese punto del programa del pacto de gobierno e insistían en que el actual mecanismo de fijación de precios “viene generando los denominados «beneficios caídos del cielo» –del orden de 700 millones de euros anuales en término medio desde 1997, según algunas estimaciones– para un oligopolio en el que cinco grandes compañías poseen la mayor parte de la capacidad instalada y controlan la totalidad de las redes de distribución”.

La víspera –el 12 de enero de 2021–, Unidas Podemos había exigido al PSOE “impulsar ya la reforma del mercado eléctrico, contemplada en el pacto de Gobierno”. “Los elevados precios de la electricidad en nuestro país suponen cuantiosos beneficios para el reducido grupo de sociedades que forman el oligopolio eléctrico, pero empujan a la pobreza energética a millones de hogares y conllevan problemas de competitividad para millones de empresas españolas, por los sobrecostes que estas se ven obligadas a asumir”, había advertido la formación morada, a la que se le echaron encima poderes económicos –empezando por las propias eléctricas–, políticos –sin ir más lejos, la propia Calviño– y mediáticos –los principales grupos de comunicación– que sin embargo ahora –eso sí: obligados por las circunstancias– sí ven posible y sí se abren por ejemplo a topar el disparado precio del gas, poniendo coto así a los disparados beneficios de las eléctricas para abaratar el disparado recibo de la luz y evidenciando que hasta ahora –y a pesar de que aquel mes de enero del pasado año 2021, en pleno temporal de invierno, el precio del gas y con él los precios del mercado mayorista y el propio recibo de la luz ya estaban en máximos históricos– no es que no se pudiera, es que no se quería.


  1. Virgintz virgintz
    15 de marzo de 2022 01:38 at 01:38
    Tengo muchísimas ganas, que por UNA VEZ, Pedro Sánchez, Presidente de este Gobierno progresista, de alguna buena noticia, por supuesto económica a la clase más desfavorecida de este país. Si se ha conseguido algo, ha sido después de mucho presionar a la parte socialista por Podemos; después el tanto se lo han querido apuntar los socialistas como benefactores de las clases menos pudientes, (que por desgracia son mayoría en España). Ahora ya no hay excusa para reformar la fiscalidad y bajar el precio energético, pero bajando beneficios a las clases más adineradas. Creo que no lo van a hacer. Harán un movimiento de maquillaje pero sin tocar la fiscalidad y seguiremos pagando los mismos de siempre. Y así nos nos irá,perjudicados como siempre.
    Y mientras tanto los conservadores apoyando lo mismo de siempre y Vox ya ni te cuento, subiendo, a causa de un alto porcentaje de votantes, que se creen toda la oleada salvaje de los medios de comunicación interesados y pagados por los más poderosos y que son en el conjunto de radio, prensa y sobre todo televisión, una mayoría de escándalo. ¡¡¡Pena de pais ahogado por la injusticia de siempre !!!
El problema de Sanchez ahora y del PP en el pasado y seguro que en el futuro son las puertas giratorias donde irán muchos de ellos a reposar con las carteras llenas de pasta.

Es una vergüenza lo que hace la parte del Gobierno de Pedro Sanchez. Siempre a rebufo de la izquierda y comprando a los MMPP para que la caña se la den a otros con temas que no vienen a cuento.
 
Bueno señores, pues ya sabemos que la propiedad privada será pública. Si el estado lo cree conveniente o necesario, nos puede expropiar cualquera de nuestras pertenencias.

Actualmente, España está totalmente arruinada, con una deuda descomunal que no podremos pagar ni siquiera con la generación de nuestros nietos.
Así que cuando el estado esté totalmente arruinado, nuestro querido presidente "no tendrá mas remedio" que expropiarnos nuestras propiedades y nuestro dinero ahorrado en el banco.

 
Como los camioneros se planten, son uno de los sectores que mas poder y presión pueden ejercer ya que todos dependemos de ellos.

Si paralizan el país, pueden conseguir hasta un Diésel libre de impuestos a precio de coste.
 
Como los camioneros se planten, son uno de los sectores que mas poder y presión pueden ejercer ya que todos dependemos de ellos.

Si paralizan el país, pueden conseguir hasta un Diésel libre de impuestos a precio de coste.
No creo que aguanten tanto como para conseguir eso, hay que tener mucha voluntad y unión, no veo eso en España creo que irán bajando del carro cuando a cada uno le comvenga en vez de seguir adelante.
 

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