Esta es una anècdota chistosa que leì en 1 revista:
Para evitar una reuniòn obligatoria; James Bunnett alegò tener cita en el hospital. para sustentar su excusa cambiò el nombre de su mujer por el suyo en la cita que enviò el hospital, pero hubo un error en su ingenioso plan: la señora Bunnett tenìa cita con el ginecòlogo; como resultado James pasò 3 meses en prisiòn por quebrantar 1 orden judicial.
No me mires mal, no lo pillo Joseph.