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DESCONTEXTUALIZA Y VENCERÁS
A veces no es necesario realizar un arduo trabajo de restauración para recuperar un mueble olvidado. Basta con sacarlo de su contexto habitual y darle otra función, para que cobre un nuevo sentido. Es lo que se ha hecho con esta antigua mesa decapada, convertida en mueble para lavabo. Ya ves, depende de cómo lo combines o lo integres en tu decoración, esa antigualla puede pasar a ser todo un tesoro gracias al efecto contraste.
Las piezas antiguas cuentan historias y crean rincones muy acogedores, com este, decorado con muebles de la tienda de almonedas La Europea. Tanto el escritorio, pintado de amarillo, como la silla son del siglo XIX y estuvieron a punto de pasar a mejor vida. Suerte de las tiendas y rastrillos que rescatan estos muebles del pasado para hacerlos presentes en decoraciones mix and match.
UN APARADOR CON EFECTO DESGASTADO
Este mueble se ha recuperado gracias a la técnica de desgaste a dos colores. O lo que es lo mismo, se mantiene un tono de fondo y otro encima. Se rasca el primero y el resultado es este: un armario bajo con un desgastado muy decorativo. De la tienda de almonedas La Europea.
Como los gatos, los muebles buenos pueden llegar a tener muchas vidas. Es el caso de esta cómoda gustaviana, que antes daba un aire demasiado clásico al salón y que ahora, tras decaparse y pintarse, aporta al ambiente mucho estilo y calidez.
DESCONTEXTUALIZA Y VENCERÁS
A veces no es necesario realizar un arduo trabajo de restauración para recuperar un mueble olvidado. Basta con sacarlo de su contexto habitual y darle otra función, para que cobre un nuevo sentido. Es lo que se ha hecho con esta antigua mesa decapada, convertida en mueble para lavabo. Ya ves, depende de cómo lo combines o lo integres en tu decoración, esa antigualla puede pasar a ser todo un tesoro gracias al efecto contraste.
Las piezas antiguas cuentan historias y crean rincones muy acogedores, com este, decorado con muebles de la tienda de almonedas La Europea. Tanto el escritorio, pintado de amarillo, como la silla son del siglo XIX y estuvieron a punto de pasar a mejor vida. Suerte de las tiendas y rastrillos que rescatan estos muebles del pasado para hacerlos presentes en decoraciones mix and match.
Antes, a este comedor no había por dónde cogerlo. Mesa de madera oscura, sillas de la abuela, librería sosa... No hace falta continuar. Las patas de la mesa se pintaron de blanco y el sobre se decapó, dejándolo al natural. Las sillas se retapizaron con tela de cuadros vichy, de un rastrillo de Londres. A los apliques se les cambió la pantalla por esta roja tan vibrante. Y la librería, se pintó de rojo con chalk paint para armonizar.
¿Puertas viejas? ¡No las tires!
En este dormitorio podemos ver una solución genial para darle un nuevo uso a puertas antiguas. El cabecero de la cama son dos puertas decapadas que quedan ideal. Y, si te fijas, hay otra puerta de ventana con espejo que se ha puesto en horizontal, con marco blanco, que amplía e ilumina.
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