¿Asesino en serie en la zona de Macastre?

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Leí ayer un artículo sobre los asesinatos de los tres chicos de Macastre en el 89.

Conocía ya el tema desde hace años, y sé que tiene hilo propio, pero me llamó la atención que hubo posteriormente más crímenes en esa misma zona.

De hecho se habló de que pudiese haber un asesino en serie:

El Español

Tras las niñas de Alcàsser, las otras muertes misteriosas en Levante​


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23 octubre, 2016 - 02:48

ACAMPADA MORTAL

Un pastor se sorprendió al ver que su cabaña, donde guardaba los aperos, había sido forzada. Una vez en el interior halló el cadáver de una chica. Al tiempo, a 400 metros de distancia, apareció otro correspondiente a un muchacho. Y después, en un arroyo, un occiso de otra joven a la que le faltaban un pie y una mano.

Los hechos se remontan a inicios de 1989. Francisco Valeriano Flores, de 14 años, su novia Rosario Gayete Moedra, de 15, y su amiga Pilar Ruiz Barriga, de la misma edad, salieron de excursión al monte de Catadau, en Valencia. Llevaban una tienda de campaña con la intención de hacer camping. Nadie volvió a verlos.

Cinco días más tarde se descubrió en su cobertizo el primero de los cuerpos. Estaba tumbado sobre la cama y no mostraba signos de violencia. El pastor creyó que la chica estaba dormida, por lo que la tocó con un pie. Su sorpresa fue mayúscula al comprobar que no se movía.

Tras el funesto hallazgo cundió la alarma y se emprendió una intensa batida por el bosque sin resultado alguno. Casi a los tres meses otro vecino, que andaba buscando espárragos, encontró en las proximidades al adolescente, en avanzado estado de descomposición. Estaba boca abajo, entre unos arbustos, y parecía haberse desplomado. Presentaba aspecto de muerte natural.

A finales de mayo dieron con los restos de Pilar. Estaba a nueve kilómetros del lugar de los hechos. Yacía en una pequeña acequia, junto al río Magro, en el término municipal de Turís. Tenía la cara desfigurada, por lo que sus familiares no pudieron reconocerla. Había sido cuarteada y le faltaban un par de extremidades.

Las investigaciones se incrementaron ante lo que parecía un crimen múltiple. El chaval guardaba en el bolsillo el billete de autobús para llegar hasta Catadau. Terminaron su mortal viaje 30 kilómetros más adelante, en Macastre. La tienda de campaña estaba sin montar, ni siquiera sacada de su funda. Con el frío y el temporal debieron preferir resguardarse en una cabaña.

Existían huellas de una cuarta persona en la caseta y alrededores. Alguien que probablemente los condujo hasta allí. Y que, por supuesto, conocía esa sierra escarpada y traicionera.

Las autopsias no fueron concluyentes y las pesquisas incompletas, por falta de medios de aquella época, lo que condujo a conclusiones dispares. Entre las hipótesis que circularon se habló de que la muerte de Rosario pudo ser por inmersión en agua dulce. Un líquido sanguinolento en sus orificios nasales así parecía señalarlo.

La Policía se inclinaba más por una intoxicación de algún veneno poco conocido que no dejara rastro alguno en el cuerpo. Quizá beleño, lo que provocó una intoxicación mortal de la pareja de novios. La otra chica huyó despavorida ante tales visiones angustiosas.

Circuló otra teoría según la cual Rosario y Francisco habrían sufrido una muerte lenta en la que se les habría obligado a tomar drogas, mientras que Pilar habría sido descuartizada posteriormente.

El cuerpo mutilado de ésta fue lo que creó mayores dudas. Aunque había quienes achacaban tal carnicería a animales carroñeros, el Instituto Nacional de Toxicología confirmó los resultados del primer informe realizado en la clínica forense de Valencia: la pierna de la chica fue cercenada con una sierra mecánica. El cadáver había sido desmembrado, seccionándole un pie y una mano.

Jornadas después de tan extrañas muertes apareció una mano, al parecer de mujer, sobre un banco situado junto a una marquesina de una parada de autobuses en Valencia. Al día siguiente una señora encontró un pie amputado, supuestamente de Pilar, en el interior de un contenedor de basuras en la calle Alcàsser, también en la capital valenciana. Había sido cortado unos seis centímetros por encima del tobillo.

Hubo una llamada a Protección Civil comunicando que habían visto arrojar un bulto grande en donde apareció dicho resto humano. El anónimo denunciante facilitó incluso el nombre del sospechoso, que fue detenido e interrogado por la Guardia Civil. Negó cualquier relación con las extrañas muertes y quedó en libertad por falta de pruebas.

El hecho de que las víctimas fueran hijos de familias humildes y desestructuradas contribuyó a que el caso no tuviera el eco periodístico necesario y se fue diluyendo en el olvido con el paso del tiempo. Los padres no pudieron conseguir que se realizaran después nuevas autopsias y análisis de ADN. Resultaba más fácil echarle la culpa al consumo de plantas alucinógenas, pese a que los médicos no detectaron rastros de estupefacientes en sus organismos. Faltó presión social y mediática para darle una vuelta de tuerca a la investigación.
 
Es por la siguiente parte del artículo por la que he separado el tema del de Macastre:

CRÓNICA NEGRA DE UN PUEBLO​


Unos meses antes de que el caso prescribiera en 2009, Macastre volvió a ser escenario de otro tétrico hallazgo. En un paraje agreste próximo a un área residencial, a unos 10 kilómetros del casco urbano, una alimaña extrajo una pierna. Era el cuerpo desnudo de una joven asesinada a golpes, a la que le habían aplastado la cabeza. La inaccesibilidad del terrero hizo pensar que, quien la sepultó, conocía perfectamente el emplazamiento. Un trozo de sujetador condujo a la identificación de la víctima. Se trataba de Leidy V. M., una colombiana de 17 años, que había desaparecido de una población próxima.

Algo similar había ocurrido a principios de 2001
cuando un trabajador revisaba los contadores de luz en unas viviendas de dicha localidad. De pronto halló una bolsa de plástico en cuyo interior había un cráneo y varios huesos más. El estudio forense determinó que habían sido cortados con una sierra u otra herramienta de parecidas características. Otra muerte sin aclarar.

Empezó a hablarse de un descuartizador. Incluso de un asesino en serie, dados los crímenes ocurridos por allí. Todo un puzle sangriento.

El nombre de esta localidad valenciana está escrito con letras mayúsculas en la historia negra de España. Un pequeño municipio de unos 800 habitantes en la época que sucedieron dichos sucesos. El alcalde de entonces, Vicente Romero, que rigió su destino durante 20 años, se lamenta de la situación: “El pueblo se encuentra molesto porque nos sacan en la tele cuando pasa algo malo. Lógicamente tienen que acordarse de estos hechos que no están cerrados. Ya nos gustaría que alguien explicase lo que ocurrió aquí. Y que todo el mundo se quedara tranquilo”.

El balance de los años 1988 y 1989 fue aterrador. Además de las tres víctimas citadas, en la Comunidad Valenciana desaparecieron otras chicas de edad similar y de las que no se ha vuelto a saber nada.
 
Se trataba de Leidy V. M., una colombiana de 17 años, que había desaparecido de una población próxima
Esta chica creo que es la que se ha reabierto la causa hace poco contra su padrastro y otros dos o tres hombres:


Solicitan nuevas pruebas en el caso del crimen de Leidy Vanessa​

La acusación quiere citar como testigo a la hermana de la fallecida hallada enterrada en Macastre en 2008 para saber la relación de la adolescente con su padrastro​

Ignacio Cabanes
Reabren la causa por el asesinato de Leidy Vanessa, la adolescente de 17 años enterrada en MacastreIgnacio Cabanes
La aparición en escena del cuarto investigado por el que ha estado parada la causa del asesinato de Leidy Vanessa durante seis años y medio ha permitido reabrir el caso por el brutal crimen de la adolescente de 17 años hallada enterrada en un paraje de Macastre en 2008. En el próximo paso será, según ha podido saber Levante-EMV, la solicitud de la práctica de nuevas diligencias en busca de pruebas que sustenten la acusación que pese sobre el padrastro de la joven como presunto autor material de su asesinato, así como contra los otros posibles implicados en la desaparición, muerte y posterior ocultamiento del cadáver de Leidy. Además de Omar P. M. figuran como investigados otros tres hombres, los dos que presuntamente le ayudaron a enterrar el cuerpo, y el jefe de Omar con el que se encontraba trabajando la mañana en la que desapareció la menor.

Así, la acusación particular, ejercida por el letrado Jorge García-Gasco, en representación de la madre de la víctima, va a solicitar que se le tome declaración en calidad de testigo a la hermana Leidy Vanessa, que en el momento de los hechos tenía apenas doce años, pero que podría aportar luz sobre la relación que su padre biológico tenía con su hijastra. Varios testigos ya declararon en su día que éste sentía una atracción sexual hacia la menor, a la que vigilaba incluso con una microcámara en la habitación escondida en una bota.

De igual modo, «vamos a pedir al juzgado para que se oficie a la policía en caso de que haya nuevas técnicas de revelación de vestigios y averiguación de elementos probatorios más modernas y más actuales, para que se vuelvan a hacer pruebas a los objetos que se encontraron en la inspección ocular», explica el abogado de la familia. «Nuestra intención es que se investigue todo lo posible y se llegue hasta las últimas consecuencias, un delito de estas características, tan serio y tan grave, no puede quedar bajo ningún concepto sin resolver», remarca.


teresa domínguez | valencia

Aunque no quieren hablar de desidia, tanto el letrado de la acusación como la madre de Leidy no se explican cómo durante estos seis años y medio que ha estado parada la causa no se había podido localizar a esta persona, a quien se situaba en Colombia, pero que ha estado entrando y saliendo del país sin problema ni impedimento alguno.

Fabián R. G., el investigado que estaba en paradero desconocido, a su salida de los juzgados de Requena.

Fabián R. G., el investigado que estaba en paradero desconocido, a su salida de los juzgados de Requena.

El cuarto investigado, sobre el que pesaba unaorden internacional de averiguación de paradero, en vez de una orden de búsqueda y detención, se acogió el martes a su derecho a no declarar ante el juez de Instrucción tres de Requena que lleva el caso. Tuvo que ser la madre de Leidy Vanessa, quien rastreando en redes sociales, lo localizara y facilitara la información a la policía para que el hombre por el que se había archivado la causa hasta su localización, fuera llevado ante la Justicia. Los cuatro investigados permanecen en libertad.
 
Esta chica creo que es la que se ha reabierto la causa hace poco contra su padrastro y otros dos o tres hombres:


Solicitan nuevas pruebas en el caso del crimen de Leidy Vanessa​

La acusación quiere citar como testigo a la hermana de la fallecida hallada enterrada en Macastre en 2008 para saber la relación de la adolescente con su padrastro​

Ignacio Cabanes
Reabren la causa por el asesinato de Leidy Vanessa, la adolescente de 17 años enterrada en MacastreIgnacio Cabanes
La aparición en escena del cuarto investigado por el que ha estado parada la causa del asesinato de Leidy Vanessa durante seis años y medio ha permitido reabrir el caso por el brutal crimen de la adolescente de 17 años hallada enterrada en un paraje de Macastre en 2008. En el próximo paso será, según ha podido saber Levante-EMV, la solicitud de la práctica de nuevas diligencias en busca de pruebas que sustenten la acusación que pese sobre el padrastro de la joven como presunto autor material de su asesinato, así como contra los otros posibles implicados en la desaparición, muerte y posterior ocultamiento del cadáver de Leidy. Además de Omar P. M. figuran como investigados otros tres hombres, los dos que presuntamente le ayudaron a enterrar el cuerpo, y el jefe de Omar con el que se encontraba trabajando la mañana en la que desapareció la menor.

Así, la acusación particular, ejercida por el letrado Jorge García-Gasco, en representación de la madre de la víctima, va a solicitar que se le tome declaración en calidad de testigo a la hermana Leidy Vanessa, que en el momento de los hechos tenía apenas doce años, pero que podría aportar luz sobre la relación que su padre biológico tenía con su hijastra. Varios testigos ya declararon en su día que éste sentía una atracción sexual hacia la menor, a la que vigilaba incluso con una microcámara en la habitación escondida en una bota.

De igual modo, «vamos a pedir al juzgado para que se oficie a la policía en caso de que haya nuevas técnicas de revelación de vestigios y averiguación de elementos probatorios más modernas y más actuales, para que se vuelvan a hacer pruebas a los objetos que se encontraron en la inspección ocular», explica el abogado de la familia. «Nuestra intención es que se investigue todo lo posible y se llegue hasta las últimas consecuencias, un delito de estas características, tan serio y tan grave, no puede quedar bajo ningún concepto sin resolver», remarca.


teresa domínguez | valencia

Aunque no quieren hablar de desidia, tanto el letrado de la acusación como la madre de Leidy no se explican cómo durante estos seis años y medio que ha estado parada la causa no se había podido localizar a esta persona, a quien se situaba en Colombia, pero que ha estado entrando y saliendo del país sin problema ni impedimento alguno.

Fabián R. G., el investigado que estaba en paradero desconocido, a su salida de los juzgados de Requena.

Fabián R. G., el investigado que estaba en paradero desconocido, a su salida de los juzgados de Requena.

El cuarto investigado, sobre el que pesaba unaorden internacional de averiguación de paradero, en vez de una orden de búsqueda y detención, se acogió el martes a su derecho a no declarar ante el juez de Instrucción tres de Requena que lleva el caso. Tuvo que ser la madre de Leidy Vanessa, quien rastreando en redes sociales, lo localizara y facilitara la información a la policía para que el hombre por el que se había archivado la causa hasta su localización, fuera llevado ante la Justicia. Los cuatro investigados permanecen en libertad.
Bueno, en cualquier caso tanto Macastre, como los restos que se hallaron en el año 2001, y que luego los forenses determinaron que habían sido cercenados con una sierra u otro instrumento similar (al igual que el cadáver de Pilar.
 
Bueno, en cualquier caso tanto Macastre, como los restos que se hallaron en el año 2001, y que luego los forenses determinaron que habían sido cercenados con una sierra u otro instrumento similar (al igual que el cadáver de Pilar.
Perdona @Loquedigalarubia se cortó el mensaje.

Decía que, en cualquier caso, esos cuatro crímenes siguen sin resolverse.

También llama la atención que, en el caso de los restos hallados en el año 2001, también se hubiesen mutilado con una sierra u otro instrumento parecido.
 
Perdona @Loquedigalarubia se cortó el mensaje.

Decía que, en cualquier caso, esos cuatro crímenes siguen sin resolverse.

También llama la atención que, en el caso de los restos hallados en el año 2001, también se hubiesen mutilado con una sierra u otro instrumento parecido.
Sorry primo, que igual he cortado el rollo.
Es que el caso de esta chica lo recordaba de haber leído hace poco las novedades en prensa y porque algo me líaba entre este caso y los que le achacaban a Jorge Ignacio Palma y al asesino de Wafaa.
De Macastre algo me he informado.
¡Del caso de 2001 ni idea!
 
Sorry primo, que igual he cortado el rollo.
Es que el caso de esta chica lo recordaba de haber leído hace poco las novedades en prensa y porque algo me líaba entre este caso y los que le achacaban a Jorge Ignacio Palma y al asesino de Wafaa.
De Macastre algo me he informado.
¡Del caso de 2001 ni idea!
No, no, para nada. Cuanta más información, mejor. De hecho, yo no sabía que en el caso de esa chica se sospechó del padrastro.

Igual es casualidad, pero llama mucho la atención que en 2001, también en Macastre, se encontrase una bolsa con restos humanos cortados con una sierra, tal y como sucedió con una de las chicas de aquella acampada.
 
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