Mi hermano se presenta en casa con una perla, como la Carrasco, entre los 18 y los 23 años, y nos da un parranque. El dinero no lo es todo en una relación. Ayuda y facilita, pero no compra el afecto ni el respeto.
Esta señorita no tenía un oficio, por no tener, ni unos estudios básicos terminados, porque no quiso y sus padres no la enderezaron.
Demostraba ser muy vaga para todo. Puedes ser vaga para los libros, pero tampoco tenía curiosidad por nada, ni se puso a aprender un oficio, como le aconsejó su padre, PC. No limpiaba la casa, ni hacía la compra. Reproches de su primer marido. Se levantaba tarde de la cama.
Si RJ madre no pasaba dinero, se lo reprochaba, pero es que la pobre criatura no se había planteado pedir un trabajo, para ayudar a la economía familiar. Así que empezó a vender sus miserias y las monerías de su bebé, era una muñeca preciosa. En Tómbola, se superó en su arrogancia, ella vivía de su madre. Los periodistas chinchan y ella cayó en la trampa fácil.
Mientras que AD. había terminado el bachillerato y aprobado la oposición. Era el hijo pequeño de una familia normal. Ya estaba trabajando con esa edad y vivía con otros compañeros de su cuerpo. Era un chico mono. No es una defensa a este señor, pero las cosas como son.
Lo dicho. Menuda joya de novia y de esposa. La familia de AD. estaba preocupada por él. Así lo dijeron el día de la boda. Eran una familia normal, con sus luces y sus sombras. Menuda cruz que les cayó.
PC, que pecó de padre ausente y padre blando, estaba preocupado. Su cara era un poema. RJ era más de cuidar las apariencias y el qué dirá la gente.
Esa normalidad le ha hecho escoger una mujer estupenda como compañera de vida. Han creado un hogar NORMAL, ni santos, ni demonios, en el que los hijos mayores se sentían y se sienten a salvo, apoyados y tranquilos.
Olga era una chica joven, con estudios terminados, con una familia normal, que había trabajado y trabajaba, con buen carácter y sospecho que con mucho genio.
En resumen. Esta señorita, RC, nadaría en piscinas de dinero, pero una familia normal la rechazaría, aunque no tuvieran más remedio que respetar la decisión de la persona que la elige como esposa y madre de sus hijos.
¿Qué chaval se iba a enamorar de esa joya de jovencita?.
el padre de la nini, Pedro Carrasco, que era un señor de los pies a la cabeza, le pidió al novio que no se casara con su hija, quería que fueran novios pero nada más....
y el guardia civil dijo que nanai…
iba a por el braguetazo...