Si uno no se siente respetado o valorado por una amistad es mejor cortar. Nadie tiene que aguantar a nadie, igual que te pueden decir algo fuera de lugar con buena intención también el comentario puede venir envenenado, y eso se sabe conociendo al otro. Cuando algo me molesta prefiero aclarar las cosas que luego se me enquistan, pero si ya ves de qué palo va el otro que lo único que busca es hacerte sentir mal solo porque se siente por debajo o por encima pues adiós muy buenas.Hay diferencias o matices entre juzgar y dar consejos no pedidos.
En cuanto a los consejos no pedidos entra en juego nuestra forma de ser, lo que aceptamos y lo que no, la forma de ser de la otra persona. Hay en días que un consejo no pedido lo puedes tolerar y saber que te lo dicen a buena fe, sin embargo en otros días te sienta fatal y te parece de metome en todo.
Sobre juzgar, es decirte cosas tan simples como que no sabes criar a tus hijos, que tu trabajo lo podría hacer cualquiera, que si te han ofrecido X a ti también se lo podrían ofrecer a ella, que te inventas tus enfermedades, etc. Eso desde luego no es un consejo y tampoco va con la mejor de las intenciones. Básicamente es quitarte valor como persona y todas las personas nos merecemos que nos respeten.
Después no nos podemos olvidar la malicia oculta tras un supuesto consejo.