Efectivamente, yo también creo que acumuló muchas cosas, demasiadas, y la decoración no era su fuerte, jeje, pero bien que les vendrá ahora a sus hijos y a sus fans semejante acumulación de cuadros, esculturas y cacharritos de todo tipo.Se gastó una millonada en esas compras, algo de esperar en una persona que nació pobre y juntó más dinero de lo que soñó, cuando era una muchacha de orígenes humildes. Acumulaba cosas y cosas. Cosas que no valen nada o poco, en realidad.
Me gustaría ver los objetos art nouveau y art decó y la colección de galleteras, bueno, y las pinturas también.
Yo creo que la mayoría de las cosas sí que tienen valor económico, aunque como lo veíamos todo junto y acumulado como en una chamarilería, no éramos capaces de verlo y parecía moralla. Me imagino que muchas cosas eran regalos de años y años.
Tengo a Sara Montiel por una persona inteligente y sensata, que aunque empezó a ganar mucho dinero desde bien jovencita y vivió toda su vida como una diva, no renunció nunca a sus orígenes ni se avergonzó de ellos, como hacen otras personas.
Me gusta que en Campo de Criptana haya un museo en su honor y que los hijos hayan aportado cosas interesantes de su madre sin que haya habido dimes y diretes como con el de Rocío Jurado o con aquel otro que se quiso hacer en la casa marbellí de Lola Flores.
La gente joven conoce a Sara Montiel por su boda con el cubano y su ¿pero qué invento es esto?, pero hay que reconocer que triunfar en el cine y llegar a Hollywood, casarse con un director y relacionarse con las estrellas de la época, tiene muchímo mérito.
Si hubiese nacido en EEUU hoy sería recordada como una estrella similar a Elisabeth Taylor.