Que la consorte Leticia sea desastrosa, no convierte a la otra en maravillosa.
Lo que demuestra es que el elector no tiene el gusto educado y que no es
consciente de las responsabilidades del cargo vitalicio y hereditario que ocupa.
Es un irresponsable y un débil de carácter.
Lo que demuestra es que el elector no tiene el gusto educado y que no es
consciente de las responsabilidades del cargo vitalicio y hereditario que ocupa.
Es un irresponsable y un débil de carácter.