La «tonta» según algunos tiene mejor prestancia, saber estar e inteligencia emocional que muchas «listas» Sabe adaptarse a las situaciones, saluda con afecto, comparte una caña si hay que hacerlo y vive como nadie las desgracias y las alegrías de su país, no tiene complejos de sentirse española o llevar su bandera. Cuando su matrimonio hizo aguas se divorció discretamente y así siguen. Sus hijos la adoran lo que dice mucho de ella, es buena hermana y adora a sus padres. Tengo para mí que es una persona de buenos sentimientos. Una pena que le gusten los toros «yo los detesto» pero es tradición en su familia donde a la mitad les ha gustado y a la otra mitad no durante siglos. Yo me quedo con Elena cualquier día del año.