Isabel Díaz Ayuso presidenta de la CCAA Madrileña


Pongamos que hablo de un nuevo tamayazo

Pongamos que hablo de un nuevo tamayazo
Ignacio Aguado, Eduardo Tamayo, Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso.
Permanecerá indeleble en mi memoria el día en el que Francisco Granados nos narró en OKDIARIO cómo en 2009 le ordenaron desde arriba resolver el marronazo que se le había planteado al PP de Madrid al resurgir cual monstruo del Lago Ness un Eduardo Tamayo que se antojaba en el baúl de los recuerdos desde que aquel 10 de junio de 2003 diera la espantada en la investidura de Rafael Simancas. El a la sazón consejero de Presidencia aceptó, leal hasta el paroxismo como era, las instrucciones de un Ignacio González que era el pecado original de un aguirrismo que fue tan sobresaliente en la gestión como extraordinariamente deficiente en el respeto a la ética en la vida pública.
“Tamayo se presentó en la sede del PP para exigir el dinero que se le debía de los 3 millones que se acordaron con él a cambio de cargarse el salto a la Presidencia regional de Rafael Simancas”, rememora en público (lo hizo en la primera entrevista concedida a la salida de la cárcel en OKDIARIO) y apuntala en privado. Y allá que se fue el obediente soldado de Valdemoro a negociar con el chantajista que cambió el curso de la historia de Madrid. Pidió suelo urbanizable en Villaviciosa de Odón y vaya usted a saber si se lo dieron o no, el caso es que jamás volvió a decir esta boca es mía ni a poner encima de la mesa ofertas padrinescas de ésas que no se pueden rechazar. Se hizo el silencio. Y hasta hoy…
Lo cierto es que las maniobras orquestales en la oscuridad las ejecutó el sinvergüenza de Ignacio González, el cerebro de Lezo, el dueño de ese ático adquirido a través de una sociedad radicada en el paraíso fiscal de Delaware. Su amoralidad le permitió acometer una tarea que parecía imposible tras las elecciones autonómicas de 2003: darle la vuelta a una investidura para la que no salían los números ni por equivocación. Tal vez por eso nadie le tosió en 12 años de mangancia en la Comunidad de Madrid.


El caso es que el tan honrado como ahora radicalizado Rafael Simancas se quedó sin el sueño de su vida, la Presidencia de la Comunidad de Madrid, y sin esos siete trajes que se hizo para el nuevo cargo, prendas que acabaron en el trastero de su humilde hogar. El leganense de Alemania, hijo de la emigración, no pudo imaginar ni por lo más remoto que a un partido de estricta obediencia como era y es el PSOE se le escapase la Comunidad más preciada de España. Una región que en aquel entonces llevaba ocho años en manos del PP, una minucia al lado del cuarto de siglo transcurrido ya desde que Alberto Ruiz-Gallardón conquistase para el partido de José María Aznar una institución que se le resistía cual gato panza arriba desde el banderazo de salida de la autonomía allá por 1983.
Primero se trataba de destrozar la imagen de Ayuso. Lo intentaron hasta la extenuación retratándola como una incompetente


PUBLICIDAD

La tan brutal como burda cacería de Isabel Díaz Ayuso, desatada en marzo para culparla de una pandemia en España (manda huevos) que tiene un único culpable, el desahogado de Pedro Sánchez, tiene sus timings. Primero se trataba de destrozar su imagen. Lo intentaron hasta la extenuación poniéndola de chupa de dómine, retratándola como una incompetente que había permitido que Madrid batiera récords de Covid. Cuando en honor a esa verdad que tanto desprecia esta gentuza hay que recordar que ella no autorizó la barra libre en el aeropuerto de Barajas ni ese 8-M que multiplicó por cinco la incidencia de una pandemia que, de no haber sido por ese capricho se hubiera quedado en las estadísticas de Portugal, Grecia, Alemania, Corea del Sur o Taiwán.
El segundo episodio de esta campañeja del listillo de Iván Redondo pasaba por equiparar a la presidenta madrileña a los ojos de la opinión pública a una corrupta. Su autoaislamiento en un hotel del gran Kike Sarasola generó más noticias que los ERE de Andalucía, el robo de 680 millones de euros, cantidad menor donde las haya como todo el mundo sabe. El quid del nuevo montaje antiAyuso consistía en que el hijo de Pitxirri, el íntimo de Felipe González, había regalado la estancia a la presidenta madrileña. Cuando se demostró que había pagado, 80 euros diarios exactamente, los medios de argumentario monclovita se cogieron un mosqueo de tres pares de narices. Y, pasadas unas horas, había que dar tiempo a que Redondete le diera al coco, volvieron a la carga. “Cobrar 80 euros por una habitación que vale 200 también es corrupción”, argumentaban al unísono los chicos de Iván. Olvidaban que el resto de clientes astillaba la misma cantidad y que con Madrid confinado, con tres clientes, un hotel no podía cobrar lo que se cobraba en los buenos tiempos. Un detalle sin importancia. La polémica quedó zanjada cuando un servidor, tirando de ironía para desmontar tamaña tontería, sentenció en La Sexta Noche: “Aquí el que ha estafado ha sido Sarasola a Ayuso, ¡cómo puedes cobrar 80 euros por una habitación cuando tienes todo el hotel vacío!”. La gente se desternilló, los Iván boys quedaron en ridículo y a otra cosa, mariposa.
La madrileño-abulense ganó el primer round. Pero como no es la tonta que nos intentan presentar sino tan lista como la mejor Esperanza Aguirre, se puso los guantes de boxeo a la espera de un combate que antes o después acabaría por llegar. El diario del Ibex El País relató con todo lujo de detalles el conciliábulo presidido por Pedro Sánchez, con Redondete de consejero áulico, en el que se fulminó de facto a Ángel Gabilondo por “blando” y en el que se pergeñó la operación matemos a la soldada Ayuso. Lo intentaron en agosto pero no les salían las cifras: Aragón y Cataluña estaban disparados en contagios, Madrid no, Madrid aguantaba los embates del puto virus razonablemente bien. La maldad de esta banda resolvió lo que la madre naturaleza se resistía a cambiar. Mantuvieron abiertas de par en par las puertas del aeropuerto de Barajas, donde el Covid entraba como Pedro por su casa, no pidieron PCR a ni dios y en unas semanas el cristo estaba montado. Tan sencillito como eso.
Los rumores de moción de censura se esparcieron como la mierda por parte de los líderes del PSOE y de sus periodistas de cámara
Y fue aquí donde aparecieron todas las ratas que durante tantos meses habían permanecido escondidas. La presidenta ordenó restricciones a la movilidad en las zonas más afectadas el 18 de septiembre, nada más certificar que el coronavirus se volvía a ir de madre. El Frente Popular bramó con esa repugnante excusa de mal pagador que supone asegurar que semiconfinó los barrios más humildes mientras los “más ricos seguían pegándose la vida padre”. A Ayuso, que no es una cayetana sino una hija de la clase media, muy media, le importaba un comino el nombre de los barrios. Su único punto de referencia eran, y son, como no puede ser de otra manera, las estadísticas. Y donde había tsunami, limitó los movimientos, y donde ni estaba ni se le esperaba, dejó hacer para no agravar una crisis que de momento se ha llevado por delante 200.000 empleos en la región de Madrid, sin contar los cientos de miles que aparecerán de sopetón cuando se coloque el The end a esos ERTE que no son un chicle que se puede estirar hasta el infinito.
Los rumores de moción de censura se esparcieron como la mierda por parte de los líderes del PSOE y de sus periodistas de cámara. Un leve desencuentro entre Ayuso y su vicepresidente Aguado se vestía como una encarnizada pelea Tyson-Holyfield. Y, entre tanto, a Arrimadas se le hacían mil y un guiños desde Moncloa y la antaño gran esperanza blanca caía cual pichona en cada uno de ellos. Se presentaba por la mañana como la reencarnación de Adolfo Suárez y por la tarde su nueva pareja política, Pedro Sánchez, se acostaba con el terrorista Arnaldo Otegi. Al día siguiente volvía a mostrarse servil y su nuevo socio le respondía dándose el pico con los golpistas catalanes. Ésos que la amenazaban, insultaban, escupían y pegaban hace no tanto. Esos matones que acabaron por echarla de Cataluña.
El cerrojazo gubernamental a Madrid, que agravará exponencialmente nuestra ruina, y la dimisión anteayer de Alberto Reyero, el tramposo consejero de Asuntos Sociales, un personaje que parece salido de la obra cervantina Rinconete y Cortadillo, permite adivinar por dónde van a ir las cosas. El individuo deja la Consejería pero no el escaño, con la cual el PSOE, Más Madrid y Podemos se quedan a dos de su sueño golpista. Teniendo en cuenta que Arrimadas está rodeada de partidarios de pactar con el PSOE (Carlos Cuadrado y José María Espejo fundamentalmente), seguramente porque saben que Ciudadanos se hunde cual Titanic de cartón piedra y quieren pillar cacho, los augurios no son precisamente los mejores para la supervivencia de un Ejecutivo autonómico de centroderecha que está gobernando con moderación, sensatez y respetando esa baja presión fiscal que ha hecho de Madrid la región más rica de España.
A continuación, sin solución de continuidad, surgen varios interrogantes: ¿se atreverán Arrimadas y cía a ser los socios en Madrid y a nivel nacional del socio de Otegi, Iglesias y Junqueras? ¿Compartirán moción de censura con el bolivariano Errejón y con la delincuente Isa Serra, condenada a 17 meses de cárcel por atacar a la Policía (si no, aritméticamente es física y metafísicamente imposible)? ¿Han pactado ya la Presidencia para Aguado a cambio de que triunfe el golpe de Estado o del Estado (que ya no sé muy bien de qué se trata) contra Ayuso? ¿Está habiendo movimiento de maletines? ¿Se están prometiendo cargos, que es una forma tan dudosamente legal como claramente inmoral de sobornar a un político? Ahí los dejo. Yo concluyo sabinianamente: pongamos que hablo de un nuevo tamayazo en Madrid. Las cosas son normalmente lo que parecen. Si es como un pato, anda y nada como un pato y dice “cuá-cuá”, es un pato. Veremos si se atreven. Poderoso caballero es don dinero.

 

Vox alega en la solicitud de cautelarísimas que el cierre de Madrid responde a una decisión política y no científica
El recurso indica que las restricciones "implican limitaciones severas de derechos fundamentales" e invaden competencias autonómicas.
Libertad Digital
2020-10-03
7
[IMG alt="El recurso indica que las restricciones implican limitaciones severas de derechos fundamentales e invaden competencias autonómicas.
"]https://s.libertaddigital.com/2020/10/03/954/0/rocio-monasterio-vox-audiencia-nacional.jpg[/IMG]

La portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Madrid | EFE
Vox ha presentado este sábado una solicitud de medidas cautelarísimas ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) contra la orden de Sanidad con medidas limitativas de la movilidad en la capital y otras nueve grandes ciudades de la Comunidad de Madrid al considerar que se basa en una decisión política y no científica.
"Ni el acuerdo del Consejo Interritorial del Sistema Nacional de Salud ni, en consecuencia la Orden del Ministro refieren en sus textos ningún estudio científico preciso que justifique la adopción de las medidas. Presentan la apariencia de ser más políticas que científicas", se recoge en el recurso presentado hoy por Vox.
A partir de la admisión de las cautelarísimas los jueces tienen hasta 48 horas para resolver, pero de vencer el plazo antes de su resolución, las medidas entrarían en vigor. Posteriormente, de ser aceptadas las medidas cutelarísimas mediante un auto, quedarían en suspenso hasta la emisión de una sentencia.


La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, acompañada de diputados regionales, ha acudido este sábado al TSJM para presentar este recurso y, en declaraciones a los periodistas, ha trasladado que el objetivo es "defender a los madrileños contra las medidas de Sánchez".
"Creemos que no son eficaces para proteger Madrid y son inapropiadas y no están correctamente redactadas. Creemos que los madrileños no pueden estar esperando diez días a las medidas cautelares", ha enfatizado la líder de Vox en Madrid.
En el texto presentado, esgrimen que las medidas presentan la apariencia de ser "más políticas que científicas", lo que "redunda en la duda de su necesidad y proporcionalidad con mayor motivo cuando implican limitaciones severas de derechos fundamentales".
Con arreglo el articulo 65.1 de la ley 16/2003 el Ministerio de Sanidad, consideran, "pudo tomar las medidas estrictamente necesarias" por "razón de urgente necesidad sin previo acuerdo del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud" porque es "la propia orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 en la que invoca como fundamento propio el acuerdo del consejo interterritorial del sistema Nacional de Salud de la misma fecha".
Asimismo, sostienen que "es igualmente dudosa la validez de la orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 en los términos en que se pronuncia porque se adentra en materia que es "competencia de la Comunidad de Madrid con arreglo al artículo 55 de la ley 12/2001 de 21 de diciembre de ordenación sanitaria de la Comunidad de Madrid".
Además, en el recurso esgrimen que "en la Comunidad de Madrid ya ha adoptado amplias medidas con la misma finalidad preventiva que es la de la orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 a través de las órdenes 668/2017 de 19 de junio 1178/2011 de 18 de septiembre y 1200 26/2020 de 25 de septiembre todas de la Consejería de Sanidad de Madrid "habiendo llegado a disponerse medidas específicas de control y prevención de la enfermedad en 37 zonas básicas de salud de la Comunidad de Madrid, a los efectos de evitar una expansión incontrolada de la enfermedad causada por el covid-19 y proteger a la población del riesgo de contagio".

 
Vox alega en la solicitud de cautelarísimas que el cierre de Madrid responde a una decisión política y no científica
El recurso indica que las restricciones "implican limitaciones severas de derechos fundamentales" e invaden competencias autonómicas.
Libertad Digital
2020-10-03
7
[IMG alt="El recurso indica que las restricciones implican limitaciones severas de derechos fundamentales e invaden competencias autonómicas.
"]https://s.libertaddigital.com/2020/10/03/954/0/rocio-monasterio-vox-audiencia-nacional.jpg[/IMG]

La portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Madrid | EFE
Vox ha presentado este sábado una solicitud de medidas cautelarísimas ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) contra la orden de Sanidad con medidas limitativas de la movilidad en la capital y otras nueve grandes ciudades de la Comunidad de Madrid al considerar que se basa en una decisión política y no científica.
"Ni el acuerdo del Consejo Interritorial del Sistema Nacional de Salud ni, en consecuencia la Orden del Ministro refieren en sus textos ningún estudio científico preciso que justifique la adopción de las medidas. Presentan la apariencia de ser más políticas que científicas", se recoge en el recurso presentado hoy por Vox.
A partir de la admisión de las cautelarísimas los jueces tienen hasta 48 horas para resolver, pero de vencer el plazo antes de su resolución, las medidas entrarían en vigor. Posteriormente, de ser aceptadas las medidas cutelarísimas mediante un auto, quedarían en suspenso hasta la emisión de una sentencia.


La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, acompañada de diputados regionales, ha acudido este sábado al TSJM para presentar este recurso y, en declaraciones a los periodistas, ha trasladado que el objetivo es "defender a los madrileños contra las medidas de Sánchez".
"Creemos que no son eficaces para proteger Madrid y son inapropiadas y no están correctamente redactadas. Creemos que los madrileños no pueden estar esperando diez días a las medidas cautelares", ha enfatizado la líder de Vox en Madrid.
En el texto presentado, esgrimen que las medidas presentan la apariencia de ser "más políticas que científicas", lo que "redunda en la duda de su necesidad y proporcionalidad con mayor motivo cuando implican limitaciones severas de derechos fundamentales".
Con arreglo el articulo 65.1 de la ley 16/2003 el Ministerio de Sanidad, consideran, "pudo tomar las medidas estrictamente necesarias" por "razón de urgente necesidad sin previo acuerdo del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud" porque es "la propia orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 en la que invoca como fundamento propio el acuerdo del consejo interterritorial del sistema Nacional de Salud de la misma fecha".
Asimismo, sostienen que "es igualmente dudosa la validez de la orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 en los términos en que se pronuncia porque se adentra en materia que es "competencia de la Comunidad de Madrid con arreglo al artículo 55 de la ley 12/2001 de 21 de diciembre de ordenación sanitaria de la Comunidad de Madrid".
Además, en el recurso esgrimen que "en la Comunidad de Madrid ya ha adoptado amplias medidas con la misma finalidad preventiva que es la de la orden del ministro de 30 de septiembre de 2020 a través de las órdenes 668/2017 de 19 de junio 1178/2011 de 18 de septiembre y 1200 26/2020 de 25 de septiembre todas de la Consejería de Sanidad de Madrid "habiendo llegado a disponerse medidas específicas de control y prevención de la enfermedad en 37 zonas básicas de salud de la Comunidad de Madrid, a los efectos de evitar una expansión incontrolada de la enfermedad causada por el covid-19 y proteger a la población del riesgo de contagio".

Ah bueno, si lo dice un partido tan moderado y para nada alarmista como Vox me lo creo.
 
Ah bueno, si lo dice un partido tan moderado y para nada alarmista como Vox me lo creo.
No lo dice, denuncia y ya dirá el TSJM. Tres tazas
Y por cierto las cautelarísimas son muy rápidas. Las cautelares de la AN diez días.

LOS MAGISTRADOS DECIDIRÁN EN 10 DÍAS SOBRE LAS CAUTELARES

La Audiencia Nacional admite el recurso de la popular Ayuso contra el ‘decretazo’ de Sánchez
 


Crítico por la situación sanitaria
El consejo de Wyoming a Ayuso para que se cure del 'síndrome de Dori': "Si olvida su labor escríbala en un post-it"
El Gran Wyoming critica en este vídeo los bandazos en la negociación de la Comunidad de Madrid en la aplicación de restricciones por coronavirus: "Cada día hace grandes proclamas sobre la necesidad de colaborar y a los cinco segundos les da el síndrome de Dori".

laSexta.com
Madrid
Publicado:Jueves,01 octubre, 202021:53
MÁS INFORMACIÓN
El Gran Wyoming ha presentado en El Intermedio uno de los inventos más maravillosos para recordar las cosas del día a día: el post-it. Y es que la memoria humana es frágil, y a veces nos olvidamos de cosas.
Algunos, como Leonardo DiCaprio, se olvidan de su Oscar en un restaurante. Pero el Gobierno de Madrid va más allá: "Cada día hace grandes proclamas sobre la necesidad de colaborar y a los cinco segundos les da el síndrome de Dori".
El Gran Wyoming ha explicado el caso de la Comunidad con el ejemplo del pez que acompañaba al padre de Nemo a buscar a su hijo pero que, desgraciadamente, se olvidaba de dónde venía y hacia dónde iba cada cinco segundos.
"Como persona mayor que empieza a perder la memoria les recomiendo que si se les olvida su labor escriban en un post-it: 'urgente frenar la pandemia", ha apostillado el presentador.

Otro momento destacado

El Gran Wyoming también defiende en El intermedio la creación del 'Partido Nacionalista Madrileño' para "madrileñizar" a todos los españoles.

64.jpg


Acabar con las playas o atascos obligatorios: Wyoming desvela las propuestas del 'nuevo' partido que "representa el pensamiento de Ayuso" | laSexta.com

LaSexta / Programas de Tv / El Intermedio / Revista de medios
 
64.jpg


Estas son las polémicas frases de Díaz Ayuso que dan a la vez "risa y miedo" | laSexta.com


Así defiende Ayuso que el plan de Madrid lo siguen en Estados Unidos, el país con más víctimas por la pandemia
"Es la Trump española. Solo le faltaba hacer algunos muros en los barrios y pedir que lo paguen los de Vallecas", asegura El Gran Wyoming al analizar en El Intermedio sus últimas declaraciones.

laSexta.com
Madrid
Publicado:Jueves,01 octubre, 202022:11
MÁS INFORMACIÓN
El entendimiento entre el gobierno de la Comunidad de Madrid y el Gobierno central está lejos de llegar. Esta mañana, Isabel Díaz Ayuso ha negado rotundamente en una entrevista en 'Es Radio' la versión del gabinete de Pedro Sánchez y ha cargado contra él.
"Están aterrando a la gente diciendo que hay transmisión comunitaria, todo está terrible, supuestas imágenes de hospitales como si todo fuera la muerte. Quien haya ido a alas urgencias verá que la situación no es como la que están vendiendo", ha defendido la presidenta regional.
Así, ha continuado diciendo que las cosas de los madrileños no se tratan como si se escribieran en la servilleta de una barra de bar".
Ante estas afirmaciones ha respondido El Gran Wyoming. "Isabel Díaz Ayuso vive en una realidad paralela a la del resto de madrileños, donde los centro sanitarios están vacíos y hay un dos por uno en PCR, como con las pizzas. No hay martes locos, todos los días son locos", bromea el presentador.
Pero el discurso de Ayuso no acaba aquí, y Wyoming advierte que "tiene un planazo para combatir el coronavirus". "No tengo ego en dejarme ayudar, ¿pero cuál es la receta? El plan de Madrid es el mejor y lo están haciendo en la administración en Estados Unidos: test rápidos, cuarentenas y que la vida siga", ha defendido la política del PP.
Wyoming cree que estas consideraciones no han sido muy oportunas y señala que debería de haber puesto otro ejemplo: "¿Que el plan de Madrid lo usan en Estados Unidos? Allí donde apenas llevan mas de siete millones de contagios y lideran el ranking de víctimas".
"Es la Trump española, solo le faltaba hacer algunos muros en los barrios y pedir que lo paguen los de Vallecas", concluye el presentador.

Las polémicas frases de Díaz Ayuso que dan "risa y miedo"

El Gran Wyoming también ha analizado en El Intermedio las últimas declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Desvela que detrás de las alocadas asociaciones de ideas de Ayuso se oculta un discurso ultraliberal y moralmente discutible.
 
Back