Es una asquerosidad. Este otoño e invierno lo hemos comprobado muchos días mi marido y yo. Había días que era levantarnos y al mirar había varias estelas, luego aumentaban. En muchas ocasiones empezaban a pasar muchos aviones a la vez y el cielo acababa todo guarro con una neblina que no deja pasar bien los rayos. Tengo la impresión de que también se fumiga con sustancias químicas concretas que facilitan la conectividad y la transmisión de ondas y frecuencias para favorecer las telecomunicaciones, sobretodo militares. Luego mirad como las algunas nubes o estelas tienen patrones repetitivos consecuencia de esas ondas.