Felipe y Letizia: Almuerzo con representantes del mundo de las letras y audiencias en Zarzuela.

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Claramente es ella quien se le lanza.
 
Te guste o no es la reina de España, según el protocolo ella puede demostrar más confianza hasta donde corresponde por el evento, claro, pero tú como invitado tienes que ser parco en demostrac iones efusivas ateniéndote a lo que corresponde.
En cualquier juego las reglas que lo rigen han de ser cumplidas por AMBAS partes…La choni no respeta el prtocolo ¿por qué los demás sí han de hacerlo? o_O
 
pensé que la iba a levantar como una palomilla gueal
Pues que lo haga y con energía, que con un poco de suerte la lanza hacia el techo para que observe de cerca los pictóricos detalles del techo:woot:…aunque igual el casco que lleva le protege la cabeza y las dos neuronas que tiene flotando en el espacio intracraneal(n)
 
pues yo la veo mas cara de estar echándole una bronca
Ná, esas son malas-interpretaciones de merde-súbditos. La choni está enfrascá en un intenso debate sobre la carrera literaria del caballero, de quien se ha estudiado todas y cada una de sus obras. La pobre no ha podido esperar a los postres para sumergirse en una profunda entrevista (recordando sus años de periodista aclamada mundialmente) sobre el significado filosófico-religioso en el marco geográfico-histórico (y por supuesto sin olvidar la vertiente político-social) del comentario de Lupe, el niño de seis años que se asoma por unos segundos en el capitulo décimo de su novela menos conocida (de hecho solo un puñado de amigos muy cercanos han tenido acceso a ella) cuando dice: “¿manda algo más el patron?”…:watching:
 
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Mmmmmm........ La Leta no corre peligro con las efusividades me parece.
Si este señor es el mismo que ceñía su cintura de avispa me late que otro es el dueño de su corazón!
Hay miradas que matan de intensa admiración !!!:sneaky:

A ver, a ver... un poquito de orden, que Javier Fernandez tiene novia, (una patinadora japonesa bicampeona del mundo también, y muy guapa) así que no creo que ninguno de estos dos le haya robado el corazón.
Yo siempre he creído que las miraditas como de cordero degollado de Leti a Felipe son debido a la diferencia de altura, que al mirar hacia arriba se te pone esa cara, y seguramente a Javier le ha pasado lo mismo.
 
Ayyyyyyynnnsssss...el "pasado regresa siempre"....
Ese bolso o cluch sobre la mesa...y nosotr@s que
pensamos que ya había aprendido modos e higiene, para
"saber" que no se pone el bolso cerca de la comida y mucho
menos encima de la mesa......¡¡¡¡¡¡qué castigo, Lety!!!!!!

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"A diferencia de otros años, en los que habló por los codos, Letizia estuvo distante, fría"

    • 29 de abril de 2016, 09:19

      Mario Vaquerizo movía sus brazos largos y tatuados cual molino de viento y el economista Leopoldo Abadía lo escuchaba con gravedad. De qué demonios hablarían, nos preguntábamos en el hotel Gallery, en la comida que Planeta ofrece a sus autores el día de Sant Jordi, ¿de la cotización del yen?, ¿del índice dow jones? Me lo aclara Mario rápidamente, “estamos preparando un proyecto juntos”. Abro una boca del tamaño de la catedral de Burgos, y le pido más detalles, el músico me suelta, misterioso, “solo te diré una palabra: Graceland” y se va raudo y veloz a buscar un paraguas a su furgoneta porque llueve y Alaska y él viajan como los viejos roqueros, en furgoneta, desdeñando las elegantes limusinas en las que solemos desplazarnos los escritores de culto. Mario ha venido a Barcelona a firmar “no un libro, sino una cosita” dice con encantadora modestia acerca de su Vaquerizismos, y ella a actuar en Barts, pero no me lo quito de la cabeza ¡Leopoldo y Mario! ¡Seguiremos investigando!

      Eh, señor director, no cierre la página, hay más. Terminamos el día del libro dándonos a la bebida en la fiesta de El Mundo y a los escritores se les suelta la lengua. Casi todos habían estado en la recepción de los reyes y todos me comentan lo mismo: a diferencia de otros años, en los que habló por los codos, Letizia estuvo distante, fría, solo se ocupó del autor mexicano homenajeado (ninguno recordábamos el nombre) y cortó abruptamente todo intento de conversación. No, a mi no me invitaron y aún me pregunto con tristeza por qué.
  • http://www.lecturas.com/blogs/pilar-eyre
 
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